Capítulo 25

938 43 4
                                    

*Narra Carlota*

Pues aquí estoy. Liam y yo hemos pasado toda la mañana juntos y por lo que se ve también vamos a pasar la tarde juntos. Ya ha pasado una semana desde que estuve hablando con __________ de mis sentimientos y en estos siete días han pasado demasiadas cosas. Liam y yo hemos pasado desde entonces mucho tiempo juntos, me da muchos abrazos, nos besábamos cuando mi hermano no estaba y a veces me robaba besos cuando él estaba delante, pero Niall nunca se ha llegado a dar cuenta, ahora está muchísimo más cariñoso conmigo y me gusta eso, la razón la tendreis dentro de poco.

*Flashback*

Hoy era cinco de enero. Estábamos Liam y yo solos en la casa. El resto de los chicos habían ido a preparar no sé qué y yo no tenía ganas, pensé que me iba a quedar sola en casa, pero antes de que los chicos se levantaran para salir por la puerta, Liam dijo que él tampoco tenía ganas y que se quedaba conmigo. Eso me extrañó, él siempre está dispuesto a salir con las chicas, pero bueno, si no quiere no quiere. Al irse los chicos nosotros no sabíamos qué hacer

- ¿Te apetece dar una vuelta?

- La verdad es que me apetece más estar en casa.

- Te tengo que preguntar una cosa y aquí no lo puedo hacer.

- ¿Por qué no?

- Si vienes lo verás.

- Eso es chantaje Liam.

- Vamos, sube a arreglarte.

- No quiero Li- dije tumbándome en el sofá en el que hace unos minutos me encontraba sentada

Estuvo durante unos minutos callado y de repente, sin saber como ni en qué momento, me encontraba entre sus brazos. Me tenía cogida y me estaba llevando a mi habitación. Me encontraba muy bien entre sus brazos, pero no me quería mover del sofá.

- ¡Liam, bájame!- le grité mientras que pateaba

- No. Y estate quieta que vas a terminar haciéndote daño.

Seguí forcejeando durante un rato más, pero me dí cuenta de que no iba a servir para nada. Me estuve quieta y noté como se estaba riéndo.

- ¡No te rías de mí, tonto!

- ¿Tonto?

- Sí, tonto.

- Bueno, pero al menos vendrás- dijo soltándome haciendo que con mis pies tocara el suelo.

- ¿Quién te ha dicho eso?

- Yo. Vamos, arréglate ya.

- Que no quiero.

- ¿Qué tengo que hacer para que lo hagas?- dijo un poquito molesto.

- Em... no sé.

 - A ver si esto funciona- dijo acercándose a mí y agarrándome por la cintura.

Poco a poco fue acercando su cara a la mía y después de eso rozó mis labios con lo suyos.

- ¿Vienes entonces?

- Nop- dije con una sonrisa en la cara.

Volvió a acercar su cara a la mía y esta vez me dio un gran beso. Ese beso duró unos cuantos de minutos y al separarnos lo único que hicimos fue sonreir.

- Y... ¿ahora?

- En dos minutos estoy abajo.- dije cerrando la puerta y esuchando su risa.

Abrí mi armario y ví toda la ropa que tenía. Había muchísimas camisetas, pantalones, faldas, vestidos... hoy me pondría algo cómodo, pero calentito. Cogí una sudadera gris de la marca Obey, unas mallas negras, mis Vans también negras con purpurina y entré al cuarto de baño. Me dí una ducha rápida, cuando terminé salí, me sequé y me vestí. Me dejé el pelo suelto, me eché brillo de labios y un poco de quita ojeras. Cuando acabé eché la ropa a lavar y bajé al salón. Liam todavía no estaba y yo no sabía que hacer. Tenía un poco de hambre, pero seguramente iríamos a un Sturbucks o a algún sitio para comer algo, no le creo si me dice que no quiere nada para comer, últimamente ha comido mucho más que Niall, eso ya es decir. Mientras que pensaba en qué hacer sentí unos brazos abrazándome por la cintura.

- ¿Lista?

- Claro- respondí con una sonrisa.

Salimos de casa y él cerró la puerta con llaves mientras que yo bajaba los tres escalones que separaban la calle de la casa. Estuve esperándole y cuando estuvo a mi lado me agarró de la mano. Sorprendida por su acto, giré mi cabeza para mirarle y me lo encontré mirando al frente sonriendo. Su sonrisa, madre mía. Es una de las más bonitas que he visto en toda mi vida. Me he dado cuenta de que él me gusta, me gusta mucho, es más, estoy enamorada de él. No hay palabras que puedan describir lo que siento cuando estoy cerca de él, cuando me da la mano, cuando estamos solo, cuando me abraza o cuando me besa, no hay palabras para describir como me siento cuando él está a mi lado.

- ¿Carlota?

- ¿Sí?- dije un poco aturdida, a saber desde cuando me estaría llamando.

- Llevo llamándote desde hace un raro- respondió soltando una pequeña risa - ¿te apetece que entremos en este Starbucks?

- Um... sí, claro.

Entramos en el local, pedimos lo que íbamos a tomar y nos sentamos en una mesa apartada del resto, aunque solo había una pareja, cogimos aquella por precaución.

- ¿En qué pensabas antes?

- No... en nada- respondí titubeando.

 - Pequeña, te conozco desde hace mucho y sé que confías en mí. Cuéntamelo.

 - Confío mucho en ti, pero esto no te lo puedo contar.

- ¿Por qué?

- No estoy preparada como para contarte lo que estaba pensando.

- Bueno, cuando quieras me lo cuentas, ¿si?- dijo poniéndo su mano sobre la mía.

- Claro- respondí sonriendo.

Estuvimos esperando durante cinco minutos a que nos trajeran nuestros pedidos. Todo ese rato de espera estuvimos en silencio y mientras que comimos la cosa no cambió. Todavía no estoy preparada para decirle que me gusta, no sabía como decírselo y me da demasiada vergüenza hacerlo. Este silencio ya se estaba tornando incómodo y decidí romperlo.

- Li, ¿qué era lo que me ibas a preguntar?

- Dentro de un rato lo sabrás.

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Hello my babies(:

¿Cómo estáis? Yo bien, wehe. Aquí teneis el capítulo 25 y espero que os guste.

Beeeeeesoooooooooos :*

Twitter: @TCGA1DDay

Todo Comenzó Gracias Al 1DDayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora