CAPITULO 31:

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Cuando Clark y yo llegamos al banco decidí ir directamente con el gerente ya que la cantidad era un poco alta ademas tenia un poco de curiosidad por saber a quien pertenecía y por que mi padre le depositaba tanto dinero, nos llevaron hasta la oficina del gerente quien nos recibió muy amable.

-Buenos días- dijimos Clark y yo al mismo tiempo.

-Buenos días- nos extendió la mano.- Diganme que puedo hacer por ustedes?- nos invito a sentarnos.

-Vera me enviaron a hacer este deposito a esta cuenta y quise pasar directamente con usted ya que es una cantidad grande- le extendí el pequeño papel con los datos.

-Mmm ya veo, a si que es de parte de la empresa Evans?- coloco una mano en su menton.

-A si es, vera mi padre me envió a hacer el deposito ya que el lo haría personalmente pero tuvo que atender otros asuntos- respondí seria.

-Pues déjeme decirle señorita Evans que hizo bien en venir ya que en las cajas normales no le podrian hacer el deposito, ademas su padre siempre viene conmigo o con mi compañero- dijo a un con la mano en su mentón.

-¿Entonces no es la primera vez que mi padre hace este tipo de depósitos?- fruncí el ceño.

-No - negó con la cabeza. -Su padre ha hecho estos depósitos desde hace ya varios meses y la mayoría de veces suelen ser cantidades grandes- respondió serio.

-Escuche se que no es mi total incumbencia pero seria mucho pedir el nombre del dueño de esta cuenta?- puse ojos perrito.

-Para mi no seria problema pero me temo que tendrá que esperar ya que todo eso esta archivado y nos llevara un par de dias conseguir lo que pide-  respondió en un susurro.

-Por eso no se preocupe esperare lo que sea necesario, pero no me gustaría que se lo comentara a mi padre por favor- 

-Claro señorita Evans- asintió con la cabeza.

-Bueno no lo molestamos mas gracias por su tiempo- nos levantamos los tres.

El gerente solo asintió con la cabeza y después nos abrió la puerta de su oficina para que pudiéramos salir, una vez afuera del banco y un poco alejados de la gente Clark se decidió a hablar.

-¿Que fue todo eso?- levanto ambas cejas.

-Una investigación- sonreí de oreja a oreja.

-Giselle hablo enserio- me tomo del brazo.

-Es enserio no has pensado que tal vez todo esto tenga que ver con lo de Ryan- comencé a molestarme.

-Bueno si, pero que nosotros no nos encargamos de esto?- volvió a mirarme confundido.

-Si, pero esque estuve analizando la cantidad que me mando a depositar mi padre y las que aparecían en los correos y la verdad es que son casi la misma- pase ambas manos por mis rostros.

-¿A si que ahora dudas de tu padre?- levanto su ceja izquierda.

-Pues no es que dude, es mas bien que me parece extraño- 

-Bueno no quiero discutir, me imagino que tus padres ya te contaron que quieren organizarte una fiesta de cumpleaños?- lanzo sus sexis sonrisas.

-Si ya me lo han comentado, pero no es de mi todo agrado- respondí resignada, soltando un gran suspiro.

-Bueno tal vez esta si lo sea pero mejor vallamos a comer por que muero de hambre- toco su estomago.

-Tienes razón, se me antojo un rico pastel para el postre- imite sus movimientos.

-Mm veo que te han vuelto los antojos- me miro extraño.

-Si pero es normal ademas hace semanas que no como un pastel- hice puchero.

-Como sea mejor vamonos ya- abrió la puerta del auto. 

Después de ir a comer con Clark quede de ir con Mónica de compras ya que esta noche tenia una cita con Nick y queria comprar unos vestidos ademas no me haria mal ir de compras con mi mejor amigas, cuando yo y Mónica llegamos al centro comercial entramos a una tienda donde encontré unos jeans que me quedarian perfectos.

-¿Que tal estos?- se los enseñe.

-Creo que te quedarian bien, ademas harían juego con tus botas negras, pruebatelos- dijo sin mas.

-Ya voy general- ambas reímos ante mi comentario.

Cuando estaba probandome los jeans, mi buen humor desapareció al notar que no me abrochaba el botón, ¿habia engordado?, me exalte así que llame a monica.

-¡Monica!- grite a través de la cortina del probador.

-Que pasa!- me miro preocupada.

-No me abrocha- le mostré el pantalón.

-Que raro crei que eras talla 3- frunció el ceño.

-Es que se supone que soy talla 3- moví mi cabeza desesperada.

-Iré por un talla 4, de todos modos no es para tanto- puso los ojos en blanco.

A los pocos minutos mi amiga volvió con el mismo modelo de jeans pero en diferente talla.

-Toma- me los extendió.

-Gracias- comencé a probarmelos y valla sorpresa me lleve.

-Mónica estos me han quedado de maravilla- dije confundida.

-Uff creo que alguien a comido de mas- se burlo.

-No es gracioso- la fulmine con la mirada.

-Como sea ademas nisiquiera se nota que eres una talla de mas sigues teniendo el mismo cuerpo, son hormonas querida- movió su mano restándole importancia.

Después de dos horas de escoger un vestido y unos tacones para mi amiga ambas volvimos a nuestros respectivos hogares.

Al llegar al apartamento me dirigí a la cocina ya que un delicioso olor impregnaba todo el lugar, fue tan tierno encontrar a Clark haciendo la cena moviéndose de un lado a otro, este al ver que lo observaba se sobresalto.

-Creí que tardarías mas con Mónica- me recibió con sus cálidas sonrisas.

-Yo también pero por suerte pudimos encontrar el vestido rapido- dije cansada.

-Bueno pues prepare la cena- suspiro.

-Huele delicioso- sonreí.

-Entonces a comer- me puso un plato sobre la barra.

-Como ordene- moví mi mano en forma de saludo militar.

Después de dar una rica cena, yo y Clark nos fuimos a duchar, vimos una pelicula y despues fuimos a dormir .....

Me enamore de ti ( Henry CAVILL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora