Epílogo

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A Faith le encantaba la Reserva. Podia ver el atractivo en toda esa tierra verde y frondosa, era un espacio mucho más amplio y fresco que el Homeland. Sobretodo le gustaba las nuevas personas que no habían sido más que amables con ellos, todos parecían felices de verlos juntos, era un cambio agradable.  Ahora mismo no podía imaginar estar en otro lugar en el mundo.  Una sonrisa curvaba sus labios  mientras miraba las adorables muecas que hacia el pequeño Haven, en su regazo. Le encantaba jugar con las hebras oscuras de su cabello, y llevarlas a su boquita, ella no le hacia la tarea fácil, y podía ver la frustración en los lindos rasgos del bebé.

Amaba a Haven, podía decir que era el bebé especie más dulce y adorable de todos. Con esos ojos marrones asombrosos, y la sonrisa sin dientes arrolladora.

-Le agradas- Le dijo Vanni a su lado. Estaban teniendo un picnic con los chicos. Si levantaba la vista, podía ver a su sexy compañero jugar un partido de fútbol, junto con Smile y otros machos. Ellas por su lado, se había quedado en la manta, cerca de la cancha, mimando al pequeño Haven y charlando
-Realmente estoy un poco celosa. Haven tiene bastante mal humor con ese juego.

Faith rió- Él es un amor. Creó que voy a tener que quitártelo un par de noches.

-¡Oh! Calla. No sabes como te tomaría la palabra. Parece un siglo desde que Smile y yo tuvimos un momento sin interrupción. Si sabes lo que quiero decir.

-Puedo cuidarlo unas horas si quieres. Podrías tener una cita con Smile- le guiño el ojo. Vanni le sonrió ampliamente.- no sabes como te lo agradecería. Las chicas siempre están queriendo cuidarlo, pero Smile es un poco sobreprotector con él-  resopló-  creo que te permitiría cuidarlo a ti, ya que eres la compañera de Jericho. Eres de la familia. 

Miles de mariposas corrieron por el vientre de Faith al escucharla. Vanni era muy dulce, y le agradaba mucho, aunque Jericho siempre tenia miedo de asustarla. Ella le había dicho un millón de veces que era una idea absurda, justo ahora podía ver cuanto Vanni lo queria 

-Dalo por hecho.- le sonrió. El bebé hizo un sonido extraño antes de romper a llorar. Faith se sobresalto, y miro los ojos húmedos del pequeño. Trato de consolarlo inmediatamente, pero se dio cuenta que la vista del cachorro estaba puesta en su madre.
-Uh! Creo que ha perdido su encanto por mi- bromeó mientras se lo entregaba. Vanni le sonrió de vuelta, acomodándolo en su regazo, para amamantarlo. -Es su chillido de -Estoy-tan-hambriento-que-puedo-romper-tus-tímpanos. Es casi tan impaciente como su padre- ambas rieron.

-Puedo entenderlo. Es algo de las nuevas especies, definitivamente.
-Creo que es de ellos. Ya sabes. Seguro Jericho, no puede tener sus manos apartadas de ti.

-Me acojo a la quinta- ambas voltearon a mirar a la cancha, cuando algunos especies gritaron. Habían marcado un gol. Faith le mando un beso desde su sitio, cuando Jericho la miro con una sonrisa. Había sido su equipo el que anotó el punto, no lo dudaba, habían hecho una apuesta antes sobre el partido. Y ella estaría dichosa de cumplir su parte. Ella pudo ver la mirada conocedora en su rostro. Seguramente tenían el mismo pensamiento.

-Oh! Ustedes son tan lindos  -Vanni la miro emocionada- realmente me alegro de que estén juntos. Jericho es tan...feliz ahora.
Faith parpadeo hacia ella. -Él me hace feliz.
-Yo puedo ver eso. Jericho y yo, no tenemos una relación muy cercana, pero...se que se mantenía a distancia de todos. Incluso mi Smile. Ahora parece haber quitado un peso de sus hombros.

-Creo que me sobrestimas. No he cambiado a Jericho, sólo le he dado amor. Lo necesitaba, tanto como yo.

Vanni le sonrió-  no lo dudo. Me alegro mucho por ustedes. Y uhm!¿ Han planeado tener hijos?-Faith casi se atraganta con su zumo ante la sorpresiva pregunta-oh! Lo siento tanto. Ese pregunta fue simplemente imprudente.

Jerichó- Nuevas Especies Donde viven las historias. Descúbrelo ahora