Un amor de Super-Héroes /Spider-Bug/

Capitulo 2

-Marinette ¿Tu crees que haya sido Chat?- Pregunto Tikki dudosa.

-No.......conozco a Chat, el jamas haría algo así- Empece a cambiarme mientras hablaba con Tikki. -Puede ser un poco extrovertido e incluso engreído- Comente pensativa. -Tal vez hay alguna confusión- Aclare con una sonrisa forzada.

Al terminar de alistarme me dirigí con el maestro Fu; este ya era un poco más anciano, y no podía moverse con la misma facilidad de hace tres años.

-Marinette justo a tiempo para el té- Saludo el maestro Fu gustoso mientras servia té en dos bazos. -Supongo que has venido a hablar sobre Chat- Dijo mirándome con seriedad.

-Así es- Respondí con tono triste. -Se que el no tiene que ver en nada con los crímenes de los cuales se le están acusando.

-Lo se, lo se- Murmuro el maestro Fu. -Sin embargo el tiempo logra cambiar a las personas, y el portador ha pasado por mucho.

-¿Usted entonces piensa que él tuvo algo que ver?- Le interrogue.

-No podría decirte a ciencia cierta- Bebió de su bazo y se quedo mirando por un tiempo su contenido. -Sin embargo, necesitaremos de alguien que lo investigue.......Marinette ¿Te han aceptado en la universidad?-Pregunto mirándome directamente a los ojos.

Yo le sonreí.

(....)

Han pasado varios días desde que converse con el maestro Fu, el plan era simple; Quuen Bee, Caparece y Rena Roge se harían cargo de Paris mientras duraba mi estadía de New York, entonces encontraría a Chat y aclararíamos todos los actos de los que se le incriminan.

-Marinette, no te olvides de los miraculous-  Manifesto Tikki tratando de cargar las cajas de estos.

El maestro Fu opino que me seria útil llevarme un par de miraculous, como plan de respaldo, así que había escogido los miraculous de la serpiente y el ratón. -Gracias Tikki- Le dije mientras acariciaba su cabeza. -Bueno, es hora.

Tikki se escondió en mi bolso de mano, donde guarde los otros miraculous, termine de empacar algunas prendas, y baje junto con mis maletas.

-Hija déjame te ayudo- Se ofreció mi padre mientras cargaba la maletas con facilidad. -El taxi ya llego, las estaré esperando abajo-  Dijo mi padre para después retirarse.

-Marinette, la verdad me siento feliz por ti, haz podido entrar a la universidad que tanto has deseado, pero, no te puedo mentir, siento algo de miedo-  Mustiso mi madre.

-¿Miedo?

-Si, han pasado varias cosas en New York, ah decir verdad, el hecho de que te vallas sola me preocupa, los villanos que nos han atacado no son iguales a los de allá-  Expreso mi madre con preocupación. 

-Lo tengo claro- Le dí un abrazo a mi madre para calmarla. -Estaré bien, lo prometo.

Después de  bajar la ultima maleta nos fuimos directo al aeropuerto, en donde se encontraban mis amigos; Alya, Nino, Juleka, Rose, Alix y Mylene.

-¿Qué hacen todos aquí?- Pregunte sorprendida.

-Crees que te vas a ir sin despedirte- Critico Alya con tono enojado.- Pues estas equivocada nena- Ella se abalanzo hacía mi dándome un abrazo. Acto que todos imitaron.

-Los extrañare- Dije a punto de derramar un par de lagrimas.

-No te olvides de nosotros ¿Lo prometes?- Alya me miro con tristeza.

-Lo prometo- Articule con una sonrisa. -Bueno....ya es hora- Me dirigí hacia mis padres y abrace a ambos.

-Te vamos a extrañar hija- Dijo mi padre.