「 It's Mine - Yoongi & Tú. 」

28

Le sonreí al espejo por un nuevo día esperando al nuevo Suga, y me dirigí hacia el comedor.

-Hola, nena.- Saludo Yoongi.- Te aviso que iremos a la casa de mí madre. Irán algunos primos míos de seguro.- Sonrió.

-¿A qué hora?- Pregunté.

-En dos horas.- Observo su reloj y siguió tomando su café.- Ahí está tu café, bebé.

-Gracias.- Sonreí, este Suga me estaba gustando.

Finalmente salimos, yo estaba con un buzo un poco más grande de mí talla, unos zapatos converse y una falda que combinaba con el buzo.

finalmente prendí mí celular con valentía al ver esos muchísimos mensajes.

Min Ho ❤: ¿Dónde estás?
Dime por favor, estoy
Desesperado.

Min Ho ❤: ¡Ha-Neul!

Min Ho ❤: Te necesito,
Por favor dime dónde estás

Tú: Estoy con Yoongi, me
Secuestro, estoy nuevamente
En Seoul.

Min Ho ❤: En unos días
Iré para allá.

Fruncí mis labios con preocupación y apague mí celular al ver que ya estábamos llegando.

-Llegamos, baja del auto, amor.- Bajé del auto y el bajo luego.

-Se han mudado al parecer.- Hablé.

-Ah, sí claro, la casa antigua era una asquerosidad.- Hizo una mueca y tocó la puerta. Al instante la madre de Yoongi abrió la puerta color blanca.

-¡Hola, Yoongi! ¡Oh, Hola Ha-Neul! ¿Cómo haz estado?

-Muy bien, señora.- Sonreí tímida.

-Me alegro muchísimo, Yoongi hace tanto no ves a tus primos, ven.- Nos dirigió hacia el Living bastante grande.

Tres chicos demasiado lindos, nos saludaron, cada uno más bonito que el otro.

-Hola, un gusto soy BamBam.- Hizo una reverencia y sonrió con dientes.

-Tambien un gusto, soy Jaebum.- Hablo el que tenía la expresión más seria, con cabello negro.

-Tambien yo. No sé olviden de mí.- Rieron los tres chicos.- Soy Youngjae.- Se presentó.- Un gusto, bella dama.- Beso mí mano.

Los celos de Suga hirvieron, y las venas se hicieron más notorias.

-Tambien está Kwan, tiene seis años, está arriba.- Agregó la madre de Suga.

-¿Puedo ir a verlo?- Pregunté.

-Claro. Segunda habitación, linda.- Indicó y caminé con paso rápido hacia allá.

Abrí la puerta y vi a un pequeño niño de ojos medianos color café, piel totalmente pálida, y cabello negro jugando con los autos. Era una dulzura.

-Hola.- Moví la mano en forma de saludo y entré a la habitación.

-¡Tú eres la esposa de Yoongi!- Exclamó sonriente- ¡Noona!~ Yoongi lleva hablando mucho de ti, yo ya queria conocerte, Noona.

-Bueno, ya me conoces.- reímos.- ¿Puedo jugar?

-Claro, Noona.- Respondió entregándole un auto color bordo con las ruedas color negro y pegatinas de dibujos animados.

Finalmente paso media hora y llegó Jaebum que entro para llamar a Kwan.

-Suni te llama.- Hablo Jaebum con la puerta abierta y la mano en la manija.

-¡Seguramente hizo el Kimchi!- Exclamó alegre.- Luego seguimos jugando, noona. Me divertí mucho.- Y salió corriendo, era un dulce.

Jaebum cerró  la puerta y lo observé confundida.

Finalmente se acostó arriba mío en forma de besarme. 

-Eres tan linda.- Susurro en mí oído, y luego beso mí cuello.

-¿¡Estás loco?! Tengo esposo.

-Eso te hace más sexy, y la relación sexual más peligrosa.- Contestó y intento deshacerse de mí buzo.

-Déjame.- Me quejé peleando por que no me quite el buzo color negro que tenía.

-¡Vamos, quitatelo!- Me beso un largo tiempo pero no correspondí el beso.

-¡Ha-Neul! ¿Que carajos estás haciendo?- Grito Suga.