Once

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No pudo dormir bien en toda la noche, en su mente se repetían las palabras del doctor Ahn. Se sentía asustado, ni siquiera se sintió capaz de ver de nuevo a Jinki.
Se sentía como en un sueño, se dejó caer en el futón y ahí estuvo tratando de dormir, no quería pensar tanto, quería olvidarse de todo, quería que todo fuera una mentira, deseaba nunca haber conocido a Jinki.
Porque cuando por fin empezaba a aceptar que el mayor le gustaba se enteraba de eso. Tenía demasiado miedo, toda su vida huyó del dolor como para sentirlo ahora. No quería. Simplemente no quería sufrir.
Se paró decidido y saco las maletas con las que había llegado. Desesperado aventó toda su ropa dentro de estas, sin siquiera doblarlas. Revisó todo, habitación por habitación asegurándose de que no olvidaba nada. Tomo su teléfono y envió un mensaje.

"No soporto más estar aquí. Ven por mi ahora"

Se iría, regresaría a la ciudad y le suplicaría a Dong Suk que le dieran otra condición para obtener la herencia. Saco sus maletas fuera de la casa y se sentó en las escaleras de la entrada. El sol apenas comenzaba a salir, sentía sus ojos cansados pero no podía dormir. Porque cada vez que cerraba sus ojos, lo veía él. Y no quería.

Miro a su alrededor. Las escasas viviendas, la hierba alta, los sembradíos de trigo, las siluetas de las montañas. El árbol que estaba en frente sobre la colina se meneaba con el viento, recordó el flashback que había tenido hace unos días. ¿Por qué tenía ese tipo de recuerdos? ¿Quiénes eran esos niños?
Después de un rato escucho el motor de un carro acercarse , era lo correcto, tenía que irse y empezar de nuevo como si nada así que se levantó. Lo hacía por el mismo y por Onew. De un modo le hacía mal estar juntos, a ambos. MinHo por miedo a sufrir y a Onew por enfermedad.
Que cruel era el destino, o al menos eso pasaba por la mente del pelinegro. Sabía que irse sin decirle a nadie era demasiado descortés de su parte, pero no quería que lo detuvieran, no quería que le aclararan las ideas y lo trataran de convencer porque no se quedaría.

Su amigo bajó lo más rápido que pudo, Kyuhyun le había dicho a Changmin que MinHo quería regresar a la ciudad, que fueran por el enseguida, pero Changmin se ofreció a ir el solo.

- MinHo – dijo una vez quedo frente al menor, hecho un vistazo a las maletas de este y volvió la vista a la de MinHo - ¿Por qué de repente? –

Pregunto preocupado, se suponía que su amigo tenía que quedarse hasta concluir sus estudios, no tenía permitido abandonar.

- Ya no quiero estar aquí – contesto con indiferencia tomando una de sus maletas para llevarla al auto.

Changmin tomo la maleta faltante y siguió el paso apresurado del pelinegro.

- Pero MinHo – hablaba mientras MinHo ponía las maletas en la parte trasera del auto – No puedes dejar el pueblo hasta que... -

- No quiero hablar – lo interrumpió molesto y lo encaro – Solo vámonos –

Subió al auto y azotó con fuerza la puerta. Changmin suspiro y corrió al lado del piloto, una vez dentro encendió el auto y se fue de ahí. MinHo se acomodó en el asiento y volteo hacia la ventana, ignorando completamente a su amigo.

Pasaron por el hospital del pueblo y MinHo sintió un vacío en su estómago y en el pecho, se le quedo viendo hasta que estuvo fuera de su alcance visual. ¿Qué diría Onew cuando se enterara que se fue? ¿Le afectaría? ¿Ya habría despertado?

- MinHo –

La voz de su amigo lo saco de sus pensamientos y se acomodó en el asiento.

- ¿Qué sucede? – Pregunto de nuevo Changmin al no recibir respuesta de su amigo – Dime la verdadera razón por la que te quieres ir del pueblo –

Sin Querer - Onho ver.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora