Regresándola ||completada||

10. Boca cerrada

3er PDV

Daciana estaba allí totalmente estupefacta. Fue entonces cuando Gavril corre hacia ellas y suelta un suspiro.

-"¿Por qué te fuiste así de repente?"- Gavril se dirige a Dacia.

Dacia camina hacia él y lo golpea en la cabeza.

-"¡Ow! ¡¿Para qué fue eso?!"- se queja de dolor.

Sorin parpadea unas cuantas veces mientras observa el comportamiento entre Dacia y el chico de nombre Gavril, quien supuestamente era el hermano gemelo de Daciana.

-"¿También les dijiste a estas personas que eras un híbrido?"- pregunta Dacia.

Gavril pone los ojos en blanco. Después de todo, Dacia lo conocía tan bien que sabía que trataría de cubrir eso con alguna excusa.

-"No eres un híbrido. ¿Cuándo lo vas a comprender?"- dice Dacia mientras le coloca las manos sobre los hombros obligándolo a que observara a Daciana. "¿A caso ella se ve como una híbrida?"

-"Bueno..."- comienza Gavril mientras se rasca la cabeza. " Yo sí pensé que era una híbrida."
 
Dacia pone los ojos en blanco y suelta un suspiro.

-"Te he estado diciendo que eres un media raza de como ella."- dice Dacia.

Fue entonces cuando ambos Daciana y Gavril miran a Dacia y dicen al mismo tiempo:

-"¿Podrías dejar de llamarme media raza?"-

Ambos se miran algo sorprendidos. Daciana fue la primera en desviar la mirada. Dacia suspira nuevamente y les dice que se sienten en el suelo. Ambos jóvenes se sientan y esperan pacientemente a que Dacia comience con sus explicaciones.

-"Gavril se sabe la mitad de la historia, pero está en completa negación."- comienza Dacia.

-"Ya..."- Gavril baja la mirada, pues él sabía lo que ella les iba a explicar.

-"Gavril, es es la gemela de la que te hablé."-

Gavril frunce el ceño aún más. Daciana lo mira algo preocupado. En parte era bueno saber que ella no era la única que debía lidiar con secretos y mentiras.

{Retrospección}

-"No creo que debamos revelarle el género a Penélope..."- dijo Emil mientras colocaba una mano en el marco de la puerta.

-"¿Por qué? ¿Es malo tener gemelos en el clan?"- decía Gretchen quien ahora estaba preocupada por el futuro de sus hijos.

Emil camina hacia su esposa y se arrodilla frente a ella mientras le toma las manos entre las suyas.

-"Cuando estés por dar a luz, llamaré al viejo lobo para que se lleve a uno de nuestros niños."- la expresión se Emil estaba llena de pena.

Los ojos de Gretchen se abren como platos. Ella sacude la cabeza y suelta sus manos de las de Emil.

-"¿Por qué? ¡¿Por qué tengo que hacer eso?!"- los ojos de la mujer se llenan de lágrimas.

-"Oí a Penélope hablar con unos hombres. Si es un varón, ella quiere criarlo en la mansión. Sabes muy bien que vivir ahí no es lo más bonito del mundo."- continúa Emil quien sabía perfectamente lo que era ser criado por Penélope.

Él había pasado un sinnúmero de cosas en ese lugar. El grupo de solitarios de Penélope siempre lo molestaban, y aveces lo torturaba por ser incapaz de transformarse cuando deseaban. Una vez, los solitarios dijeron que él era una desgracia y que no era tan desafiante como su difunta madre. Esas palabras se habían quedado con él y le habían provocado desconectarse poco a poco de esa mansión y de Penélope misma.