En busca de la espada sagrada.

3.- Un hogar.

*Nota: este símbolo {} indica cuando se acaba una narración.*

Ya había caído el sol, era un hermoso atardecer, Fiora y Yi alistaban el comedor, mientras que Janna se encontraba en el lago interior del templo, que justamente estaba a unos pasos de la ventana de Yasuo.

La peli azul perdía su tiempo ahí cuando no entrenaba, le gustaba sentir el agua fresca en sus delicados pies, mientras hacía pequeños remolinos de agua para divertir a los peces, que parecían tener conciencia de su amiga humana, todo ahí tenía un alma y vida.

- Janna – se acercó Yi al lago - ¿podrías avisarle a Yasuo que ya es hora de cenar?, tal vez este hambriento-.

- Esta bien – se elevó por los vientos y toco tierra al encontrarse con el pasillo, ahí no había necesidad de flotar. Llego a la puerta del castaño, toca un par de veces, pero no hubo respuesta, intento llamarlo por su nombre, pero fue inútil, seguía sin recibir respuesta, así que la chica opto por abrir la puerta y entrar a la habitación.

||Narra Janna||

Abrí la puerta de la habitación del extranjero, me introduje y, para mi sorpresa, lo encontré durmiendo plácidamente en su nueva cama que horas antes yo misma tendí. Suspire y camine hacia él, provenían algunos ronquidos del hombre, ¿sería la primera vez que dormía en un lugar así? pensé. Me pare a su costado y solo lo observe por un corto tiempo, quería dejarlo dormir más, pero a la hora de té escuchaba rugir mucho su estómago, así que decidí mejor despertarlo.

Tome su hombro derecho, lo llame por su nombre, pero no respondía, lo moví con más fuerza y alce un poco más mi voz, seguí así por 1 minuto, hasta que se despertó de golpe, exaltado, me sujeto de ambas muñecas e hizo que me sentara justo a su lado, en la cama. {}

||Narra Yasuo||

Dormía plácidamente, al fin sentía un lugar cómodo, no tenía pesadillas y no pasaba frió, tenía hambre, pero no me fue impedimento para que descansara, pero de pronto sentí un movimiento, no le tome importancia, pero esos movimientos fueron cada vez más rápidos y fuertes, y después escuche a alguien hablarme, ¿están en problemas? ¿Algo paso? ¿Me paso algo a mí? no tenía consciencia de la hora y menos si todo lo que viví horas antes era un sueño y me habían encontrado Jonianos para ejecutarme, abrí los ojos exaltado. Para mi sorpresa, vi unos ojos turquesa abiertos como platos que me miraban, ¿estaba asustada? enfoque más mi vista, era aquella chica del lago, aquella chica portadora de la espada que más he estado buscando, Janna. {}

- Perdón – desvió su mirada turquesa – la cena esta lista, Yi me pidió que te avisara, pero como no respondías tuve que entrar a despertarte – lo miro.

- Oh, no te preocupes, gracias, iré enseguida – respondió sin más.

- ¿podrías soltarme? – cuestiono señalando el fuerte agarre de sus muñecas, que el castaño tenía a su disposición.

- Perdón – la soltó – fue reacción – la miro.

- Me imagine – se levantó e hizo una pequeña reverencia – de nuevo lo siento, te llevare al comedor – comenzó a flotar y salió rápidamente de la habitación, la cual ya era oscura por la falta de iluminación.

Yasuo seguía los pasos de la chica, el recorrido era algo largo, ya que era un gran templo y muchas habitaciones, era fácil perderse ahí, pero el castaño disfrutaba las vistas, había una rara combinación de naturaleza y estructuras, era acogedor, pero desviaba su vista a su guía, quien, por así decirlo, le presumía su bien cuidado cuerpo y en especial las piernas de esta, provocando que un tono rojizo se apoderara de sus mejillas pobladas con una pobre barba.

- ¿a ti no te da frió? – preguntó con descaro, era algo descuidado en eso.

- ¿disculpa? – Se miró a sí misma – controlo el viento, yo no siento la temperatura, además estoy acostumbrada – respondió seria.

- Ah... - se mordió el labio, mientras asentía hacia la respuesta de la chica.

- Es... ¿Es la primera vez que tienes un hogar después de tu huida? – lo miro.

- ¿Un hogar?... – se detuvo y tomo su barbilla – creo que si... si, es la primera vez que tengo un hogar después de tanto tiempo – carraspeo la garganta y puso sus manos detrás de la nuca y comenzó a caminar, dejando atrás a Janna.

- Este es mi primer hogar, así que te entiendo, es bueno tener un lugar a donde llegar y que alguien te reciba con un "te extrañe" o "¿cómo te fue?" – sonrió mirando el suelo.

- Vaya... esta chica... me sorprende, será una buena compañera – se detuvo para verla, suspiro y cerró los ojos – No es por molestarte, pero ya quiero comer – comenzó a caminar y fue seguido por la peli azul, para al fin llegar a su destino.

Los 4 cenaron un gran banquete, el castaño comió todo lo que podía, lo cual recibió varios chistes por parte del maestro Yi, algunas quejas por parte Fiora y solo silencio de Janna, hablaron un poco de la manera en la que ellos entrenan y los lazos que tienen con otra orden de Jonia, la cual de vez en cuando es invitada a pasar algunos días festivos con ellos y tienen un pacto de paz con otra orden "maligna", la cual es visitada por uno de los estudiantes de esta para tener más secretos de defensa con armas.

Al finalizar la cena, se dirigieron todos en grupo al mismo sitio de habitaciones, Fiora fue la primera en separarse, después Yi, y justo cuando Janna se detuvo, igual Yasuo, por casualidad sus habitaciones estaban justo al frente de la otra, la chica se metió a su habitación y cerró la puerta, no sin antes desearle buenas noches al nuevo integrante de la orden.

El castaño se encerró en su habitación, se quitó el pedazo de tela que solo le cubrió parte del pecho, soltó su cola, dejando caer su desmarañado pelo a sus hombros y se acostó, preparado para continuar su sueño que interrumpido por la cena. Así fue la primera noche de Yasuo en su nuevo "hogar".

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Ya vengo con nueva actualización, espero les este gustando la lectura, jeje. Gracias por el apoyo, espero que la lectura alcance su fama que se merece (/;3;)/ por si no se ha dado cuenta, amo esta pareja [?]

¡Hasta la próxima actualización! Espero sus comentarios y votaciones, lectores.~