MI VIDA SIN TI... (segunda temporada de "El prometido de mi hermana")

2

Apenas ingresaba a mi trabajo, aun ni siquiera había dejado mi bolso y mi chaqueta sobre la silla de recepción cuando Isaías, uno de mis compañeros de piso se acercó a mí, cuando ingresaba.

— Buenos días—hizo una mueca juntando sus manos—

— Buenos días Isaías ¿Cómo es...?

— El jefe quiere verte—sentenció callando mis palabras—

Me di tiempo de dejar mis cosas cobre el mostrador que había en recepción y camine hasta la oficina de mi jefe. Golpee la puerta esperando a que me diera el ok para ingresar, a medida que esperaba

me preguntaba ¿Por qué motivo quería verme tan temprano? Y sobre todo que hacia el aquí a estas horas, mire el reloj sobre mi muñeca y no, definitivamente yo no había llegado tarde, llegue justo con dos minutos de anticipación. La puerta se abrió interrumpiendo todos mis pensamientos; Jane salió de la oficina con una sonrisa deslumbrante, no era necesario esforzarme mucho en pensar porque salía ella de aquí. Me miro de pies a cabeza aun manteniendo esa sonrisa.

— Puedes pasar, el señor Steve te espera—empuje la puerta ingresando al interior—

El señor Steve estaba sobre su silla recargado muy cómodamente, sus labios se curvaron y entonces dijo algo que me dejo helada.

— ¿Despedida? Pero... ¿Por qué?

— Digamos que...—hizo una mueca tomándose su tiempo para hablar—usted no está a la altura de las demás señoritas que trabajan aquí. Exijo mucho a mi personal y está claro que usted no está rindiendo como yo esperaba—explico como si nada, como si estuviera dándome una noticia cualquiera—

— ¿Hice algo mal? Señor Steve deme una oportunidad, realmente necesito el trabajo—suplique desesperada. El alquiler de mi casa y mis gastos no se pagarían solos, necesitaba de este empleo—

— Una segunda oportunidad...—murmuró elevando sus cejas—¿que estaría dispuesta a hacer para continuar trabajando aquí?—preguntó curvando sus labios—

— Si tengo que hacer horas extras lo haré—propuse firmemente, pero algo me decía que aquel tipo tenía otras ideas en su cabeza—voy a mejorar mi empeño lo prometo...

— Está bien señorita Kwon—me detuvo el sonriéndome—estoy seguro que usted dará todo para permanecer en esta compañía. Le daré una oportunidad.

— ¿De verdad?—lleve la mano a mi pecho sintiéndome más calmada, era como si mi alma habría regresado a mi cuerpo—gracias señor Steve.

— Pero...—pronunció interrumpiendo—hay ciertas pautas que tendrá que cumplir a partir de ahora.

— ¿Pautas? ¿Qué clase de pautas?—se levantó de su asiento y camino hasta quedar justo a mi lado, demasiado, tuve que retroceder unos pasos hacia atrás cuando me vi invadida por el—

— Nada grave señorita Kwon, cosas sencillas. Como por ejemplo, no vuelva a rechazar mis invitaciones a almorzar—advirtió sin quitarme sus ojos de encima—tal vez en alguna ocasión la llame fuera de horario de trabajo, usted deberá asistir sin poner peros, ya que su trabajo debe estar por encima de su vida personas ¿quedo claro? Ah por cierto, se me estaba olvidando...—ladeo su cabeza tocando su barbilla—usted deberá viajar conmigo la próxima semana, un viaje de negocios por supuesto. No se preocupe por la estadía, pasara la noche en el mejor hotel de Tailandia, mejor dicho... pasaremos una muy buena estadía—comenzó a reír caminando nuevamente hasta su escritorio para tomar asiento—entonces señorita (TN) _____ ¿cree usted que esta vez podrá estar a la altura a partir de ahora?