•°• CIRCLE •°•

17

JungKook no a vuelto. . . ¿Debería intentar escapar? . . .Tal vez este por llegar y si me descubre no se de que cosa sea capaz. Su mente esta dañada.

Las horas pasaron hasta que llegó. Su aspecto dejaba en evidencia lo muy ebrio que estaba. Me observó y con lentitud se acercó a mi, acorralandome en la pared.

— Lucy —. Dijo con voz ronca.— Eh sido muy paciente contigo. . . ¿Sabes?, no es fácil contenerse cuando tienes a alguien como tu, cerca.—cogió unos mechones de cabello y los olío profundamente.— Hueles bien . . . siempre has olido jodidamente bien.

— J-JungKook, estas agobiandome.

— Incluso tu piel huele a flores.— murmuro olfateandome el cuello. De pronto se apegó a mi toscamente, permitiéndome sentir toda su dureza chocandome la zona V.— ¿Qué hago con estas ganas de poseerte?.

— Alejate de mi.— intentaba moverlo al menos unos centímetros.— Quítate JungKook.

— Lucy, yo se que me deseas.— Negué.

—Jamás desearía a otro hombre que no fuera TaeHyung.— Gruñó por lo bajo y le dio un golpe a la pared que hacía a un costado de mi.

— ¡Mierda! ¡Te dije que no lo nombraras!— elevó la voz alterado.— ¡Haré que lo hagas! ¡Aunque sea por la malas! — Violento me atrajo hacia su boca. Me besaba desesperadamente, incluso llegó a morderme un par de veces. Con todas mis fuerzas me removía de un lado a otro. Lo empujaba y le daba golpes que ignoraba.— Ahora sabrás lo que es un hombre de verdad, Lucy.

Me empujo hasta caer en el sofá. Desesperado y bruto, arrancaba cada prenda que me cubría. Sus manos se posaron sobre mis senos, los cuales apretó sin cuidado alguno.

— ¡No me toques! ¡Sueltame!

— ¡Eres mía!

Como pude, logre alcanzar parte de la lámpara que se encontraba cerca. Tire del cable y sin más, le di con el mango en su cabeza dejándole inconciente.
Sin perder tiempo, saque el móvil de su bolsillo y las llaves.

Me sentí tan libre cuando puse un pie afuera, pues ya no recordaba como se sentía el viento y los pequeños rayos del sol.
No podía perder el tiempo, así que me puse a correr por donde creo, fue la zona por la cual llegamos.
Corría tan rápido como me lo permitían los pies y el vientre. Tropecé un par de veces, incluso caí en las piedras, pero no me importó. Porque en el fondo sabía que mi libertad estaba llegando y que tarde que temprano estaría junto a TaeHyung.

Decidí descansar bajo la sombra de un gran árbol, tenía sed y estaba sumamente agitada y cansada. Tome el celular en mis manos pero para mi desgracia tenía clave.

— Maldita sea.— Dije.— ¿Cómo voy a desbloquear está mierda?.

Entonces, una llamada entrante perteneciente a un número desconocido figuró en la pantalla. Dudosa contesté para pedir ayuda. Cuando oí la voz del otro lado de la línea mi corazón se detuvo.

— Jeon, tenías razón,
¡Mi Lucy está muerta!

¿Muerta?

—Kim TaeHyung.— Hubo silencio hasta que respondió.

— ¿Lu - Lucy?

— ¡TaeHyung ayúdame, JungKook me secuestró!

— ¡Amor! ¡¿Dónde estás?!

— No lo sé.— Dije al borde del llanto.— No lo sé. . .

— Tranquila, iré por ti.
¿Me oyes?, quédate ahí
y trata de mantenerte a salvo, cariño.

De la nada el teléfono se apagó, seguro deber haber tenido muy poca batería.
Me acurruque en mis piernas y me eché a llorar.

La noche no demoro en llegar y con ella un frío que cala hasta los huesos.
Tenía hambre, angustia y miedo.
Cada ruido me ponía en alerta, porque sé que JungKook no parará hasta encontrarme.

El agotamiento sumado a la descarga adrenalinica hizo que pausadamente me relajara y  de apoco los párpados me pesaban hasta el punto de querer mantenerlos cerrados.

[...]

—Lucy.