Fictober [Yullen]

12. I'm intertwined with you

Advertencia: Omegaverse, Kanda alfa y Allen omega.

Perdonen las faltas de ortografía.

(ლ╹◡╹)ლ

El lazo que todos los omegas deseaban era algo tan importante para ellos ya que eso les hacía sentir protegidos y queridos. El alfa era el que escogía y marcaba a su pareja destinada y el omega se encargaba de romper el lazo.

Uno elegía quien le pertenecía y el otro decidía si estaría con él.

Un mundo donde los omegas dejaron de ser tan pisoteados y humillados gracias a un dulce omega albino que lucho para sacar adelante a sus amigos y género, todos le tenían respeto por ser el único omega macho que lucho para llegar a ser respetados como se merecían.

El omega albino caminaba tranquilamente mientras tarareaba una canción que su padre le enseñó debía ser dulce y alegre para llamar la atención. Aunque jamás se apego a ello solo sonreía por cortesía, aún podía recordar las palabras de su madre al contarle las "almas gemelas" que habían en su pequeño cuento infantil el también quería conocer a su Destinado para formar una familia feliz pero el destino es algo tan horrible que no pudo conocerlo jamás intento crear una relación con su mejor amigo pero este le rechazo por estar con su amiga, siempre tenía mala suerte en el amor por eso se encontraba caminando tratando de vaciar su mente de cuentos que no sucederán jamás solo en las novelas.

Venía de una familia rica su madre siempre le enseñó los valores más importantes y su padre lo educó social mente y también le ayudo a que su autoestima no sea baja. Lucho para poder tener una título profesional y poner una empresa de ayuda a los omegas.

Ahora con 22 años de edad tenía su futuro escrito para vivir feliz aunque trabajar en una empresa era difícil si no tuviera a Tykki gracias a él podía estar tranquilo por que ellos juntos habían sacado adelante a todos los omegas del infierno que vivían. Por eso en su empresa solo trabajaban omegas y algunos betas. No es que odiara a los Alfas solo que no quería un ambiente en donde incomodaran a sus trabajadores además de que tenía que ir a visitar a Lavi.

Escucho un quejido suave, deteniendo su caminar puso más atención y escucho jadeos alarmado busco el origen del ruido creyendo que era un omega en peligro. Corrió todo lo que sus piernas le dieron y llego a un callejón sintió un aroma fuerte.

En una esquina divisó una cabellera azabache se acercó sigilosamente descubriendo que era un alfa gracias a sus gruñidos que lanzó al verlo acercarse. Un omega no puede gruñir a menos que este en pleno acto sexual. Podía sentir un aroma a café delicioso y embriagante. Siguió avanzando pese a que no quería ir sus piernas se movían solas y su omega empezaba ronronear a gusto.

Con voz temblorosa pregunto si estaba bien, al no recibir ningún tipo de respuesta se acercó más y pudo observar con mayor detalle descubriendo que tenía el cabello largo agarrado en una coleta baja. Escuchaba jadeos y su respiración entrecortada. Jadeo con deseo al encontrarse con esos oscuros ojos que lo miraban profundamente llenos de lujuria.

El alfa estaba en celo.

Lo escucho maldecir entre dientes en su idioma madre. Quiso alejarse pero el gruñido del alfa y su cuerpo no lo dejaban, su omega por sumisión descubrió su cuello sintiendo los besos y succiones en su punto débil. Debía actuar rápido antes de que el deseo le ganase, de donde pudo saco las fuerzas para buscar en su abrigo los supresores que cargaba con él pero había uno especial que era para alfas. Al encontrarlo sintió una punzada de dolor en su cuello lo había mordido con su última fuerza le inyectó el supresor de alfa tardaría en hacer efecto pero serviría.