Baby Boy ✓ MinChan

XII

Chan

Me quedo mirando a un apenado Minho. No lo hago porque quiera molestar, simplemente no puedo creer lo que acabo de ver y oír.

Cuando entramos al departamento creí haber escuchado a los mismísimos ángeles, no exagero. Y no me equivoqué. Minho en medio de la cocina, con una cuchara en la mano, despeinado y sudado, e iluminado por los rayos de sol que entraban por la ventana era lo más angelical que había visto nunca.

Y su voz, dulce y algo desgarradora por la canción, que incluso así podría derretir el corazón más frío.

—¿Qué deberíamos preparar? ¿Qué se te antoja comer, Chan? —La profunda voz de Felix me vuelve a la realidad.

Minho sigue agachado y me sorprende verlo tan fuera de sí, en otro momento me habría dicho que dejara de mirarlo o simplemente se habría ido. Aparto mi mirada y veo al rubio.

—La verdad es que no tengo idea —contesto, porque todas la ideas que tenía en mente se esfumaron hace unos minutos—. ¿Alguna sugerencia, Minho?

Este me mira y abre la boca pero ninguna palabra sale de ella. Así que Changbin contesta por él.

—No le preguntes a él, sea cual sea tu pregunta, su repuesta siempre será ramen.

Me río porque ya voy entendiendo la obsesión de Minho con el ramen y porque quiero aligerar el ambiente.

—Pues entonces que ramen sea —digo y Minho  me mira, y por un momento creo ver una ligera sonrisa en sus labios.

Changbin hace ademán de querer negarse, pero un manotazo por parte de Felix lo detiene.

—Entonces ramen será —dice el pecoso y su novio suelta un resoplido de derrota.

**

Entre plática y bromas preparamos ramen, pero que no pique porque al parecer Minho es poco tolerante al picante, este último apenas si habla. Cuando lo miro de reojo puedo ver como se sigue poniendo rojo y como cierra los ojos en señal de vergüenza o cansancio, no sé...

Cuando terminamos de preparar todo, servimos la comida y nos sentamos.

—¿Y tu familia piensa mudarse a Corea también, Chan? —pregunta Changbin quien sostiene la mano de su novio, cosa que hace sentir un poco incómodo el ambiente, pero finalmente nadie dice nada.

—¿Cómo hizo la familia de Felix, te refieres? —pregunto y sonrío de lado—. No. En mi caso vengo solo.

—Vaya... Pensé que era cuestión de tiempo para que llegaran.

—Sí... no. Digamos que yo estoy aquí porque luché por ello.

Felix quien comprende simplemente me mira y asiente, pero Changbin y Minho me miran esperando que diga más.

—Yo... Tuve que trabajar 7 años en Australia para poder pagar la universidad, el cuarto que estoy rentando y técnicamente todo lo demás —digo sin darle mucha importancia.

—¿Por qué? —pregunta el pelinegro más alto sin comprender.

—Digamos que sus padres son muy tradicionalistas y, mi tía y su marido querían que Chan fuera abogado como su papá —me ayuda Felix a contar.

—Pero yo no quiero eso, yo quería venir a esta universidad para poder estudiar diseño gráfico. Así que ellos me dijeron que era libre de hacerlo siempre y cuando yo sustentara todos los gastos que eso conllevara —termino la historia.

Todos guardamos silencio y ahora me siento culpable por haber apagado el buen ambiente que había.

—En fin. Está bien, ¿saben? Eso me enseñó a luchar siempre por lo que quiero. Y aquí estoy. —Sonrío. Felix y Changbin me miran orgullosos y Minho me dirige una pequeña sonrisa.

El timbre de un celular suena. El de Minho, que rápidamente se levanta.

—Disculpen, tengo que contestar. —Y sin más se va a la que supongo es su habitación.

—No creas que es maleducado —dice Changbin—. Lo más seguro es que sea su hermano.

—¿Minho tiene un hermano? —pregunto intrigado, la verdad jamás me había planteado esa posibilidad.

—Sí, lo tiene. Y siempre que los hermanos hablan, perdemos a Minho por horas. Ellos son muy unidos —dice Felix y su rostro no muestra reproche, más bien es comprensión.

Como puede notarse no sé de comidas (y menos coreanas), y aunque busqué tampoco encontré la comida favorita de Minho (pido perdón). :'( Y tampoco de las universidades de Seul, así que no sé si en alguna se dé esa carrera, pero vamos a fingir que sí.