-¡Muévanse tenemos preparar las defensas en el Portal de Transposición.- gritaba un Centurión a su grupo de tropas.
-¡Madre se que puedo luchar, he perfeccionado mis habilidades bastante!- exclamaba Yumeha a su madre para que le permitiera ir a los puestos de avanzada a luchar con sus hermanos.
-Basta ya Yumeha, sabes que no puedes hacerle frente a los Zerg aún, tu única obligación en este momento es cuidar de Lykaios y avisarme ante cualquier cosa que pueda pasar.- le decía Vorazun intentando calmar a su angustiada hija.
-Si...madre.- dijo Yumeha disgustada.
Vorazun se puso de rodillas y la abrazo para darle algo de seguridad y hecho esto partió hacía afuera del edificio donde se encontraban.
Talematros era un lugar bastante sombrío pero hermoso a la vez, aunque sus calles, edificios y la ciudad en general sean de un color gris, las luces verdes y azules de la ciudad daban un precioso espectáculo.-Ahh...- gemí intentando recuperar mi conciencia.
-¡Lykaios...!- exclamó Yumeha mientras se acercaba a la camilla donde me encontraba recostado.
-¡Gracias a Adún estas despierto!--¿Donde estoy?- pregunte algo aturdido aún.
-Estamos en Talematros la capital de los Nerazim en Shakuras, nuestro mundo.- me explico Yumeha.
Después de respirar profundamente por unos momentos, mire a Yumeha a la cara, ella a diferencia de Vorazun no tenía ciertas marcas en su cara que podrían denotar su edad, era mucho más lisa e incluso algo más brillante a decir verdad, sus ojos brillaban en un verde esmeralda muy intenso que parecían emitir ondas a su alrededor, quizás demostrando su alegría de verme despierto.
En ese momento percibí algo que provenía desde el oeste de donde estábamos, no se sentía como nada que hubiera percibido anteriormente, sentía energías del Vacío acumulándose y millones de esencias que venían con esa carga de energías.-¡Yumeha, debemos salir de aquí!- le grite mientras la tomaba de la mano y la sacaba casi arrastrándola por la compuerta.
Mientras descendíamos por el ascensor pude sentir una voz familiar en mi mente.
-(¡Señor Lykaios! ¿Se encuentra bien?, le habla Razgol uno de sus discípulos Tal'darim).- dijo Razgol aliviado de contactar conmigo.
-(Dime, puedo escucharte, ¿Dónde estas tu y los demás)?- le pregunte animado y nervioso al mismo tiempo.
-(Nos encontramos cerca de el Portal de Transposición de Shakuras, estamos preparándonos para viajar a Aiur y apoyar a los Protoss que ahí se encuentran).- dijo Razgol.
-(Los veré allá, voy en camino).- dije mientras que dentro de mí algo me avisaba que algo terrible pronto sucedería en ese lugar.
-¿Como planeas llegar tan rápido hacía allá Lykaios?, el Portal de Transposición se encuentra demasiado lejos, solo un Repliegue podría llevarnos al instante para allá.- dijo Yumeha algo extrañada.
-¡Eso es! ¿Qué unidad tiene esa habilidad Yumeha?- le pregunte muy contento.
-Según mis estudios, los Árbitros, las Naves Nodrizas y los Pilones Oscuros tienen esa habilidad.- dijo mientras señalaba un extraño y gigante cristal verde que flotaba cerca nuestro.
-Hmm no creo poder copiar las habilidades de una estructura pero según los conocimientos que adquirí escaneando esa Sonda, creo que podré acceder a la Matriz Psiónica de Talematros y Replegarnos hacía el Pilón más cercano al Portal de Transposición.- pensé.
Dicho esto toque el Pilón y pude sentir un flujo de energía muy potente que daba vida a todas las estructuras de los Nerazim, y buscando logre encontrar el Pilón que se encontraba más cerca del Portal de Transposición y nos Replegué hasta allá.
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Starcraft II: "El Heraldo De Las Sombras"
Fanfiction(Esta historia alternativa ocurre durante la reconquista de Aiur y durante la Guerra final contra Amón). Amón el dios oscuro vive nuevamente, comandando a sus ejércitos de Híbridos, a la Fundación Moebius, los Zerg salvajes de Aiur y a los Tal'darim...