Capítulo 27

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- Cállate -Dijo Aubrey.

- No queríamos que te pasara eso -Le dijo Aaron.

- No falta mucho para llegar... Llegar a los problemas y el papeleo -Dijo el Cap al sentarse y tomar un trago.

- Oui, ya se hará costumbre -Dije.

De pronto Aaron salió volando del asiento.

- Te dije que te callaras -Aubrey molesta al parecer pateó a Aaron.

- Bien, lo siento -Aarón se levantó y tomó asiento con nosotros, por lo que nos quedamos mirando.

- ¿Qué? -Preguntó él.

- Nada -Dijo Ray entre risas.- Ahh... Voy a morir de hambre... ¿Qué horas son?

- Las... 5:50... De la mañana -Respondió Scott.

- Tampoco he dormido... Me despiertan cuando lleguemos -Ray tomó una cobija, se tapó y rápidamente cayó dormido.

- Bien... Algo que más necesitan es descansar... Todos -El Cap nos pasó unas cobijas antes de entrar a la cabina y se apagaron los focos.

Todos nos dormimos hasta que llegamos al Pentágono. Nadie había dormido en 24 horas o más...

Sonó una alarma y todos nos levantamos aunque fue difícil levantar a Aubrey y Ray. A todos nos pusieron de nuevo las pulseras para no usar nuestros poderes mientras dormíamos.

- Ya llegamos -Dijo el Cap.

Bajamos del avión y habían muchos científicos y soldados esperándonos.

Narra Aubrey

Me hubiera gustado más estar toda mi vida dormida...

El Jefe y el Cap bajaron primero del avión, después bajé yo y me tomaron de los brazos para llevarme de nuevo a aquella habitación en dónde empezó todo la primera vez que llegue a éste lugar, pero esta vez estaba con los chicos. Nos pusieron en esas sillas especiales para no usar poderes y en frente de nosotros había una silla, de pronto entró el Jefe.

- Bien, quiero que me describan todo lo que pasó antes de que desaparecieran Aubrey y Ray, primero... Ray. Ah sí, no interrumpan otras conversaciones -Dijo el Jefe al sentarse.

Le explicaron todo, de principio a fin, derecho al revés, pero yo no había dicho nada hasta el momento.

- Bueno, Aubrey ¿Qué te dijo Antonelli sobre el problema que investigamos? -Él se dirigió a mi, pero yo estaba cayendo dormida de nuevo.

- Nada.

- ¿Nada? -Preguntó.

- Nada.

- ¿Entonces de qué hablaron?

- No hablamos, el sólo me quería en su lado, es todo -Expliqué mientras lo miraba fijamente.

- Si no sabes eso, entonces cuéntame cómo te secuestró en tan poco tiempo -El cruzó sus dedos en forma de autoridad, mirándome aún.

- ¿De qué te sirve que te diga? -Pregunté.

- Si no me dices usaremos otras alternativas, ya sabes cuales son.

- ...Me sacó a bailar después de que canté, las luces fallaban y en ese tiempo aprovechó para llevarme a las habitaciones, me obligó a correr por muchos pasillos con una pistola, en un cuarto me quitaron el vestido y todas mis pertenencias después de unos cuantos golpes.

- ¿Te golpearon?

- ¿No sé nota?

- Después de eso supongo que te metieron a esa camioneta y te llevaron hacia su casa en dónde te encerraron.

Aubrey: Los Problemas del PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora