Dedicado a todas las que votaron, comentaron y siguieron ésta dulce historia hasta el final.
Mis manos temblaban.
Temblaban.
Toda yo temblaba.
Dejé la libreta encima de la mesa de la cocina y miré a la nada con la mirada empañada e histérica.
Dos cosas quedaban por hacer. Y la que me tocaba hacer ahora... Supondría el final de todo...
Dios mio...
¿Cómo Hannah podría haber escrito esto?
¿Qué se le pasó por la mente para escribir ésto o siquiera decidir pasar por ello?
La regadera para de correr y empiezo a jadear cuando le escucho llamarme desde el baño.
No me levanto.
Permanezco sentada, moviendo la pierna frenéticamente, con lágrimas de rabia en los ojos.
Lágrimas porque no me quedaba otra. Debía hacer lo que Hannah pedía... Sino todo ésto habría sido en vano.
Mañana era el último día del mes, así que la cosa número cincuenta de la lista de Hannah debía de ser realizada mañana en la noche.
Hasta entonces, yo debía cumplir la antepenúltima. Cuando escuché sus pasos por el pasillo arranqué la misión y la arrugué.
-Morena, ¿acaso estas sorda o necesitas que...?- se para en seco con la toalla alrededor de su cadera- ¿Qué pasa?
Me mira alarmado.
Cuando se acerca para tocarme me levanto como una bala y me hecho hacia atrás, mirándole con asco.
Su mirada... Por el amor de dios su mirada... Se quedaría grabada en mi interior por toda la eternidad.
-No te me acerques. Estoy harta... - digo con un hilo de voz- ¡Estoy harta de fingir!
Frunce el ceño.
-Grace, tranquila, explicame...
-¿Que te explique el que, Dante? ¿Que no te quiero? ¿Que me repugna estar con alguien como tú? ¿Que siempre debí haber elegido a Nick y no a un macarra? ¿Que sólo me vine aquí contigo para no pasar más tiempo con mi abuela y mi hermana? ¿Porque quería explorar algo nuevo? ¿Que te explique que estoy harta de fingir que te quiero, que siento una pizca de amor por ti? ¿Eso es lo que quieres que te explique?
Acabo gritando la última frase con las lágrimas recorriendo mis mejillas.
Como un torrente.
Su cara está devastada. Su interior está destruyéndose, lo siento. Se apoya en la mesa, incapaz de detenerse sobre sus dos piernas.
Abre la boca tres veces, y la vuelve a cerrar, sin saber qué decir. Me mira con los ojos empañados.
-¿Porqué?
Y esa simple pregunta me hace empezar a sollozar.
Me llevo la mano a la boca y eso parece activar el botón rojo en su interior.
Doy un grito cuando coge la silla y la estampa contra la encimera.
-¡¿ACASO TE OBLIGUÉ A ALGO, GRACE?! ¡¿ACASO TE DETUVE, ACASO TE HE PEDIDO QUE ME QUISIERAS?! - cierro los ojos cuando se tira de los pelos, soltando un alarido de dolor que me hace caer de rodillas y agarrarme la cabeza. Empieza a arrojar cosas por doquier- ¡SÉ PERFECTAMENTE QUE SOY DIFÍCIL, QUE SOY INSOPORTABLE, PERO POR UN MOMENTO ME CREÍ QUE ALGUIEN ME AMABA, ME APOYABA, ME NECESITABA! - brama dando puñetazos a la pared.
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LA LISTA DE HANNAH✓
Tajemnica / ThrillerA veces, los muertos dejan en su sitio una huella, que aún muertos, no se les deja de mencionar. Queda prohibido, sin autorización escrita del autor, bajo las denuncias establecidas por las leyes, la reproducción total, adaptación, distribución y pl...
