Y sin querer se me abrieron heridas viejas, por golpes nuevos, y así volví a sangrar donde un día dolió, y fue cuando me di cuenta que no somos tan fuertes como pensábamos.
Heridas
Y sin querer se me abrieron heridas viejas, por golpes nuevos, y así volví a sangrar donde un día dolió, y fue cuando me di cuenta que no somos tan fuertes como pensábamos.