POV LAUREN
Habían pasado las fiestas y el nuevo año empezaba, noche buena la había pasado mirando películas navideñas en el sofá de mi casa, recibí una llamada de mi madre que entusiasta me deseaba una felíz Navidad y me decía como me había extrañado durante la cena.
Habían cosas que nunca cambiaban, mi madre recordándome como cada año que yo era su mejor regalo de Navidad era una de esas, incluso a kilómetros.
Esa misma noche Camila me llamó, evité contestarle y horas después cuando ya estaba por dormirme recibí un mensaje en donde me decía lo mucho que hubiera deseado que fuera a su casa a cenar y que esperaba que no me la hubiera pasado sola aquella noche. Terminó con un felíz Navidad y con aquello sólo me hizo sufrir insomnio, no pude dejar de pensar en lo hermosa que era, en lo mucho que me gustaba, en su sonrisa, en que estaba embarazada, aquello me estaba volviendo loca, el pensar en que tenía a un bebé en su interior creciendo. Se lo había contado a Normani de inmediato. Con la noticia de estar embarazada me había hecho llorar de felicidad pero luego había caído en cuenta, ella no me querría cerca, no me merecía seguir siendo herida, tenía que eliminar aquel deseo de correr a sus brazos, de contarle la verdad sobre mi enfermedad y de quedarme con mi cabeza cerca de su vientre, disfrutando de la cercanía, me convencí de que no tenía una remota posibilidad de ser la que provocó aquel embarazo, tenía que acabar con las esperanzas que venían con aquella noticia.
El año acabo y tras la cuenta regresiva para dar la bienvenida a el primero de enero recibí un nuevo mensaje de Camila, uno en el que me deseaba felicidad y esas cosas trilladas que todos desean para esas fechas.
Estaba mal no contestarle así que fui amable y le contesté de igual forma, con esos buenos deseos.
Ella trató de entablar una conversación, me pregunto cómo había estado, yo la deje en visto, estaba siendo cordial, no quería hablar con ella, yo no era esa clase de hipócrita.
Estaba en el parque disfrutando de la tarde con Mani, el sol tenue, cálido y el sentirme bien, aquello era cada vez menos común.
Estaba con la quimio detenida, había que esperar, debían de someterme a varios chequeos y luego ver que seguía en el tratamiento.
El doctor tenía fé en que ya estaba mejorando, en que los resultados de los exámenes serían alentadores, yo sólo disfrutaba de aquellos días como quien espera que lo peor venga después de la calma que está viviendo.
Veía a las personas correr, disfrutar con sus hijos, con sus parejas, como era el caso de la morena a mi lado que si bien había venido conmigo había traído a su nuevo novio, un chico moreno, con sonrisa tierna y mucho carisma que se reducía a sólo estar a el lado de mi amiga observandola como si fuera la chica más hermosa del mundo.
De pronto reconocí a Camila a la distancia, estaba sentada sola en una banca alimentando a las palomas, todo en ella era alegría, la escaneé, empecé a bajar la mirada y a la altura del vientre estoy segura de que dejé de respirar, llevaba un blusa olgada pero su estado de embarazo se podía ver, su ligeramente abultada curva en esa zona y sus poco ensanchadas caderas.
Miré a Mani que estaba cotillando con su chico y me disculpe con ambos al levantarme y comenzar a caminar en dirección a la morena que parecía niña entre risas con el furor de las aves cuando les daba migajas.
Cuando estaba cerca de llegar frente a ella levantó la mirada y sonrió auténticamente hacía mí. Tenerla en frente me dejaba sin palabras que decir.
- Hola_ dijo tiernamente ella sin despegar su mirada de mi.
- Ho...Hola_ mi voz se cortó y traté de recuperme mirando a un lado a la gente que pasaba, esquivando su mirada.
- Es bueno verte, te vez muy bien, me gusta esa camisa_ dijo señalando esa prenda que yo vestía en donde se leía "yo puedo contra todo" con un escudo de superhéroe en ella.
- Gracias_ fui genuina al agregar_ me alegra verte también.
En silencio fue incómodo, ambas mirábamos alrededor hasta que tomé coraje y pregunté.
-cuántos meses tienes?_señalé su vientre aunque creía saber cuál sería su respuesta y también cuál sería mi próxima pregunta.
-Doce semanas _ dijo acariciando cuidadosamente su vientre_ son en promedio tres meses.
Me quedé mirándola, no sabía si quería saber la respuesta a la siguiente pregunta, si la respuesta era afirmativa no podría evitar ilusionarme pero estaría confiando ciegamente en ella y tenía que tener en cuenta la eminente posibilidad de que mintiera.
- Me puedes aclarar una duda que en serio me ha tenido pensando_dije asegurándome de que ella estaba bien con la pregunta.
- Claro Lauren, las que quieras_ sonrió, si estaba determinada a detener mi corazón de un infarto con su sonrisa estaba a poco de conseguirlo.
- es mío? Digo... quiero la verdad, quedará sólo entre tú y yo, no le diré a nadie, ni a Mani, pero necesito que seas sincera conmigo y me digas, existe una mínima posibilidad de que otro sea el padre?
La vi mirar el suelo triste, estaba esperando que dijese que se había acostado con otro, que era de cualquier otro chico en el mundo menos mío pero su respuesta me sorprendió.
- Tuyo, no he visto a nadie más que a ti, se que cuesta que lo creas, se de tus problemas de fertilidad y eso pero te aseguro que es tuyo, nuestro _ agregó y sentí mis lágrimas correr por mis mejillas.
No sabía que hacer entonces, estaba más ilusionada que nunca, aquel bebé dentro de ella era producto de nuestra unión pero... que se suponía que debía hacer o decir? Estaba gritando internamente de la alegría pero mi exterior no proyectaba nada, lo supe por la manera en que me miraba Camila, como quien no sabe si correr o seguir esperando a que las palabras salieran de mi boca y dijera algo, el problema era que yo no podía articular en aquel momento, en aquel momento no sabía siquiera si seguía viva o estaba soñando.
ESTÁS LEYENDO
I was/am Lauren
Fiksi PenggemarLauren ha pasado por mucho en su vida y esta sumida en una fuerte depresión, será que encuentre una razón para ser felíz... Una tierna historia, un tanto triste pero merece una oportunidad... Lauren G!p ( Intersexual, trataré de hacerla un poco educ...