Enamorado De La Profesora (Shikatema)

Una Decisión

Pov. General

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Después de cinco años la verdad será revelada

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- ¿Podemos empezar? - Shikamaru empezaba a perder la paciencia; el movimiento frenético de sus dedos y los puños apretados delataban sus nervios y ansiedad.

Se caracterizaba por ser una persona pacífica y calmada que evitaba el estrés y los problemas a toda costa, pero ahora no aguantaba más; ese ambiente lleno de silencio y tensión lo estaba volviendo loco.

Temari tomó asiento frente a él y asintió.

Shikamaru se disponía a empezar la conversación pero la rubia hizo un gesto de silencio con uno de sus dedos para que se detenga.

-¡Shikadai te dije que te fueras a tu habitación! - Había notado la presencia de su hijo espiándolos.

El pequeño salió de su escondite para acercarse a su madre mirando de reojo a Shikamaru.

- ¡No estaba espiando! Es solo... que tengo un poco de hambre... - Colocó su pequeña mano derecha en su barriguita haciendo un tierno punchero.

Antes que Temari pueda responder Shikamaru se adelantó.

-¿Te gustaría un chocolate Shikadai? - Saco de su bolsillo una pequeña barra de chocolate. No fue necesaria una respuesta de parte del niño, sus brillantes ojos verdes delataban su respuesta. Amaba los dulces, sobretodo el chocolate.

Shikadai se acercó con cautela a Shikamaru, agarró e intentó abrir el empaque sin éxito. Fue gracias a la ayuda del adulto que le explicó la manera correcta de abrirlo que lo consiguió.

Temari con semblante serio miraba atentamente la escena que ocurría frente a sus ojos.

No pudo evitar sentir un poco de celos por su pequeño Shikadai al ver lo bien que se estaba llevando con Shikamaru y apenas se conocían... Claro, sí... "abrir un empaque" se podía considerar llevarse bien, lo que realmente la asustaba era sentir ese lazo entre ellos que se estaba formando ahora.

Desde que habían llegado al departamento de la rubia, Shikadai se mostró muy tímido y callado, algo nada común en él, sobretodo cuando estaba cerca de Shikamaru o era observado por éste.

Los hechos ocurridos antes de llegar no ayudaban a tranquilizarlo; notaba a su madre tensa e incómoda con la presencia de ese hombre en casa, y él no sabía qué hacer al respecto, quería hacer algo para que su madre se sienta bien y vuelva a sonreír y comportarse como siempre, pero no sabía qué.

¿Debía enojarse con ese hombre? ¿Ignorarlo? ¿Alejarse de él? ¿Apoyar a su madre?

A simple vista ese hombre no le desagrada, ni le daba miedo estar cerca de él, además lo había ayudado cuando estaba perdido en el edificio.

No era una mala persona, si lo fuera habría tenido muchas oportunidades de hacer algo malo... ¿Por qué mamá no está feliz? ¿Quién es hombre? ¿Por qué apareció ahora? ¿Por qué mamá está tan preocupada? ... Las preguntas que se hacía aumentaban y no tenían respuesta, solo le quedaba esperar.

- Shikadai ve a terminar de comer eso a tu cuarto y no ensucies nada. - Dijo Temari cuando el pequeño empezó a comer. Dio un pequeño salto en su sitio al oír la voz de su progenitora haciéndolo reaccionar.