Capítulo 8.

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Sin darme cuenta si quiera, el telefonillo cayó de mis manos y dio un fuerte golpe contra la pared. No podía ser posible que estuviera aquí. No hoy, no ahora, no después de haber dado un concierto en Estados Unidos hace escasamente nueve horas.

-  ¿__________? ¿Estás bien? - dijo dándole golpes a la puerta.

Las palabras no salían de mi boca, no creía que él estuviera ahí, era imposible. No. Otro golpe fuerte en la puerta sonó interrumpiendo mis pensamientos.

- Si no me contestas sabes que soy capaz de tirar la puerta abajo. ¿Estás bien? Contéstame, por favor- dijo con la voz agitada.

- Sí, es... estoy bien. Deja de pegar golpes y vete, te... te lo ruego- dije sabiendo que iba a ser incapaz de mantener una conversación con él. Estaba algo enfadada. De los miles y miles de mensajes que le había mandado no me había contestado a ninguno. Hoy me ha mandado uno y sí, ya sé que por ahí dicen que más vale tarde que nunca, pero me dolió que no contestara a nada. Estuve un mes completamente aislada de él ya que nadie me decía nada y eso me hacía sentirme de todo menos bien.

- No me voy a ir. He venido a hablar contigo y eso voy a hacer. Por favor, abre la puerta.

- Ha... Harry, no me lo pongas más difícil de lo que ya es para mí, ve... vete.

- No voy a irme.

- Haz lo que quieras. Yo... yo no te voy a abrir-dije para volver a poner el telfonillo en su sitio y después dirigirme al salón.

¿Él había cometido una locura y yo no le hacía caso? ¿Qué clase de novia era? Ni yo lo sabía, solo sé que me estoy comportando de la peor manera posible solo porque me ha rechazado tantas veces y ayer se dignó a hablarme. De un momento a otro sentí como en la parte de arriba de la casa sonaron varios golpes. Me levanté alarmada, alguien había entrado en casa y no sé por donde. Subí las escaleras haciendo el menor ruido posible para así no alarmar al intruso y poder ver quien era, la verdad es que estoy muy asustada, nunca me había pasado nada por el estilo. Al estar en la primera planta pude escuchar como el ruido venía de mi habitación y no me quedó otra que andar hasta allí. Abrí despacio la puerta y ahí le ví. Yo iba a matar a este hombre.

- ¿¡Se puede saber que haces aquí?!- grité haciendo que él me mirara alarmado - ¿¡Tú sabes el susto que me has dado idiota?! - dije acercándome a él para una vez estar en frente suya darle leves golpes en su pecho.

- Lo siento, solo quería hablar contigo y de aquí no me voy a ir hasta haberlo solucionado todo- contestó agarrándome de las manos para impedir que le siguiera dando golpes.

- Puedes hablar todo lo que quieras, no voy a escucharte- me libré de su agarre y me dí media vuelta para no verle a la cara. Si lo hacía iba a caer muy rápido y era lo que menos quería en estos momentos.

- Por favor ________, escuchame. De verdad te lo pido, estoy muy arrepentido- dijo tocándome el hombro haciendo que un escalofrío recorriera toda mi espalda.

- No voy a escucharte Harry. He estado mucho tiempo aislada de ti solo porque tú lo has querido. Lo peor de todo este mes en el que no he sabido nada de ti porque tú no me contestabas a mensajes y nadie me decía nada sobre ti ha sido que me he pasado todas las noches llorando y lamentándome por haber salido aquel día solo a divertirme a la pista de baile. Eso sin quitar el hecho de que no me creyeras. Eso... eso me dolió, me dolió mucho Harry, no... no sabes cuanto- dije con la voz entrecortada dejando que una lágrima rodara por mi mejilla.

De un momento a otro sentí sus brazos abrazándome y yo ni si quiera hice el esfuerzo de separarme de él. Le necesitaba, llamadme bipolar o lo que querais, pero le necesitaba y él lo sabía. Con sus grandes manos empezó a acariciarme la espalda para intentar tranquilizarme, pero consiguió totalmente lo contrario. Más lágrimas iban cayendo de mis ojos mientras tenía mi cabeza apoyada en su pecho y él nos dirigía a los dos a la cama. Una vez allí Harry se sentó en la cama haciendo que yo me sentara encima suya con las dos piernas mirando hacia la derecha y la cabeza sobre su hombro.

- ________, ya bebé. Lo siento de verdad. Nada más volver al local Michael me dijo que no había pasado nada, pero no le creí. Al día siguiente cuando estuvimos desayunando él me lo volvió a decir y me explicó todo. Siento no haberte creído, de verdad que lo siento. En el momento en el que os vi tan cerca el uno del otro me enfadé muchísimo. Creo que todo lo que me pasó aquella noche fue porque tengo demasiado miedo a perderte. Demasiado miedo a perder a una de las pocas personas que ha creído en mí desde el principio y ha cambiado su vida por mí. De verdad que lo siento- dijo apartando un mechón de pelo de mi cara.

- ¿De... de verdad lo sientes?- pregunté mirándole fíjamente a los ojos. Esos ojos verdes que tanto me encantan y que en este momento, como muchas otras veces, estaba perdida en ellos.

- Claro que sí princesa. Creo que si no me perdonas...- dijo bajando la cabeza- Creo que si no me perdonas me sentiré la peor persona del mundo. Aunque esí es como me ...

Y antes de que acabara la frase le besé. Le besé con fuerza y necesidad haciendo que se tumbara en la cama y pusiera sus manos alrededor de mi cintura.

- Claro que te perdono cielo, pero por favor, creeme de ahora en adelante- dije un poco agitada separándome de él y mirándole a los ojos con una sonrisa.

- Claro que lo haré princesa, te quiero.

- Y yo a ti- dije dándole un pequeño beso, el cual nos llevó a muchísimos más durante toda la mañana.

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¡Hola chicas!

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡SOOOOOOOORPREEEEEEEESA!!!!!! Creo que no os esperábais capítulo hoy je :3 Esto es como una especie de regalo por las... wow... CASI 60000 LECTURAS Y 2140 VOTOS AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH. EN SERIO. MUCHÍSIMAS GRACIAS AY. SIN VOSOTRAS NO HABRÍA SEGUIDO LA NOVELA Y AY, MUCHÍSIMAS GRACIAS EN SERIO. OS QUIERO MUCHÍSISISISISISISISISISISIMO.

Y esto es todo por hoy babies(:

-POOOR CIERTO. Voy a desactivar la cuenta de Twitter de la novela, espero que no os moleste, pero es que ahora mismo no le veo utilidad alguna(:

Beeeeeeeeesooooooooos :* <3

Todo Comenzó Gracias Al 1DDayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora