14. Te amo, por razones sentimentales.

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—Mami creo que estoy enfermo...—El pequeño MinSeok llegaba después de la escuela cabizbajo, mientras se dirigía hacia la cocina donde estaba su madre preparado la cena.

—¿Por qué dices eso cariño?, ¿Qué sientes?— su madre le miraba preocupada mientras tomaba sus mejillas y Min le miraba formando un puchero con sus labios.

—No lo sé, mi cara se pone roja y mis manos sudan, siento mariposas en el estómago... Y mi corazón hace pum pum muy rápido —MinSeok puso su manita en su pecho, y su madre sonrió dulcemente.

—No estás enfermo cariño, cuando seas mayor lo sabrás—Su madre depósito un dulce beso en la nariz del pequeño, haciéndole sonreír.

MinSeok no se explicaba porque sentía todas esas cosas, pero especialmente cuando veía la sonrisa de Dae todos los días en clase, o cuando escuchaba su voz, sus pequeñas mejillas se teñían rojas y trataba de ocultarlas con sus manitas, pero era imposible, cuando JongDae lo miraba toda su cara se ponía roja como una fresa.

MinSeok despertó después de una noche reparadora de sueño, y se dirigió a la cocina donde se encontraba JunMyeon preparando el desayuno como siempre.

—¡Good mornig!—Saludo Jun animadamente cuando vio al castaño entrar y sentarse sin decir una palabra, el más alto colocó el desayuno frente a MinSeok y acarició su cabello.

—Hyung... Creo que estoy enfermo...—Soltó de golpe, y Jun lo miraba preocupado colocando su mano sobre la frente del castaño.

—¿Eh?, ¿Un resfriado otra vez? —Pregunto, pero Minnie negó.

—No, mi cara se pone cálida, mis manos sudan, siento un cosquilleo en mi estómago y mi corazón late muy fuerte...— Jun soltó una pequeña risita al escuchar las palabras del menor.

—No estás enfermo Minnie.

—¿No? —Preguntó curioso.

—No, eso se llama estar enamorado—Contestó despeinado el cabello de MinSeok, y este abrió los ojos de par en par sorprendido de lo que acababa de escuchar.

—¿Enamorado?, ¿Yo? —Preguntó.

—Si, es normal enamorarse, pero dime... ¿Quién es el responsable?

Min se sonrojo, y agachó la cabeza empezando a jugar con sus dedos nervioso.

¿Cómo le iba a decir que su corazón empezaba a latir con fuerza tan solo escuchar la voz de esa persona que había llegado tan de repente a su vida? Solo de imaginársela estaba cada vez más nervioso.

—E-es un secreto...—El castaño susurro apenado.

—Ya veo...—Sonrió Jun, le parecía adorable que Minnie sintiera esos hermosos sentimientos.

—Hyung... ¿Puedo pedirte un favor?

—Claro, ¿Sucede algo?

—Si verás... Mañana saldré en la noche y me preguntaba si podrías ayudarme con mi ropa, quiero ir de compras... ¿Vendrías conmigo?— Min se había sonrojado nuevamente, pues recordaba que Jun siempre había querido ayudarle con su ropa, es por eso que vestía tan bien, pero ahora Jun tenía todo el permiso para que MinSeok se viera aún mejor.

—¡Por supuesto que sí!, iremos después del desayuno, ¿Te parece?, no te preocupes, te ayudare confía en mi—Tomó emocionado la mano del pequeño, y este sonrió, sabía que JunMyeon haría una buena elección.

Después del desayuno ambos chicos se dirigieron a la ciudad, entrando a una de las tiendas favoritas de Jun, el mayor empezó a escoger ropa a lo loco, y MinSeok decidió que confiaría en el buen gusto de su amigo, así que sólo se limitaba a sonreír y tomar a su hyung del brazo mientras avanzaban por la tienda.

Sakura Rain - ChenMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora