Kion x Fuli un amor para siempre

CAP.8

Narra Kion:

Y esa es la razón por la que no quería jugar al juego... en fin, algún día me las pagará. Por culpa de Kiara casi arruino la mejor amistad con la chica mas especial para mi, y eso no podría soportarlo. Decidí comer un poco para olvidarme del tema.

-DESPUÉS DE CENAR-

-Kion- me llamó mi madre -ven un momento, quiero hablar a solas contigo- entonces me puse muy nervioso, mi madre no era una persona fácil de engañar y ella nunca se rendiría hasta saber la verdad.

-voy mamá- con mis patas temblorosas, comencé a avanzar poco a poco hacía ella, que me esperaba en una zona apartada de la roca del rey -¿de que quieres hablar?-

-que te parece si hablamos de lo que sucedió cuando estaba ausente- dijo ella mirándome seriamente -dime la verdad, ¿que te mantenía sonrojado?- en cuanto dijo eso, tuve la maravillosa idea de fingir mi muerte.

-yo...- suspiré pesado y decidí hablar, no tenía caso mentirle a mamá -mientras tu no estabas, Kiara, Fuli y yo jugamos secreto o castigo, Fuli escogió castigo y Kiara eligió el juego del pocky...- respiré con nerviosismo -y sucedió lo que al final del juego siempre ocurre- dije sintiendo la sangre subir por mi rostro.

-entonces... Fuli es quien te gusta- resolvió mi madre -si no, no podrían haberse dado un beso, ¿o me equivoco?- yo solo asentí levemente.

-solo que... no se como decírselo, ni siquiera somos de la misma especie, y no se si ella esté interesada en alguien como yo...- dije sin pensar admitiendo mis sentimientos por ella.

-tu debes dejar fluir tus sentimientos, habla con el corazón y con sinceridad, se que ella no te rechazará Kion, y además, ¿Quién sabe? puede que si te corresponda- dijo tratando de animarme.

-gracias mamá, aunque tampoco se como lo vaya a tomar papá...- comenté sin muchas esperanzas.

-yo me ocuparé de eso, tu no te preocupes hijo- dijo mi madre sonriendo.

-gracias mamá- le dije de nuevo, de verdad le agradecía que intentara ayudarme.

-no es nada hijo- respondió ella saliendo del lugar, caminando hacia donde estaban los demás.

Seguí a mi madre hasta llegar, ahí observé a Kiara, que parecía preocupada, se acercó a mi.

-oye, yo... lamento si te metí en problemas con mamá...- comenzó a disculparse ella.

-no te disculpes... de hecho, gracias a ti, mamá sabe que ella me gusta y me apoya- ella levantó la vista -además, tratará de convencer a papá-

-supongo que es una buena noticia, ¿no?- preguntó sonriendo un poco.

-si, tienes razón- dije antes de escuchar la voz de mi madre.

-niños, es hora de dormir, vamos- anunció mi mamá para empezar a moverse.