MI VIDA SIN TI... (segunda temporada de "El prometido de mi hermana")

21

— ¿Hace mucho que estas aquí?—pregunte pasando por su lado colocando las llaves sobre la cerradura—

Ni siquiera fui capaz de preguntarle como estaba, si había tenido un buen viaje y ni hablar de un cálido abrazo de bienvenida ¡Dios! ¿Qué estaba haciendo? Desde luego que todo iba mal y ahora ya ni siquiera sabía cómo acabaría todo, pero no podía sobreactuar, quiero decir, sonreírle y hacer de cuenta que todo estaba bien sería tan falso como escuchar de sus labios que no había estado con su novia.

— Quizás veinte minutos—respondió—

Logre abrir la puerta y ambos ingresamos al interior, me quite mi abrigo dejándolo sobre una silla que estaba cerca pero... al ver que él no hacía lo mismo, entonces me pregunte si quizás su visita era rápida ¿habría venido a terminar conmigo? Oh ¡idiota reacciona! ¿Qué es lo que va a terminar?

— ¿Quieres tomar algo? quizás un café...

— No, tome café con Jiwon antes de venir—asentí haciendo una mueca quedándome sin más tema conversación ¿Por qué demonios parecía tan difícil comportarme delante de el?—

— ¿Llegaste hace mucho?—pregunte mientras me dirigía a la cocina para prepararme algo para tomar—

— Mi vuelo llego hoy en la mañana—lo sentí hablar a mis espaldas, había entrado también a la cocina—no supe de ti en semanas, estaba algo preocupado por ti...—di la vuelta apoyándome en la mesada—

— Si estabas preocupado, habrías tomado el teléfono ¿no lo crees?—apreté mis labios al darme cuenta que aquello había sido un claro reproche y lo peor no fue eso, sino que Siwon claramente lo noto y su expresión se asemejo a algo muy parecido al cansancio—

— Tienes razón.

Pero no parecía estar admitiéndolo, más bien parecía que estaba dándome la razón para no desencadenar ¿una discusión tal vez?

— No quise decirlo de eso modo—me apresure a contestar—perdón—dije afligida, pero extrañamente una sonrisa se asomó por sus labios—

— No hiciste nada malo, no pidas disculpas—se acercó con lentitud y cuando creí que iba a besarme solo tomo un mechón de mi cabello y lo sostuvo entre sus dedos por unos segundos—tengo que irme.

Mis ojos se abrieron con asombro ya aunque quise preguntarle y pedirle que no se fuera, solo asentí y lo acompañe hasta la salida.

— Descansa—dijo antes de desaparecer por las escaleras—

— Tu también.

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Al salir del trabajo me reuní con Tania y Jiwon, compramos comida y fuimos directo a mi casa. Hacía tiempo que no hacíamos algo así, sobre todo después de la perdida de Tania, quien al parecer estaba recuperándose y de apoco volvía ser esa chica animada y alegre que siempre fue.

— Olvide el abrelatas—dije levantándome de la alfombra—

— Puedo ir yo—se ofreció Tania—

— Déjalo, iré yo y de paso traeré más papas porque se están terminando—dije enviándole una indirecta a Jiwon quien comía con desesperación mientras no alejaba la mirada de su celular. Tania rio intentando quitarle el celular de sus manos. Volví a la mesa luego de traer lo que faltaba, me senté en la alfombra junto a ellas y quite el envoltorio de las hamburguesas de cada una, ya que ninguna de las dos lo había hecho, Jiwon seguía concentrada escribiendo en su celular y Tania buscaba algo que poner en el pequeño equipo de música que tenía.