La conquista del Imperio Romano a la Galia y a las islas británicas ha culminado con una victoria aplastante y un príncipe romano de origen britano y dos esclavos, uno galo y otro celta; escriben, también, su propia historia.
Escocia x Inglaterra x...
Cuando está dormido, Allistor toma una expresión tan pacífica, que llega a ser increíble lo apasionado que puede mostrarse para otras acciones. Arthur, en momentos como ese en el cual está embelesado observándolo dormir, se permite comportarse con un poco más de calidez con él, en la soledad que le confiere el cuarto en el que Francis no está en ese específico momento y donde Allistor está abstraído en sus sueños. O así como lo haría con el galo, dependiendo de quién es el que lo acompañe en exclusividad.
Se ha desvelado, por alguna extraña razón. Mirar a Allistor dormir profundamente le provoca tanta paz como envidia, y al reparar en él con una dulzura que nunca o casi nunca se permite mostrar y expandírsele en el pecho pese a que la sienta a cada momento cuando está con ellos, le sonríe. Al recostarse a su lado, cuando el celta está bocabajo con los brazos bajo la almohada y una de las piernas dobladas, con sólo su cadera cubierta por la sábana blanca, las manos de Arthur deambulan por la cama, por el respaldo, por los pilares que la sostienen sin terminar de convencerse para brindarle a Allistor caricias tiernas. Todavía sonríe, todavía siente calidez y todavía la ternura lo inspira, y entonces termina de embriagarse del profundo amor que le tiene, tanto a él como a Francis, y su mano blanca y cariñosa se posa sobre la nuca de Allistor, dando leves caricias. La ternura que lo embriagó fue todavía más invasiva, como una repentina presión sobre su corazón, al ver que el pelirrojo se revolvió bajo su suave tacto con cierta timidez.
Arthur sonríe más. Pese a que Allistor duerme, la reacción de su cuerpo es inequívoca. Vuelve a pasear su mano por su nuca, jugueteando con sus cabellos rojos que están más largos que otras veces, revolviéndolos, enredándolos entre sus dedos, y Allistor parece disfrutar de la tierna caricia pese a que no es consciente de ello. Después, la mano de Arthur se mueve hasta su mejilla. La piel del celta es templada, suave como de porcelana, como si fuera una pieza de arte, bellísima e inalcanzable, y no un superfluo ser humano. Su dedo índice, medio curvo, se sigue paseando ahora por su frente, su respingada nariz, las cejas y pestañas tan rojas como su cabello. Arthur se acomoda en la cama, de canto, para seguir acariciando y cuando deja de hacerlo por esos breves segundos, Allistor parece inquietarse, o molestarse; su entrecejo se frunce un poco y voz suena como un suave ronroneo.
El príncipe mantiene su enamorada sonrisa. Ve que el celta se revuelve un poco, y luego sigue durmiendo. Después, la mano sigue acariciando, recorriendo su fuerte espalda, sus antebrazos sus hombros, su cuello, y vuelve a su mejilla. Allistor, como si hasta en su subconsciente lo pudiera provocar con cada gesto, hace sonar su voz, otra vez, como el agradecimiento de un felino. Un ronroneo suave, como un gato restregándose contra las manos de su humano, buscando más caricias y atención.
A Arthur se le hacen adorables, hasta lo inconfesable, esas tiernas reacciones, y no puede resistirse a seguir acariciándolo, igual que como lo haría con un gato. Segundos después, Allistor lo llama entre sueños.
—Arthur...—Le dice en un balbuceo, y éste, sin que el otro se despierte, lo hace acurrucarse en su pecho para continuar con sus tiernas caricias en su cabello. Otro sonido como de ronroneo viene de su adormilada voz y Arthur necesita soltar una risita.
Es así como el sueño, finalmente, lo vence. Cuando Francis llega a la habitación, se emociona tanto con la tierna imagen que quisiera estamparla en su memoria y en cada rincón del palacio como si fuera el cuadro artístico más bello jamás creado.
~Noche XVII. Fin~
.
.
.
.
Me daba demasiado pudor este reto así que lo hice a la manera más tierna que pude. Aunque claro, quién no querría un gatito como Allistor 7u7 (o un tigre, grr~ (¿?))
Y como lo prometido es deuda, le dejo a mi querida Marielaotaku31 la otra imagen que inspiró Lus Primae Noctis:
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Díganme que no soy la única que se le cayó la baba con el fanart. xD Y ya sé que sus ropitas son modernas, pero me valió un poco v3rga. No sé quién será la artista, así que perdón por no poder darle los créditos
