Capítulo 17.

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Vicky PoV.

Quinto día sin verla y la verdad es que me estaba volviendo cada vez más loca, loca por ella.

Mentiría si dijera que no la hecho de menos, porque la verdad es que me paso día y noche pensando que pasaría si ella y yo nos hubiéramos conocido fuera, llegando a la conclusión de que ella me podía enamorar dentro o fuera de la academia.

Cuando iba a la academia intentaba no cruzarme con ella  para no poder la situación más difícil y es que también sé que si ella me lo pidiera volveríamos a lo mismo de antes en un segundo, porque me tiene a sus pies.

Pero esa suerte que he tenido desde el sábado se esfumaba cuando me tocaba ir al pase de micros y una clase grupal con los chicos. 

Entré ese lunes por la puerta acompañada de Mamen, que no paraba de explicarme la salida que tuvieron el día anterior su novia y ella llegando así a la altura del espejo para colocarnos. 

Miré a los chicos cuando Mamen dejó de hablar y les dediqué una de mis mejores sonrisas, pero no la vi y mi cara cambió a confusión cuando una cabellera rubia apareció corriendo por la puerta disculpándose y haciéndome negar con la cabeza mientras sonreía sin que ella me viera.

El pase de micros lo pasé genial, el potencial que tenían estos chicos no era normal y los miraba con orgullo siempre,pero cuando por último cantó ella no pude quitar la vista. Lucía unos pantalones cortos negros junto con una sudadera negra también y siempre con esa coleta. Me ponía, me ponía demasiado.

Acabo el pase de micros entre risas dejándome con todos para trabajar la canción grupal y cómo no, me puse nerviosa al verla. Algunos se fueron al baño y otros a rellenar el agua dejándonos a Sabela, María, Marta y a mi solas.

- Vicky estás muy guapa hoy. - Dijo Sabela sacándome una sonrisa.

- Muchas gracias corazón, tú siempre. - Me acerqué a ella y la abracé.

- Yo también quiero un abrazo tuyo Vicky. - Dijo Marta. - Y María también, que lleva de bajón unos días y nadie sabe por qué. ¿Tu sabes por qué? - Preguntó ella y mi cara cambió a una de asombro.

- Eh, pues no, no sabía nada. - Aparte mi mirada de Marta y la puse en María que negaba con la cabeza. 

- Es que cómo os lleváis tan bien, pues creía que te contaba las cosas.- Me atraganté con el agua que estaba bebiendo y ella vino riendo hacia mi para darme palmadas en la espalda. - Pero mujer, ten cuidado.

- Sí, sí, gracias. - Tosí por última vez.

- ¿Entonces no sabes nada? - Insistió Marta.

- No, nada. - Dije mirando a María que seguía con la cabeza mirando sus pies.

- Pues deberíais hablar, por que contigo es con la única que habla, a nosotras no nos cuenta na. - Dijo Marta mientras cogía su botella de agua y volvía. - ¿Luego hablaréis? 

- Ella no tiene tiempo Marta, déjala.  - Intervinió María por primera vez. 

- Ay, illa, déjala responder a ella. - Se quejó Marta y se oyó la risa de Sabela.

- No la verdad es que no tengo mucho tiempo. - Hice una pausa. - Pero a lo mejor podemos hablar un rato. - Dije yo sin saber cómo mierdas había dicho eso.

- ¿Enserio? -Dijo María sorprendida, asentí y una sonrisa se formó en su cara. 

- Cuando acabe con ensayos de bailarines y todo vengo a verte, espérame después de cenar en el salón. - La indiqué y de repente mientras ella asentía entraban todos a la sala para empezar el ensayo. 

María PoV.

No sé si matar a Marta o agradecer todo lo que ha conseguido la cabrona. 

Pasé el ensayo más contenta de lo normal, y es que por una vez después de esos cinco días sin ella estaba sonriendo, porque eso es lo que causa ella en mi. 

Después del ensayo, pasamos la tarde normal, le eché la bronca a Marta mientras Sabela se reía de la situación y Alba y Natalia no entendían nada de lo que estaba pasando. 

Cenamos tranquilamente hasta que llegó la sobremesa dónde la mayoría nos volvimos locos y empezamos a cantar y bailar sin ningún tipo de explicación. 

Me encontraba en el salón desde hacía ya veinte minutos y nadie aparecía. Y es que quedaban diez minutos para que el directo acabara y todos estaban en la habitación con la idea de dormir, idea que nunca se cumple.

Sin saberlo me quedé dormida y desperté cuando note una mirada sobre mi mientras me ponían una manta por encima. 

- Lo siento no quería despertarte. - Dijo Vicky mientras se sentaba en el sofá. 

- ¿Que hora es? - Pregunté desubicada.

- Casi las doce menos cuarto, lo siento por venir a estas horas, pero estaba hablando cosas importantes con Noemí. No esperaba verte aquí.

- No me perdería hablar contigo por nada del mundo. 

- Seguro que por una salida a por unas cervezas si. -Rió Vicky  y yo con ella. 

- Ni eso. 

- Wow, eso si que es amor. - Cambió su cara al saber lo que acaba decir. 

- Lo es. 

- ¿Que te pasa? 

- Tú me pasas.- Bufé. - No puedo vivir sin ti.

- No hay manera. - Siguió ella.

- Pues no, no la hay. 

- Tomaste una decisión.

- ¿Tú nunca te has arrepentido de algo que has hecho mal? - Ella asintió. - Pues eso me ha pasado a mi ahora. 

- Todo esto es muy extraño, soy tu profesora. 

- Y yo tu alumna. 

- ¿Que pasa si nos pillan?

- No tienen por qué hacerlo.

- Tengo miedo.

- ¿A qué?

- A perderte de nuevo. 

La miré y ella me miraba, no decía nada pero a la vez me lo decía todo con la mirada. Me transmitía paz, amor y tranquilidad. Me acerqué a ella poco a poco por el sofá, hasta que nuestras piernas se tocaron. 

Sin poder evitarlo la miré los labios y después los ojos, que me miraban a mis labios entreabiertos.  

- Tengo ganas de ti. - La dije en un susurro.

- Pues haz que se te quiten. - Me respondió de la misma manera y al segundo ya me encontraba besándola. 

De nuevo sus labios me llevaban al cielo con solo rozarlos y ahora no sé como he vivido 27 años sin ella. 

El beso era suave y tranquilo, no teníamos prisa y teníamos todo el tiempo del mundo en saborearnos. Mis manos acariciaban sus mejillas mientras que las suyas se posaron en mi cuello haciendo presión en mi para no separarme, cosa que no iba hacer ni aunque hubiera un terremoto. 

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YASSSS, RECONCILIACIÓN.

Dios, siento muchísimo actualizar tan tarde pero ayer llegué muy tarde de la uni y hoy me pasé el día estudiando.

I'm so sorry.  

Espero que con este capítulo vuestras ganas de matarme hayan cambiado a una de amarme profundamente. 

Yo os love muchísimo. 💖💖

¿Te puedes callar y besarme? || María y Vicky.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora