He llegado a casa, y ahora me siento muy rara. ¿Por qué la mirada de Alba me afecta tanto?
-No entiendo nada...- suspiro, cuando escucho la notificación de un mensaje en mi móvil. Es de Instagram.
@_alba_Soy Alba, no he podido decirte ni mi nombre, y me sentía un poco mal. También te quería decir que eres muy maja Nat
He olvidado todo por completo, ¿de qué hablaba?
Extrañada, entro al chat, y contesto:
@nat_x No te preocupes, a mí también me has caído súper bien. ¿Quieres que hablemos ahora?
A lo que ella responde que no puede, pero que me da su número para hablar más tarde...
-¡¿QUÉ?!- exclamo volviendo al mundo real. Ni siquiera sé de qué va esta chica, y le he dado mi número, un día me secuestran o algo...
...
- ¿Dónde vas Natalia?
-Tengo teatro, pero luego volveré para cenar. Te quiero mamá- digo mientras le doy un beso en la mejilla.
-Lleva cuidado.
Salgo a la calle, y empiezo a seguir el camino que recorro todas las mañanas para ir al insti. Voy escuchando música, ya que Pablo no me acompaña y no puedo hablar con nadie, ojalá se hubiera apuntado este año también.
...
-¡Aparta de nuestro camino flacucha!- aún existe gente tonta en el mundo. Sin hacerles caso sigo caminando.
De repente siento un empujón que me hace caer. Levanto la cabeza, intentando buscar al culpable, pero solo me cruzo con la mirada, que hasta hace unos días no había conocido, Alba.
Su cara no es la de esta mañana, tenía cara de sentirse mal, seguramente ese sería su grupo de amigos, del que Pablo me habló.
Después de unos minutos, entro por la puerta del salón de actos, para ver que solo había unas 10 personas.
-Ya pensábamos que no venías...- me muerdo la lengua, para no empezar a insultar a nadie.
-Se me ha hecho tarde, lo siento.
Afortunadamente Alba no está acompañada de su famoso grupo de amigos.
-Estábamos hablando de hacer un musical este año, y como la mayoría sois chicas, las protagonistas vais a ser 2 de vosotras. Pero no es solo eso, las protagonistas tendrán que cantar a dúo "She used to be mine", por lo que mañana empezaremos las audiciones- mi mente se niega a aceptar la idea de cantar en público, y menos si me tocase con Alba.
-¿Podemos no presentarnos?- alguien del fondo pregunta.
-Claro, pero tendrás un papel muy secundario- lo que me merezco-. Ya podéis iros si queréis.
Me levanto del asiento y voy caminando hacia la puerta de nuevo.
-Natalia, espera- mi cerebro sabe que es Alba, y mis piernas se siguen moviendo.
Más tarde, siento su mano que me agarra el brazo. Alba es más bajita que yo, supongo que era más difícil alcanzarme.
-Te prometo que no sabía que eras tú- me giro para encontrarme con sus verdes ojos.
-Y si hubiera sido cualquier otra persona, ¿le hubierais hecho lo mimso?
-Yo no soy así Nat, te lo juro
-Pues no demuestras otra forma de ser, no sé en qué momento te dije que estaba esperando a Lucas y te sentaste a mi lado...
Me giro, apartándole la mirada, pero ella me coge la mano.
-No te vayas- sus palabras no son suficientes para frenarme.
Vuelvo a mirarla a los ojos, y me suelta, dejándome marchar.
Creía que había encontrado a alguien que me entendiera y no me juzgara, pero al parecer todo el mundo está en mi contra.
...
-¿Qué tal Natalia?
-Súper bien- la sonrisa más falsa que he puesto nunca, pero mentir siempre se me ha dado bien.
Subo a mi habitación, y tiro el móvil con fuerza sobre la cama. Abro mi diario.
"Ojalá la gente fuera diferente."
