Me levanto a las 12, poco más y es casi la hora de comer.Cojo el móvil y enciendo la pantalla. Más de 10 llamadas perdidas de Pablo y más de 100 mensajes suyos, nada de Alba. Vuelvo a bloquear el móvil después de quitar las notificaciones.
Pienso en lo que voy a hacer hoy, comer, tirarme en la cama, comerme la cabeza, llorar... No, me niego a perder un día por esto.
Me levanto de la cama y me visto, unos vaqueros negros que dejan ver mis tobillos y una camiseta ancha blanca. Bajo las escaleras.
-Elena- intento buscarla.
-Dime
-¿Te vienes?
-¿Dónde?- se sorprende un poco.
-Vámonos al centro comercial y comemos allí- propongo.
-Vale- corre a la habitación y se viste. Casualmente vamos muy parecidas.
-Ahora sí que parecemos hermanas de verdad- me río.
...
Llegamos al centro comercial, mi madre nos acaba de dejar en coche.
-¿Dónde quieres ir?
-Mmm- se lo piensa-. Pues..., ¿Zara?¿Pull and Bear? No sé, me da igual.
-Venga, vamos a Zara.
Entramos a la tienda y empezamos a mirar.
-¿Este jersey con esta camisa?- me los pongo por encima.
-Preciosa, como siempre- me río.
Después de toda la mañana buscando ropa, vamos a un restaurante.
Miro el móvil y tengo más llamadas que esta mañana.
-¿Vas a contestar?- pregunta Elena.
-No- bloqueo el móvil y lo dejo boca abajo.
...
A mitad de tarde, con muchas bolsas ya, llamo a mi madre para que nos recoja porque está lloviendo. Hemos hecho una muy buena compra.
-¿Qué tal lo habéis pasado?
-Súper bien- sonríe Elena y a mí se me contagia de ver su felicidad.
-Igual habéis comprado mucho...- mi madre se acuerda de algo y cambia de tema-. Por cierto Natalia, Alba, tu amiga ha venido a casa antes.
¿Cómo? Madre mía.
-¿Para qué?
-Ha preguntado por ti y creo que ha hablado con Santi- ¡¿con Santi!? No puede ser...
Miro a mi hermana con cara de querer morirme y ella se ríe.
...
Volvemos a casa. Intento que Santi no me vea, pero consigue localizarme.
-Nat, ven un momento.
-¿Qué quieres?- ojalá no le haya contado nada de lo ayer.
-Toma- me da un papel-. Es de Alba. Si quieres me voy y lo lees.
Ni siquiera contesto y abro el papel.
Hola Nat:
Espero que estés leyendo esto, porque si no mataré a Santi. Quería pedirte perdón por todo lo que pasó ayer. Suspuse demasiadas cosas y no quiero acabar mal contigo. Si no has visto ninguna llamada mía o WhatsApp, es porque ayer se murió mi móvil y te hablé con el de Pablo. Me gustaría quedar igual que antes contigo, no me importa que te gusta, yo también soy bisexual y me podrías gustar perfectamente. Bueno, me estoy desviando un poco. Si quieres verme, estaré en el parque de al lado del insti a las 20:00, solo estaré 30 minutos, si no vienes comprenderé que prefieres alejarte un tiempo y yo haré lo mismo.
Me seco la lagrimilla y miro el reloj.
-¡No puede ser!- me bloqueo al darme cuenta que ya son las 20 y 20.
El parque está por lo menos a 15 minutos caminando a un ritmo rápido y encima está lloviendo. Pienso rápidamente.
-No voy a perderla- me pongo una chaqueta con capucha y me asomo a la habitación de mi hermana.
-Vuelvo enseguida- le doy un beso y me voy corriendo.
Cojo la bici, aunque llueve bastante.
Empiezo a pedalear bastante rápido, no son más de y 30 aún.
Giro en la esquina, ya estoy a punto de llegar.
Consigo ver el parque, intento fijarme en Alba, y sí, todavía está allí. Acelero. Veo unas luces que vienen de cara, intento girar, pero es demasiado tarde.
...
