Tomó asiento en el lugar que Wonho le señaló y cuando sintió lo cómoda que era la silla y la vista de la oficina de Wonho, se sintió como si fuera el jefe del lugar.
Sonrió mientras hacía girar la silla, no importaba cuánto tiempo pasara, esas malditas sillas giratorias siempre serían algo divertido para pasar el rato.
Pero se detuvo cuando vio que Wonho se sentó en la silla de enfrente y puso los pies sobre el escritorio, frunció el ceño ante tal acción porque sabía que Wonho era la persona más delicada en cuanto a su escritorio.
Wonho lo vio fijamente y apoyó las manos sobre su abdomen, dando una imagen más despreocupada que antes.
— Justo así estaba... — Hyungwon lo miró extrañado — esa era exactamente mi expresión cuando lo vi poner los pies de esta manera sobre mi amado escritorio... — sonrió al ver que Hyungwon estaba uniendo piezas en su cabeza apenas — ¿Y sabes lo que dijo? — Hyungwon negó — fue un estúpido al decir "Dios... tienes cara de no tener sexo hace mil años"
Hyungwon estalló en una ruidosa carcajada agradeciendo al cielo que la oficina de Wonho era a prueba de sonidos.
— Por Dios... — seguía sin poder detener su risa — eso fue tan... Directo — Wonho asintió bajando los pies del escritorio — aunque no esperaba menos de tu amigo, al menos es sincero y leal, seguro es un gran amigo ¿no?
— Lo es... — suspiró — pero no reaccioné de la misma manera que tú en aquel entonces...
Hyungwon lo vio sorprendido y su risa se detuvo de repente.
— Pero... ¿Por qué...? — intentó descifrar la expresión en el rostro de Wonho, él parecía estar molesto incluso al recordar.
— Porque era un estúpido... — miró a Hyungwon fijamente y avanzó quedando frente a él — incluso él podía leer mi cara y saber que mis problemas personales eran enormes... Y yo era el imbécil que aseguraba que todo estaba bien...
Wonho tiró de Hyungwon para que se pusiera de pie y pudiera abrazarlo por la cintura.
— ¿Problemas? — Wonho asintió acariciando su rostro.
— Hyungwon... — suspiró — el día anterior a ese, en un estúpido intento por satisfacer un poco mi extrema necesidad, le pedí a Lily fuera a mi casa... — suspiró — quería tener sexo, claro que sí... Pero estaba tan necesitado de dormir con alguien a mi lado, de verdad... — agachó su cabeza — quizá suene estúpido, pero por una vez en la vida, quería sentir el calor de un cuerpo humano después de tener sexo... — miró a Hyungwon — las escasas veces que tuve "algo" con ella, se fue tan rápido como todo terminaba, estaba tan vacío...
Hyungwon se quedó viéndolo fijamente, no sabía que decir al tener un Wonho tan expresivo delante.
— No tienes porque hablar de esto si te incomoda... — resopló — es decir...
— Estamos cerrando temas ¿Recuerdas? — Hyungwon asintió levemente.
— Si, pero... — suspiró sin saber que más argumentar.
— Hyungwon... — acunó el rostro de su esposo — es necesario, creo que todos tenemos una historia que contar... Y la mía es esa — sonrió levemente — cuando escuché sus palabras, recibí un verdadero golpe de realidad y me frustré de saber que estaría sin trabajo por mucho tiempo... No me alegraba, porque eso significaba estar más solitario — agachó la cabeza y abrazó a Hyungwon — y yo odio la soledad...
El delgado sintió las manos de su esposo acariciándole la espalda suavemente y unas repentinas ganas de llorar lo invadieron al mismo tiempo que aquel conocido nudo se formaba en su garganta.