15. Me voy a México, Karma.

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Karma Pov's
Entrando al hospital, mis padres nos dejan solos un momento, caminamos hasta la recepción, la señora de unos cuarenta años, nos atiende.

- Buenas tardes, ¿Sala de maternidad?

A la torre.

- ¡Nació! ¡Y no me dijiste!

- Karms, esto lo hablamos en unos minutos - susurra.

- En el segundo piso, allá puede preguntar por lo que necesite.

Asentimos, nos ve con mala cara.

¿Creerá que estoy embarazada?

- Mamá esta dando a luz, mi primo me marcó, ¡Tendré una hermanita, Karms!

- Felicidades, Esdra.

Me lanzo a la cama, sentada en el pequeño sofá, esta mi tía Kope y recargada en el marco de la puerta, mi tía Gio.

- Y ahí quedó.

- Les falta un poco de romance a ustedes - señala, mi tía Kope.

- ¿Me gusta? Ahora que lo pienso, no estoy tan segura.

- Karms, eres como una sobrina para nosotros, te conocemos desde que saliste de la Sala de maternidad, siendo sostenida por Mike que iba llorando de felicidad, me acuerdo que dijo: "¡Tiene los ojos de la piojosa!"

- Por algo te decimos que sí, te gusta, y se te nota, en algo debiste sacar a Mike, lo cursi o de los dos, enamoradizos.

- ¡Rondazquez is real! - grita mi tía rubia.

- Nop, no lo es.

- Lo va a ser, niña.

- ¡A comer! - la voz de mamá nos hace bajar.

- Piensa en lo que te dijimos.

- ¿Que me dijeron?

- Ronda tenías que ser - murmura mi tía Kope - Karol ¿No había uno más menso que Mike?

- Nop.

- ¡Kaaaarmaaaaaaa!

- Te hablan morrita, allá afuera, parece que es Jacob - mi tía G se asoma.

- Pensé que era Charlie o Carlos - me desánimo.

- ¿Que paso?

- Me ignoran, por eso me junto más con Jacob o Esdra, e incluso con Leandro y Jeanine.

- Buenas tardes - entra a la casa.

- Buenas tardes, Jacob, ¿Esta tú papá? Tengo que hablar con él.

- Eh sí, esta dentro, con mamá.

- Excelente, ya vuelvo, ustedes coman, hey, Gio, Kope, cuidenlos bien.

- Si mi generala - asienten.

Después de comer, nos sentamos a ver algo en Netflix, Jacob esta recargado en mí, yo en mi tía G, y ella en mi tía K, lo más cómodos posibles. Mamá volvió a la hora, con una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿Que dirías si me voy a otro país?

- No sé - no le presto atención.

- Me voy a México, Karma.

- Que bien. Espera ¿Que?

- Me voy a México, Karma.

-¿ Y-y la obra? Eres de los mejores amigos que tengo - lo abrazo.

Me doy cuenta que mi mamá y mis tías ya no están.

- V-vale - asiente, corresponde mi abrazo - te voy extrañar.

- ¿Por eso son las cajas en tu patio?

- Sí, me tengo que ir a empacar, nos vamos el viernes - besa mi mejilla - me despides a tu mamá y a tu papá.

- Vas a seguir sin agradarle.

- No lo dudo.

Se ríe.

Me ignoró.

- ¿Me van a contar que les pasa o que onda?

Me ignoran.

- ¿Que pedo con ustedes? Un día me hablan super buena onda y al otro ya no existo para ustedes.

No me miran.

- No me laten sus actitudes - bufo.

Se miran.

- ¿Que?

- Karma, no te podemos decir, Carlos no quiere - confiesa Charlie - en cuanto podamos te diremos, pero por favor, no nos hables.

- ¿Pasó algo? ¿Los puedo ayudar? ¿Los amenazó, O'Higgins?

- No, para nada, es decisión nuestra.

- Vale, iré al aeropuerto, adiós.

Me doy vuelta, siguen en lo suyo.

Italianos, son raros.

Afuera está mi mamá, con unos jeans, una camisa rosa palo manga larga, con los últimos dos botones sin abotonar, y unas plataformas negras, muy juvenil, sonríe a su celular.

- ¿Tu también me vas a ignorar?

Hago un puchero, me mira y se suelta a reír, todos se le quedan viendo, no es que mi mamá tenga la risa más delicada del mundo, hace una seña para que las dos subamos, quedan treinta minutos, duraremos un buen rato en carretera para llegar al aeropuerto.

- ¿Lo vas a extrañar?

- Era algo así como tú y mi tío Lío.

- Solo que Jacob no se cree vampiro.

- Vampichico.

- Está loco - nos reímos.

Noche de álbum, una rara costumbre que estamos empezando a agarrar, es un miércoles en la noche, papá viene a la casa con fotos o álbumes que tenga o pide prestados a mis tíos, mamá saca los suyos, nos sentamos en la sala, apagamos los celulares, ...

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Noche de álbum, una rara costumbre que estamos empezando a agarrar, es un miércoles en la noche, papá viene a la casa con fotos o álbumes que tenga o pide prestados a mis tíos, mamá saca los suyos, nos sentamos en la sala, apagamos los celulares, la TV, todo, mamá hace algo para botanear, vemos las fotos y ellos me cuentan la historia de esa fotografía.

Ahora mismo estamos viendo una dónde yo tengo como seis años, me veo enojada y papá se está riendo de mí.

- En esta foto, tú - mamá me señala - te enojaste porque Mike no te quizo llevar a la casa de Valu, porque querías ver a Valérie, hiciste un berrince tremendo que de la vergüenza nos tuvimos que salir del restaurante.

Pasamos a otra. Sale papá con mi tío Jorgito usando lentes y bufandas de mujer.

- Ahí le robamos ropa a Anita, es Rugge quien tomó la foto, fue una tarde en la que todas salieron a comer.

Otra, mamá se ve de unos dieciséis años, papá de diecinueve, me confirman las edades. (Multimedia) se ven muy chiquitos.

- ¡Karol! ¡Eras un minion!

Papá se suelta riendo.

- Quiero chica estabas, ma'. Con razón se decía que estabas muy chica para ser madre.

- Es que no aparento lo que tengo.

Daughter of Micharol Donde viven las historias. Descúbrelo ahora