¿Te puedes callar y besarme? || María y Vicky.

Capítulo 25.

Vicky PoV.

La hora de la cena llegó poco tiempo después de terminar de pensar en todo, 

en lo nuestro, 

en que estaba hasta las trancas de ti. 

Llegaste con una sonrisa que no te cabía en la cara después de la clase de Mamen que te había tocado. Y es que entre tu canción de esta semana que te gustaba demasiado y lo que había pasado en las duchas sabía que hoy era un buen día para ti.

En la cena te sentaste junto a tus amigas y los Javis mientras que en la otra mesa nos encontrábamos los demás con algún que otro concursante. 

Me senté entre Mamen y Noemí mientras que Laura se puso delante de mi. Mamen y Laura se pasaron toda la cena mirándose como si no importara nada, estaban encoñadísimas y me atrevería a decir que mucho más que nosotras.

Te vi desde mi mesa, estabas hablando con Alba y te reíste de algo de lo que ella te dijo para seguidamente darla un pequeño beso en la cabeza que me pareció la cosa más tierna.

Sonreí inconscientemente como lo hacían antes Mamen y Laura al mirarte, y estuve por un buen rato con mi mirada clavada en ti. Y por mucho que te mirara tú seguías riéndote de lo que te decían tus compañeros. 

Realmente estabas preciosa, te reías y se te notaba la felicidad, ese era tu mejor yo y a mi me encantaba. 

Estuve un buen rato más mirándote, rato dónde Mamen y Laura dejaron de mirarse entre ellas para mirarme a mi. 

- Quita esa cara de loca enamorada. - Dijo Mamen dándome un pequeño codazo. 

- Podía decir lo mismo de vosotras. - Les dije yo a la pareja.

- Pero nosotros somos pareja oficialmente. - Rebatió Mamen haciendo que Laura sonriese con orgullo. 

- Si no queréis que se entere media España os calláis que estamos en el 24 horas guapas. - Se unió Noemí a la conversación. 

- Joder es verdad. - Dije yo. - Si es que Mamen eres una bocas. 

- Y tu muy poco disimulada, porque si yo no te hubiera dicho nada babeas aquí mismo mientras tienes unas vistas alucinantes. - Dijo ella rodando los ojos. 

- Ahí ella tiene razón. - La defendió su novia que le mandó un pequeño beso al aire.

- Noemí dilas algo. - Miré a la directora que estaba a mi lado. 

- Algo. - Dijo ella mientras la miraba con odio. 

- Que chispa, de mayor mechero. - Dije mientras me levantaba de la mesa molesta haciendo que las tres se rieran de mi y todos las vieran desconcertados. 

- ¿Que las pasa Mari? - Dijo Alba riendo desde la otra mesa. 

La risas eran tan escandalosas que todos empezaron a reír, menos tú, que me mirabas con una sonrisa de compasión mientras te acercabas hasta mi y me dabas un pequeño abrazo. 

En ese momento las risas pararon y al separarnos podíamos ver a todos atentos a nosotras. Si luego me decían a mi, pero ellos eran menos disimulados al vernos al nosotras que cuando yo me quedaba embobada mirándote. 

María PoV. 

La cena la pasé entre risas, era uno de los mejores días y me encontraba realmente más feliz de lo normal.  

Después de la cena y de todo el espectáculo que montaron la pareja de profesoras y la directora me fui a la terraza a fumar e intentar pensar un rato.