Ahí esta él, hermoso como siempre, con esa mirada y ese aspecto intimidante, con todos esos secretos guardados.
–
Me produce tantas sensaciones extrañas tenerlo en frente mio.
Y siento de repente ganas de querer odiarlo,pero no puedo, simplemente no puedo, y lo odio por no poder odiarlo.
—Hola— Dice y yo hago mí mayor esfuerzo y me preparo para sonar fría y cortante.
—Hola— Respondo y la verdad sueno a todo lo contrario de lo que esperaba —Pasa— Solo por el simple hecho de no sonar irrespetuosa.
Me corro para así él puede pasar.
Una vez dentro del apartamento pregunto —¿Que quieres?— Y aunque en el fondo sé muy bien que quiere, es igual, quiero que me lo diga en la cara y que no venga de otras personas.
—Solo...quiero pedirte perdón...estuve mal en no decirte lo de las fotos, tampoco era la idea que te enteres por tu amiga, lo siento, no quiero qué peleemos— Acota con la cabeza gacha como un niño pequeño, mí plan es no perdonarlo, pero él está asi y se ve culpable, ahora no sé que hacer.
—Ashton yo solo te perdonaré con una condición...qué todo lo que pase con ella me lo cuentes, si quieres algo conmigo yo necesito saber, estoy cansada de que esto sea un tira y afloja— Digo, aunque intento sonar firme no lo logro.
—Lo siento, no quería qué esto fuera asi.
—Esas fotos enserio me hicieron daño— Ahora soy yo la que agacha la cabeza aguantado las lagrimas.
—Perdón— Se acerca a mí y me cuesta moverme, me cuesta tomar conciencia de lo cerca que se encuentra en este momento y lo único que siento y correspondo es su abrazó, sé que estoy cayendo fácil, sé enserio que se la hice fácil, pero no quiero pelear y menos con él.
Me encuentro ahí, sumergida en un mar de pensamientos, respirando su aroma, llorando en silencio y dejando que calme lentamente todo este remolino.
Me separo, no podría definir cuanto tiempo exacto estuve entre sus brazos, supongo que una eternidad.
Acaricia mis mejillas, luego de tomar ya un poco de conciencia una brillante idea me cruza por la cabeza.
—¿Ashton?
—Dime.
—¿Te quedas?— Él sonríe
—Si...me quedo contigo— Sonrió.
Pasaron cuatro horas con él, ya vimos una película de suspenso y terror, que no dio miedo, el que estaba muerto de miedo era el hombre pecho peludo derramo testosterona por donde no puedo, Ashton estaba casi gritando, y yo por parte me moria de risa cada vez que cerraba los ojos.
En este preciso momento cerramos las ventanas y pensamos en una siesta ya que no dormí en toda la noche y él se dio cuenta.
Me despierto luego de varias horas, está de noche, y me sorprendo de lo rápido que anocheció, eso no fue una siesta, básicamente dormí horas y horas, lo único que refleja es la luz que entra por la ventana y veo a Ashton durmiendo en mí cama, es loco, lo sé, pero no imposible, ahora me encuentro bien, cargando mí peso sobre mí codo para poder observarlo con más lujo de detalle.
Es tan hermoso, el celular en mí mesa de luz comienza a vibrar y apurada para no despertarlo lo agarro, y agradezco a el cielo y a todos los santos que esté en vibrador, me paro y voy al baño para así poder atender.
—¿Hola?
—Hola...— Dice la voz de una mujer y sollozando por lo que escucho.
—¿Con quien hablo?— Pregunto.
—Soy la esposa de tu hermano, él falleció esta tarde.
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No te Enamores de tu Jefe © [COMPLETA]
Romansa"No todo es color de rosa" Ella trabaja en una empresa donde todos lo odian, él es el magnate a cargo que luce despiadado y controlador, pero incluso el hombre más cruel tiene un corazón. Ashton necesita hacer feliz a su querida abuela, es por eso...