𝑜𝑛𝑐𝑒

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♡ escrito con la canción the person i loved most in this world, de taemin.

♡ escrito con la canción the person i loved most in this world, de taemin

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—renjun, para de llorar, por favor. 

él no puede desde que llegó a casa, días atrás. 

renjun y chenle están sentados el uno frente al otro, la mesa se alarga entre ellos, pero el silencio es tan denso que solo deja escapar los sollozos del mayor. el resto se pierde en esa esfera lúgubre. 

—necesito llorarlo ahora —murmura, conteniendo el rostro entre sus manos. 

zhong agarra la tela de sus pantalones, sabiéndose lo suficientemente impotente como para no poder hacer nada en su posición. observar a su amigo morir lentamente y entender que él no puede salvarlo ya es castigo suficiente, cree. 

—sé que todo eso de que llorar es bueno suena reconfortante ahora, pero no puede ser así para siempre. tienes que ponerle un punto a esto, lo sabes. llorar nunca solucionará tus problemas, renjun. por favor... para. 

chenle tiene razón, y el chico lo sabe. no es capaz de frenar su impulso, así que ha estado alimentándolo. pero el tiempo corre, la vida pasa, se va, se escapa de entre sus dedos, y algún día lamentará no haber disfrutado de ella. bañándose con el agua salada de sus propias lágrimas, tiene un pie colgando en al vacío. 

respirar al ritmo de sus pulsaciones, ¿es ese el truco para no dejarse llevar nunca? tal vez, respirar siempre ha sido la clave. 

—siento no habértelo contado antes —lamenta en alto, aunque en realidad no está seguro de si esa era su honesta intención. 

—oye —el otro lo llama —no era tu obligación —afirma, en cambio negando con su cabeza —. no es tu obligación contárselo a nadie, renjun. no lo es —lo deja de nuevo coger aire —. ¿no te das cuenta? puedes con ello. 

—creía que sí —le escucha susurrar. renjun se atrapa el labio entre los dientes y lo aprieta hasta que el metal y la sangre se funden en esa espiral roja que tiene por dolor su mayor atracción. 

pero si los años y la soledad no lo han curado, ¿qué lo hará? porque el miedo sigue allí, durmiendo a su lado, comiendo con él, presionando en su pecho como si fuera un demonio. 

—¿y ya no? —cuestiona. la respuesta la obtiene simplemente mirando, en la forma en la que renjun evita siempre llorar solo, por si llega un punto en el que ya no pueda volver por sí mismo —, ¿es que no puedes ver las cosas que has conseguido? escúchame —ordena —. renjun, escúchame. eres fuerte, eres mucho más fuerte que muchos otros. alguna gente no sobrevive a esta mierda. no, mírame. no dejes de mirarme. jaemin no es culpable de lo que pasó entre vosotros hace años. no es culpable de lo que ha pasado ahora. ¿quieres encontrar un culpable? —las palabras abandonan su boca, porque chenle las ve como el único recurso que le queda. y ojalá pudiera haberlas usado antes —¡renjun! —lo llama, cuando los ojos del mayor comienzan a temer el contacto directo con los suyos. si lo deja marchar, entonces, entonces lo perderá, y lo sabe —¿quieres un culpable?

asiente, eso es lo único que hace. 

—sí.

y por fin lo ha dicho, como si lo hubiera necesitado para dejarse a sí mismo respirar. 

—ya lo tienes —dice zhong, algo iluminando sus ojos —. park hyungwoo es el culpable. es el único que merece estar encerrado donde está. es el único que no se merece un perdón, renjun. es el único en el que debes pensar cuando te estés cayendo, porque es a quien debes dejar atrás. y no puedes hacer nada por cambiarlo —sentencia, perdiendo los estribos —. no puedes cambiar el haber estado en el lugar y el momento exacto. no puedes cambiar la violación. no puedes cambiar tu miedo ni el de jaemin. no puedes cambiarlo —niega, mirándolo con desesperación —porque eres un humano. y ojalá pudieras, de verdad —el mayor escucha, sabiendo que el alcohol escuece porque le está curando —... pero no puedes. lo que sí puedes cambiar, renjun, es lo que pasa a partir de ahora. puedes seguir teniendo miedo. puedes seguir llorando. pero tener valor no es tan difícil, estoy seguro de que ya lo sabes. piensa en lo que sentiste cuando entraste a la pastelería en mi lugar, cuando —chenle sonríe —llamaste a jaemin porque no podías seguir huyendo. sé que te diste cuenta, que no podías aceptarlo. lo sé, créeme, lo sé. sé que es difícil. que duele, y da miedo —se encoje de hombros —, lo sé. pero puedes tener miedo y ser valiente a la vez. 

los ojos de renjun, abiertos. como si pudiera comprender el idioma pero no hablarlo, impaciente por decir tantas cosas que, al final, se queda estancado decidiendo cuales primero. 

él podría tomar un millón de caminos. podría tomar el más fácil, y no por eso equivocarse. o podría tomarlos todos, y todos ellos serían incorrectos. 

porque el único camino que vale la pena tomar es el de la sinceridad, no con el mundo, si no consigo mismo. el que le hace bien a su corazón, el que lo hace sanar y cargar fuerzas para lo que esté por venir. ese es el camino que lleva tanto tiempo buscando, el que tenía frente a sus narices y no miraba, solo por si acaso; como si fuera un espejismo demasiado bonito para ser real. 

—¿y cómo lo hago? —pregunta. su voz rota, no obstante, llena de viva calidez. 

porque está vivo.

—tú realmente —contesta chenle —no necesitas que alguien te diga que lo único que te hace falta eres tú mismo. sólo tú puedes saberlo, porque solo pasa por ti, renjun. 

zhong camina hasta la figura contraria, con cuidado y delicadeza, irrumpiendo como si no pudiese tocar nada. incluso si renjun ha de ser fuerte, entiende que también necesita dejarlo escapar, necesita terminar con ello definitivamente. necesita llorarlo, como él dijo al principio, por última vez. así que lo envuelve en un abrazo, en el que el agua y el agradecimiento se funden y dejan ser. 

y renjun, por fin, lo sabe. 

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Yo realmente no he tenido mucho tiempo para escribir últimamente. Tuve una muy mala experiencia durante una reciente exposición, y mi mente como que se llenó de los pensamientos de lo que supone el final de un trimestre. Lo bueno es que aquí donde vivo falta poco para que comience a nevar, y mañana me voy de vacaciones donde vive mi familia materna. Allí quizá no tenga demasiado tiempo para gastar escribiendo, pero espero que en las dos semanas que me quedan pueda hacer algo. Bueno, de todas formas, tampoco es que alguien me vaya a notar, pero yo lo digo aún así, jé. Besis. 

P.D.: no sé por qué últimamente sólo me salen cosas demasiado dramáticas. En fin, perdón. ♥

𝖇𝖔𝖔


𝑘𝑒𝑛𝑜𝑝𝑠𝑖𝑎 🌰 [𝓳𝓪𝓮𝓳𝓾𝓷]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora