Borracho de amor [𝓜𝓲𝓴𝓪𝓨ū/Omegaverse]

Una mirada

"Estoy acostumbrado a ser más que usado"

Narrativa: Primera persona, Yūichirō

Mi rutina es realmente indiferente y a la vez, extraña. Demasiado extraña. Lo primero que hago al levantarme, es quedarme absorto en las paredes se color pálido. Sólo ignoro los gritos histéricos de mi hermano y en ese momento, todo de detiene. Es como si mi cabeza fuera dejado de trabajar.

Todas las mañanas, soy agresivamente levantado por mi hermano gemelo con otro ADN, el cual, suele ser realmente violento o extremadamente indiferente. Pero es que Guren es, simplemente Guren. Ahora que lo pienso, me molesta más cuando de burla de los demás, que cuando me grita…

Volviendo al tema, pues sí. La situación no es muy común, pero puede suceder. Nuestra condición lleva por nombre «Superfecundación» y creo que, se puede sacar una rápida conclusión tan sólo por leer el nombre. O sea, Guren y yo somos hijos de una misma madre, pero no de un mismo padre, lo que requiere una fecundación al mismo tiempo.

No tengo las ganas ni los motivos para ponerme a pensar en el tipo de vida que llevaba mi madre biológica. Sinceramente, no me importa. No soy nadie para juzgar sus acciones y decisiones. No considero que tengo ese derecho y, hay tantos factores que pueden ser tomados para llegar a tener dos hijos con diferente padre al mismo momento, que es simplemente estúpido pensar que fue su irresponsabilidad o culpa. Yo no estuve ahí para saber que pasó. Y por lo que puedo intuir, seguramente no fue muy bueno, pues ella nos dejó en un orfanato. Nosotros somos, seguramente hijos de dos hermanos. Lo que provoca que Guren y yo tengamos un gran parecido, aparte del de compartir una sola madre, digamos que somos también primos. Hay algunas diferencias entre nosotros, como el color de los ojos, pero el que compartamos madre y seamos primos, nos hacen parecernos mucho. Otro factor que nos diferencia es que, mientras que yo soy un omega, mi hermano es un alfa.

Si, digamos que soy la desgracia.

Dejando ese tema de lado, extrañamente hoy me he levantado sin la ayuda de Guren, quien normalmente se levanta por la mañana para poder levantarme a mi. Es como mi despertador personal. Cuando duermo, mi sueño es bastante pesado y ni Satanás logra despertarme. Por lo tanto, sí, estoy afirmando que Guren es peor Satanás.

—¡Guren! —Llamo en voz alta. No es porque tengo miedo de que no me escuche, en realidad, es porque tengo esa costumbre. Sus gritos y los míos son particularmente diferentes, parecen rugidos de una bestia.

Al no obtener una respuesta, decido levantarme de mi cómoda cama. Perdiendo el calor que está me otorgaba. No es muy atractivo pensar en lo que depara de aquí a una hora. Tendré que ir a la escuela, veré a Shinoa y a mis amigos. Ah y claro, no puedo olvidar que veré sin duda alguna a Shinya. No es que él en realidad sea cercano a mí, es más bien el amigo de Guren. O mejor amigo, el cual también es un alfa.