Obsesión: El Inició. (Sterek) [[BORRADOR]]

Capítulo 24

Pov. Stiles.

No lo podía creer, seguro estaba en un extraño sueño o ya me había vuelto por completo loco. Derek Hale estaba cortejando me, osea a mí un simple chico, parlanchín, sin ningún bien más allá el de su propia vida e inteligencia. Ahora mismo estaba dibujando su bella sonrisa al dormir, no sabía que le gustará la naturaleza en lo más mínimo, algo para agregar a mi lista.

Derek descansa sobre mi regazo mientras la briza mueve con suavidad las hojas de los árboles y las aguas del pequeño lago a unos pies de nosotros. Su mirada tranquila y esa sonrisa me enamoraban a casa segundo han pasado dos semanas desde que salimos, Derek a estado actuando como todo un caballero y pasamos la mayor parte del tiempo junto. También conocí su departamente hace unos días, me quedé a dormir allí y fue lo más bonito del mundo, sus brazos a mi alrededor y su dulce beso de buenos días me iluminan el alma, había olvidado todo lo malo y horrible de mi vida. No quería que aquellos días se acabarán nunca mucho menos estos donde podía tener el placer de verlo así. 

Cuando lo vi por primera vez casi fue así, el descansando en un pequeño árbol del patio de la escuela, se veía tan relajado aunque nunca pude apreciarlo más que de lejos como en las canchas al jugar. Parecía un loco siguiéndolo de aquí para allá, pero no podía evitarlo era lo único que parecía llamar mi atención en esta vida. Mi padre donde quiera que esté no ayudaba mucho a mi niñez y menos después de aquellas cosas que me había empezado a hacer, sin dudas se había dejado perder por completo. Aunque eso me atormenta un poco si Derek se enterase que pensaría, quizás le daría repulsión o odiaría con vigor a mi padre. Si tan solo pudiera hablar de eso o evitar que se enterase y si mi padre volviera que se llevarán bien.

—¿En qué piensas Stiles? -su curiosa mirada me volvió de mis pensamientos, sonreí con timidez.

—No es nada. -sus manos se encaminan a mi cintura para atraerme un poco más a él.

—Esta bien, luego me lo dirás, sabes que puedes confiar en mí. -quizas tenía razón pero esto no era algo sencillo de hablar. El dulce sabor de sus labios se había convertido en una adicción para mí, no pasaba día o horas en los que me besara. Podía decir que no sabría cómo vivir sin ellos un día. —Me enseñarás ese dibujo. -me río y guardo el cuaderno.

—Quizas cuando lo termine. -veo su sería mirada y como levanta aquellas pobladas cejas en señal de asombro.

—Eso suena a que no me lo mostraras. -mira a otro lado como ofendido. Sin duda podía ser como un niño pequeño algunas veces.

Estos pequeños momentos que vivíamos cada día me hacían sentir en el cielo, Derek tenía muchas facetas y me alegraba ser alguien digno de conocer cada una. Aunque también tenía un carácter peculiar al enojarse, era mejor no meterse en su camino cuando se enfadaba. Lo vi hace unos días cuando un chico intento conversar mucho conmigo. Me sentía feliz de que me celara así pero pobre chico había perdido su trabajo por aquella discusión.

—Mañana que te parece si voy por ti y vamos a desayunar, luego te dejo en la facultad. -lo veo emocionado. —Tengo que ir al estudio a terminar unos trabajos después de ahi voy por ti y vamos donde quieras. -en esto se habían convertido los días, Derek era mi sombra mañana, tarde y noche.

—No sé si pueda... -veo que frunce un poco el ceño. 

—¿Porqué? ¿A dónde iras? -siento un poco de presión en mi cintura.

—Tengo que estudiar Derek, iré a la biblioteca con Liam después a ver sobre un empleo que me ofrecieron. -asiente no muy convencido.

—Ya te dije que no necesitas de un trabajo, pídeme lo que quieras. -ahi estaba de nuevo.