No quiero hacerte daño

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Sergio

Me tocó hacer un trabajo con Flavia, la chica que me gusta, no le dije personalmente a ella que me gusta, no la quiero hacer daño como lo hice con Catalina, nuestra relación comenzó bien pero poco a poco fue cambiando nuestra relación yo ya no le quería como al principio.

Tuve que decirle que lo nuestro ya no funciona, ella no quería que terminemos, dos semanas después le dije que me gusta otra chica. Ella se fue llorando y nunca más supe de ella, me costó poder olvidar su reacción cuando le dije que ya no la amaba, era la primera chica con la que duré más de dos meses, la otra chica anterior de ella fue cuando tenía 14 y di mi primer beso, fue una vez que jugábamos en la casa de uno de nuestros amigos y ahí empezó mi supuesto amor, creí amarla y me sentía de lo mejor al tener a mi primera enamorada, hasta que llego Catalina a mediados del penúltimo año, me quito eso que sentía y deje a la chica, fui conociendo de a pocos a Catalina y ya para el siguiente año comenzamos nuestra relación.

Después de ella me alejé de buscar una relación, quería un tiempo para mí, lo tuve y fue lo que necesitaba, pensé quedarme así un tiempo más hasta que conozco a Flavia semana después que entro a la universidad, noté algo en ella, algo que no vi en las dos últimas chicas con las que estuve, no sabía que era, si era la mirada o su forma de ser reservada y mantener su distancia de toda la clase, era algo y no lo descubría.

Flavia

Sergio y yo estábamos tan cerca que le podía besarlo, todo esto porqué sin querer nos movimos en el sofá, hablamos hasta que empezó a oscurecer, empezamos a escuchar música desde la tarde que terminamos el trabajo, estábamos a unos centímetros de besarnos, cuando mi celular vibró, era un mensaje de Ingrid y agradecí porque no seque hubiera hecho si pasara.

— Flavia, ya me voy es tarde — dice esquivando mi mirada

Entrelazo mis manos en mi rodilla — Si, te acompaño hasta la puerta, hablamos por WhatsApp, te parece

— Si

Le acompañé hasta la puerta, él me dio un beso en la mejilla y al instante sentí algo en mi cuerpo, como una corriente que recorría todo mi cuerpo en un segundo, se alejó de mí y dio media vuelta y se fue.

Flavia está conectada

Sergio está conectado

Yo: Hola

Sergio: Hola;)

Sergio: ¿Qué rápido pasó el día, no?

Yo: Si. Oye una pregunta, es por curiosidad...

Sergio: ¿Cuál?

Yo: ¿Te llevas bien con esa chica Laura?

Sergio: Si, aunque no hablo mucho con ella.

Yo: ¿No te incomoda que esté cerca de ti?

Sergio: No te diré eso, es como si yo te pregunté y tú no me quieras decir ¿no?

Yo: Si te lo diría .... mhm ...yo

Sergio: Disculpa por esa respuesta

Yo: Creo que me tengo que ir...

Flavia está desconectada

Sergio: Flavia no te vayas... Hablamos otro día.

Sergio está desconectado

Encierro (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora