Capítulo doce: Castigo, Orgastro, Fase de obscuridad y Bolt.
—¿Qué pasó allá dentro? —Pregunté con la curiosidad al límite. Es decir, probablemente están a punto de sacrificarnos.
No me habían dejado entrar a la reunión y tampoco me habían dejado acercarme, porque según ellos yo aún era una novata y tenía que dejar que ellos discutieran.
Total, y absurdamente injusto.
Caminé siguiéndoles el paso, aunque con cierta distancia por si estaban a punto de sacrificarnos poder huir.
Margaret precavida vale por dos.
—No nos van a matar Margaret —Soltó Stewart cansado—. Sólo recibiremos un castigo por desobediencia.
Margaret III - muerte 0. Ja, ten maldita perra... esperen un momento ¿qué tipo de castigo recibiremos?
—¿Qué nos harán? —El miedo se notó en mi voz.
No podía creer que un dhampir pudiera sentir eso, prácticamente es un disfraz el que usamos, pues tenemos emociones y sentimientos como cualquier otro humano. Quería ser una vampiro de verdad, no sentir nada.
—A ti nada, eres la princesa —Elevó sus hombros y noté cierto odio en aquellas palabras por lo que llegué a la par suya y lo miré incrédula.
—¿Por qué hablas así? ¿Acaso yo pedí ser princesa? Sabes que ni siquiera me queda ese término, soy una novata ¿recuerdas?
—Lo siento princesa —Espetó con odio—, no fue mi intención ofenderla —Su mandíbula se tensó.
¿Qué mierda?
—Vete a la mierda Stewart —Escupí.
Me di la vuelta para irme de ahí, de todos modos, no iba a recibir ningún castigo.
—Princesa tiene que elegir un castigo —Un líder habló tensándome.
Fruncí el ceño y dirigí mi mirada a mis dos amigos, ellos miraban hacia adelante evitándome.
—¿Elegir un castigo? Ellos son mis amigos yo no los quiero castigar —Hablé alto para que aquellos dos imbéciles escucharan, ninguno de los dos se inmutó.
—Princesa, en la reunión decidimos que usted iba a aprender a ser un vampiro de verdad y que para ello nosotros mismos debíamos enseñarle, así que, como primer factor, debe de ser justa con las reglas y sin importar quienes hayan cometido la infracción debe de castigarles —Explicó extendiéndome una página de papel—, puede elegir cualquiera de esos —Señaló.
En esta estaban escritos castigos crueles que provocaban dolor tan solo de escucharlos y literal los únicos más rescatables eran lo que implicaban comida: no comer por una semana y estar encerrado en un cuarto lleno de sangre y no comer por una semana y salir del castillo todo el día, esto implicaba también lo de no matar a ningún humano y si lo hacía el castigo sería doble. Sin embargo, no quería que mis amigos fueran castigados, si los castigaban a ellos tendrían que castigarme a mí, después de todo yo fue la que provocó esto.
—¿Qué pasa si no elijo ninguno?
—En ese caso lo elegiríamos nosotros.
—¿Y si no los quiero castigar? —El me miró como si esperara que fuera una broma.
—Verá princesa, usted misma nos permitió liderar hasta que tuviera experiencia y eso es lo que estamos tratando de darle, así que elija o no el castigo, siempre serán castigados. De una manera al azar claro está —Respondió entrando al cuarto.

ESTÁS LEYENDO
Besos color sangre
VampirMargaret ha amado a los vampiros desde que tiene memoria, luego de unos años llega a la conclusión de que estos no son más que ficción. Sin embargo, su vida da un drástico giro al conocer a Stewart quién le demuestra que los vampiros si son reales. ...