Imposible

Especial Imposible: Mi mundo sin ti. Parte 3

Loki se tomo su tiempo antes de responder aquella pregunta, no porque la evadiera sino porque le costaba mucho recordar los motivos que le llevaron a dejar atrás a Steve.

Evoco aquel rostro varonil de atractivas facciones, recordó aquella cálida mirada que solía darle cuando le veía como si fuera su Dios, cierto era que Loki era uno pero Steve no lo veía como el Dios de las mentiras, no, para él Loki era el único Dios que deseaba venerar, representaba para el rubio la creación de vida, la esperanza y el amor.

«Entonces, si el era importante para mi ¿porque lo abandone?» se pregunto una vez mas, y su cerebro le recordó nuevamente el motivo, a su mente volvió la imagen de aquel castaño recordándole que Steve y él volvían a tener una relación «Cierto, ni mi hija ni yo teníamos lugar en la vida de Steve» el pelinegro se dijo que lo único que deseaba era que él pudiera llevar una vida normal «Y si esa vida solo se la puede dar Tony, yo ya no debo intervenir...»se dijo obligándose a recordar como su propia vida se vio asolada por aquel huracán llamado Jane, Loki se sentía mal de haber provocado el mismo daño a otros. «No soy mejor que Jane, le robe su amante a Tony, sin pedir permiso volví a entrar a su vida y esta vez restregándole a Tony que yo le daría un hijo al hombre que él amaba ¿no soy igual o peor que Jane?»

Loki no solo había perdido a Thor quien fuera su mundo entero, el amor de su vida y la única persona de la cual creyó solo podría enamorarse, también perdió a Steve, aunque a veces se preguntaba si alguna vez este le perteneció.

Cuando Loki le contó a Bucky la razón de su dura decisión, este le escucho pacientemente en el más absoluto silencio, conforme el Dios hilaba sus palabras Bucky no pudo evitar sentir un fuerte impulso por asestarle un buen puñetazo en el rostro.

Cierto era que comprendía las razones de Loki, mas no dejaba de pensar en que este en lugar de ser llamado el Dios de las mentiras debió ser llamado el Dios del dramatismo, no comprendía como un ser tan listo como él en cuestiones del corazón resultaba un fracaso. En lo único que era capaz de pensar era en que, tanto Steve como Loki eran igual de torpes y sin duda la mayor parte de sus problemas era culpa suya ya que preferían tomar decisiones apresuradas, basándose en lo que ellos creían era lo correcto en lugar de sentarse a hablar como lo haría la gente corriente.

«Mi sobrina tiene a un par de idiotas por padres, solo espero que la estupidez no sea hereditaria» este le da una mirada a la bebé que permanece silenciosa mirándole con aquel bello par de brillantes esmeraldas, era como si esta lo estuviera evaluando «Mirada astuta e inteligente, creo que no tuvo la mala fortuna de ser como sus padres» pensó aliviado.

Bucky le dio una mirada al hechicero que permanecía inmóvil al lado de Loki y la bebé, le recordó a una estatua con aquel rostro sereno, el único que dejaba ver un rostro abatido era el pelinegro. 

Bucky se llevo el indice y el pulgar al puente de la nariz para ejercer un poco de presión en la zona, intentaba controlar su lengua para no decir algo que pudiera herir la susceptibilidad de aquel Dios, se contuvo enormemente de no decirle lo imbécil que era por abandonar a Steve solo porque el no menos imbécil de Stark había soltado esa basura en un momento critico y de paso se reprocho así mismo por no haber intervenido en ese instante, lo cierto era que todo fue tan rápido que no tuvo oportunidad de haber dicho algo.

Tomo lentamente aire organizando sus ideas.

— ¿Es que eres imbécil?¿Como carajos has llegado a esa conclusión? —  dijo exaltado antes de darse cuenta que externo sus pensamientos. —  ¡¡Steve te ama!! o al menos intentaba algo serio contigo,  ¡algo así como una familia!

Loki lo ve sorprendido, no esperaba aquella reacción, Strange también parecía sorprendido.

— ¿Me amaba?