Maldita Inocencia -Valentina Quintero-

Capítulo 18

Ha pasado el tiempo, para ser exactos 2 semanas, y todo sigue igual de difícil y doloroso para mi, no me han llamado de ningún trabajo he perdido las esperanzas de que alguien quiera contratarme, mi celular no ha sonado ni una sola vez, después de aquella, llamada, la cuál no ha salido de mi mente, me gustaría poder cambiar las cosas y que el pensara diferente, que quisiera apoyarse en mí y los dos salir adelante juntos, superar nuestros pasados y ya, sé que el me esconde algo, algo de lo cual no quiere hablarme, ya me duele la cabeza de tanto pensar en esto, mejor lo olvidaré, por lo menos mientras veo que hago con mi vida. Aprovecharé y llamaré Andrés, sería bueno por lo menos contactarme con alguien que me da su amistad sincera y no me abandonaría fácilmente, estoy a punto de coger mi celular cuando empieza a sonar.

- ¿Hola?

- Hola hermosa, Tu hoja de vida llegó a mi correo, me encantaría hacerte una entrevista, Pero antes necesito que me envíes al correo unas  fotos de cuerpo entero, tú sabes vas a trabajar en un bar prestigioso y necesitamos ver tu imagen es muy importante.

- claro, entiendo, ya te las envio. De verdad gracias por ver mi hoja de vida.

- Que linda, espero por eso, bye hermosa. -cuelgo el teléfono emocionada, por fin tendré la oportunidad, me siento y busco en el cel unas fotos que me tomé antes de que Alek me corriera de su mansión, salgo muy linda, es increíble todo lo que él hizo conmigo. Ya todo enviado me siento a esperar, estoy muy ansiosa la verda. Llega la tarde y sigo esperando, estoy acostada leyendo un libro Tres Metros Sobre El Cielo creo que soy la única persona en el mundo que nunca ha visto la tal película, de repente el sueño se apodera de mi.

Me encuentro en la habitación de la pequeña, han pasado los años, pues está habitación luce bastante diferente, podría decir que se parece a... Oh!!! Dios esto no es posible, yo soy la niña, la niña de... Virginia, todo es muy confuso, veo como virginia le pega a la pequeña, la cuál parece de unos 4 años, la chiquita llora desconsolada y reclama.

- Quiero a mis papas, los extraño mucho, por favor déjame estar con ellos.

- Pues busca una tabla ouija y comunicate con ellos entonces, porque están muertos. -La cara de la niña es de susto y dolor empieza a llorar mas fuerte y Virginia la golpea fuerte en la cara.

Mi celular empieza a sonar y me despierto asustada, por aquel sueño que acabo de tener, yo era la pequeña, ¿por qué tendré estos sueños? cojo el cel y contesto.

- Hola... -espero la respuesta del otro lado de la línea.

- Hola, recibí tus fotos, eres perfecta, nos vemos mañana en la dirección que enviaré a tu correo a las 5:00 pm, te quiero ver más hermosa que nunca.

- ¿Enserio? que feliz me hace, ahí estaré.

- Haya nos vemos bombón de chocolate. 

- Chao. - me paro a gritar de la felicidad, Sí, por fin algo bueno. De una vez empiezo a buscar que me podré para mañana, es mejor temprano que tarde. Son como las 11:00pm prefiero volver a intentar dormir no quiero tener ojeras.

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- Tome su cambio señorita. -Le sonrió al chofer del Taxi y me bajo de este.

- Debo decir que es muy bonito una fachada morada con negro y blanco le da un tono de elegancia super modesto, las letras en blanco que dicen Barranova Oh!! que interesante eso será ¿Italiano o Francés? sin más demoras entró y por dentro es más bonito y por supuesto modesto, mesas de negro con un rojo pasión, un escenario en Rojo Carmesí, chicas bien elegantes y refinadas.

- Holaaaaa !! Mucho gusto me llamo Estefa, me imagino que vienes por el puesto de mesera en este hermoso lugar -La verdad me asusto un poco, está chica se ve que tiene mucha energía, además es muy bonita pelo radiante amarillo, unos ojos grandes y azules, y una sonrisa envidiable.

- Hola, me llamo Megan Smitt, y ps si vengo por la misma  razón.

- Que bueno, estoy muy emocionada, por lo menos ya hice una amiga de trabajo.

- Si, eso creo.  -Son las 5:15pm y aún estamos sentadas aquí, intentamos hablar con una señora que estaba en la barra y sólo nos dijo, esperen sentadas allá.

- Hola  Chicas, ¿más?

- ¿Perdón? -le dice Estefanía a una morena, alta y refinada

- Cada semana llegan chicas para este trabajo y no duran ni dos días, antes de  renunciar y yo no entiendo por que.

- Eh, Hola ¿No las echan? -Le pregunto incrédula, esto se ve muy bien.

- No, que malagradecidas aquí pagan demasiado bien, yo llevo dos meses.

- Perdón por interrumpios os chicas pero necesito hablar con Estefanía y Megan.  ¿Así os llamas verdad preciosura?

- Si, señor -digo afirmando con mi cabeza.

- Permiso para retirarme señor -Dice la morena amigable, se va meneando sus caderas.

- Bueno, les explicaré todo -Asi empezó una larga charla, pero al final quede satisfecha sobre las expectativas del trabajo.
- Vayan a cambiarse ya estando todo claro, nos vemos en unos minutos.

- Que emoción -Dijo la rubia que ya me cae bien, nos fuimos a donde nos indicó, el uniforme era muy lindo, la falda  un poco corta, pero ya me acostumbrare.