Oɴᴇ Sʜᴏᴛs Sʜᴇɪᴛʜ [ᵉⁿ ᵉᵈⁱᶜⁱᵒ́ⁿ]

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Era la onceava prueba de embarazo que se realizaba, todas las anteriores salían negativo, la desilusión en la cara del azabache siempre era notoria, desde ya hace dos años que su pareja y él han intentado tener un bebé, todo era puro deseó, incluso pensaba que era infértil.

En aquel cuarto de baño sostenía la prueba de embarazo, tenía miedo de mirar y ver solo una raya anunciando negativo.

-¡Positivo! -Gritó- ¡Voy a tener un bebé!

Salió del baño para correr a la sala donde se encontraba su hija Aliza.

-¡Alizabeth! -Se sentó a lado suyo con nerviosismo- Tú sabes que Shiro y yo hemos intentado tener un bebé -La azabache asintió-, todas las pruebas salían negativo pero ahora... Mejor veló por ti misma.

Le pasó la prueba de embarazó, un grito salió de los labios de la menor que abrazó a su padre adoptivo.

—¡Tendre un hermano o hermana! —Lágrimas de felicidad salían de sus ojos azules.

—Aún no quiero confirmar nada ¿sí es un error?¿Sí falló la prueba?

—No pienses así papá, podemos decirle a mi tía Pidge que nos acompañen al médico y ¡pum! Confirma que estas embarazado.

Y si en este mundo es normal que los hombres se embarazen.

Los dos se pusieron en marcha a la casa de la italiana quien no dudó en acompañarlos para poder realizar dichos estudios.

¡Sorpresa!

Keith esta esperando un bebé.

Ahora la situación es: Como decirle a Shiro.

[...]

Aliza, Pidge y Keith realizaron una comida para poder dar a conocer la noticia, solo estaba la gente más importante para ellos; Lance con su pareja Allura, Hunk que llegó con Shay, Coran y Krolia.

Al terminar de comer el azabache saco una bolsa de regalo y se la paso al japonés.

—Aquí es donde me asustó —Miro la bolsa—, dime que no olvide nuestro aniversario.

—Nada de éso, tu solo abre el regaló.

El japonés con nervios abrió la bolsa de color negro, había mucha serpentina y arriba de esta había una carta.

—Léelo en voz alta —Leyó el sobre, abrió el sobre y empezó a leer la voz alta.

—Aún no me conoces pero pronto lo harás, aún faltan más meses para poder presentarme a tí, yo se que eres un hombre muy bueno y te encantan los niños por algo trabajas en educación primaria. Aceptaste a Keith en tu vida a pesar de ser un poco terco y a Aliza una niña tan loca que no puede estar quieta cinco minutos —Eso causó la risa a los que se encontraban ahí—, también me he informado que tienen unos amigos tan peculiares.

»Hunk y Shay me van a consentir con mucha comida, Lance me enseñara a conquistar, Allura estará a mi lado cuidandome de que no me pase nada, Pidge me dará muchos conocimientos y Coran me contara historias de su juventud dorada. Ya quiero conocerlos a todos ustedes, jugar y reír. Se que te esta ganando la curiosidad de saber quién soy, quita la serpentina y cuando abras la caja sigue leyendo.

Dejó la carta a un lado, saco la serpentina de colores y efectivamente había una caja de color blanco, la abrió con aire de suspenso y a sus ojos apareció la prueba de embarazo junto con el estudio que se realizó. Lágrimas de felicidad bajaban por el rostro del japonés y con la voz entre cortada siguió con la lectura.