1. ¡Estoy dentro!

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Silver's POV

Hoy era el día. La carta de mi tan esperada entrada a la universidad en donde soñaba estar iba a llegar justo hoy. Traté de espabilarme un poco: me la pasé unas horas con mi novia de toda la vida por la mañana y también junto a mi hermana menor, ya que por lo mismo de que conocía a Blaze desde que éramos dos pequeños erizos, Amy era su mejor amiga. ¿Y lo mejor? Los tres habíamos aplicado para la misma universidad, entonces los tres éramos un manojo de nervios.

Pude olvidarme de la escuela por un momento hasta la hora de llevar a Blaze a su casa. Nos habíamos prometido que el día que llegara la carta la abriríamos juntos, porque teníamos la certeza de que ambos quedaríamos en nuestra carrera soñada. Sus padres la recibieron en la entrada de la puerta con un sobre blanco en las manos. Demonios, hasta yo me puse nervioso.

— Aquí está el tan deseado sobre, Silv— mencionó caminando hacia mí, tratando de ocultar sus nervios.

— ¿Quieres abrirlo ya?— le preguntó Amy.

— Prometimos que lo abriríamos juntos, par— contestó Blaze, regalándonos una sonrisa a ambos después.

Regresamos al coche y nos fuimos camino a casa. No vivíamos muy retirados de la gran casa de Blaze, por lo tanto, no tardamos en llegar a nuestro hogar. Bajamos lo más rápido que pudimos para entrar a casa, aún más nerviosos.

Entrando al comedor, papá y mamá igual nos estaban esperando con las dos cartas en la mesa. Pfff, no podía con tanta presión.

— Amy Dark Rose, toma tu carta—. Papá la arrastró por la mesa hacia las manos de mi hermana. — Silver Dark Rose, tu carta— repitió el acto con la mía.

— ¿Están listos, niños?— nos alentó mamá a los tres. Eso me ponía peor aún.

Nos vimos a los ojos todos. No pude evitar tomar la mano de Blaze y apretarla, a lo que ella me respondió con una sonrisa. Pude leer en sus labios un "calma", en serio que me estaba muriendo de nervios. Amy rápidamente fue la primera en abrir el sobre, seguida de Blaze y al final yo. Maldita sea, estoy temblando como una gelatina. Sacamos las tres cartas y sólo buscábamos entre párrafos la palabra en letras mayúsculas.

— Mamá...— sólo pudo soltar la pelirrosa, antes de que las lágrimas amenazaran por salir de sus ojos.

Blaze y yo nos miramos sin decir nada aún, luego volteamos a ver a Amy. Mierda...

[...]

Tikal's POV

5 de la tarde, una mesa, tres equidnas reunidos rodeando una carta. Soy la menor de los tres Pachacamac, y la única que no había entrado a la universidad aún. Knuckles, mi hermano mayor, se lanzaba miradas con Shade, mi otra hermana; mientras yo veía esa carta muy fijamente, con mis brazos cruzados sobre la mesa.

— Kal, ¿qué rayos estás esperando? ¡Ábrela ya!— ordenó el mayor de los tres, con cierto tono de desesperación en su voz.

— No tengas miedo hermanita. En todos los lugares que has aplicado ya estás dentro. Uno más, uno menos, ¿no?— las palabras de aliento de Shade también sonaban a un querer saber mis resultados del examen de admisión, y pronto.

— Ustedes están en la universidad más prestigiosa de Green Hill, y la carrera que yo quiero tiene los mejores maestros en su campus—.

— También estás dentro en la universidad más prestigiosa de Angel Island y...—.

— Y en Station Square...—.

— Y Central City...—. Knuckles y Shade se interrumpían mutuamente enlistando varias universidades en las que me habían aceptado. Mientras tanto, yo sólo tomé el sobre y lo abrí, y empecé a leer...

The FratDonde viven las historias. Descúbrelo ahora