Obsesión: El Inició. (Sterek) [[BORRADOR]]

Capítulo 17.

Pov. Stiles.

No lo podía creer, no paraba de correr cómo idiota termine perdiéndome en la facultad. Aún no podía acostumbrarme por tan gran edificio. Sin darme cuenta choque con alguien y ese alguien era nada menos que Derek, si que tenía una suerte cómo pude y ocultando mi vergüenza me disculpé y salí corriendo. Me escape, sentía la miradas de muchas personas que vergüenza, pero algo que me alteró fue sentir que me llamara y siguiera, me oculte rápido en un aula que estaba vacío para mi suerte. Cuando salí el ya no estaba, suspiré y sentí como un extraño calor me bajo, sentía preocupación, además de sentirme ya el doble de patético. ¿Porqué rayos había escapado así? El me hablo y yo lo primero que hago es huir, que idiota más grande soy. Aunque, que podia más pedir, solo fue un error y nos chocamos por casualidad... Fue un accidente.

—Aun así, está más guapo. -sonrio como tonto, lo sé pero no podía evitarlo. —Hacia tanto que no te veía que pensé que nunca más te volvería a ver Derek. Me alegra que estés bien. -veo mis libros y los abrazo, si tan solo sucediera un milagro y no la cagara como ahora. Suspiro al pensar otra vez en ello.

Retando me todo el rato, llegó hasta el aula 20 de ingresantes. El profesor no está aún dentro, veo a Liam hablar con un compañero, me siento a su lado y como.si fuera un radar salta a preguntar que me ocurrió. Tan legible podía ser. Solo suspiro y no respondo, eso era demaciado vergonzoso y conociéndolo me haría los días imposibles. Tomo mi cuaderno y los apuntes de la semana anterior, pronto serían los exámenes y quería estar seguro de que entraría cueste lo que cueste.

—Ya lo descubriré, eres malo ocultando cosas. -suspira ante eso y sigo en la mía. Lo ignoraria, como casi siempre lo hago. Liam es muy pesado por eso se merece este trato de mi parte, más cuando él y su novia se burlan de mi en ocaciones. —Que cruel eres. -sonrió ante ese comentario, el profesor ingresa y comienza a escribir.

Estos últimos días habían sido la muerte, entre el trabajo, las diferentes reuniones familiares de los Dunbar, el instituto y para más los exámenes de admisión. Estaba más que exausto, mis ojeras eran un claro ejemplo de cuánto me llevaba todo esto. Mi trabajo había sido reducido de sobremanera. Y en estos días apenas podría llegar a mis citas con mis alumnos. Sentía mucha angustia al no poder llegar. Sé que me necesitaban como yo a otro cerebro sin uso. Aunque las que más me llenaban de mensajes era la pequeña Andy y Laura, ellas se preocupaban mucho cuando no podía asistir a nuestras citas, eran muy adorables. Las extrañaba en estos días, según Laura ella sigue repasando y quiere más dibujos como recompensa también que le regale un viaje al parque como premio por pasar al próximo año sin materias a adeudar. Me hacían el día cuando las escuchaba decir esas cosas y claro que les regalaría su premio. Laura es demaciado dulce, tanto que muchos dudaban que fuera una Hale. Su abuela también era alguien de carácter peculiar pero se notaba esa atención hacia sus nietos. Siempre hablaba de ellos e intentaba ser comprensiva, más que nada con el mayor. Sabía que hablaba de Derek y por lo que escuchaba era alguien que les ocasionaba muchas preocupaciones. No entendía mucho pero ser parte del un clan como el de los Hale era una carga muy pesada.

En fin, podía decir que estaba pasando unos buenos días a pesar de todo. Y aunque había pasado una gran vergüenza no hace tan poco, tenía algo de ánimos para seguir. Quizás la próxima vez que lo vea no sea tan tonto.
Se veía tan guapo, no podía sacarlo de mi cabeza. Ya quería llegar a casa y aunque sea un poco dibujar. Luego a estudiar, esto era realmente muy pesado, no pensé que fuera tanto lo que hubiera que memorizar. Estaba agotado y eso que el estudio era algo que me gusta mucho. Por lo menos no estaba como Liam, el parecía querer arrancarse los pelos cada día. Eso me hacía reír mucho, me entretenía de alguna manera con su desesperación.

Los Dunbar habían sido muy amables estos últimos meses, me sentía muy feliz con ellos. Mi padre había desaparecido como dijo que haría, la casa estaba casi abandona la mayor parte del tiempo. Siempre pasaba por allí a limpiar y ordenar un poco, también por las cosas de mi madre. Gracias a mis trabajos intentaba mantenerlos además de el dinero que mi padre había dejado a mi nombre, mis estudios estaban asegurado. Algunas veces deseaba poder escucharlo, quizás sonaba tonto o Liam cuando me escuchaba me miraba como si estuviera loco.  Si lo estaba en ocaciones, solo yo podía extrañar a un padre así. Pero, ya me sentía tonto repitiendo lo mismo.