Capítulo 7.

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Era un gato.

Un gato nos había descubierto, Cigarette rió al ver a su propio gato en el techo, ¿cómo había subido allí?

No nos habríamos asustado si no fuese porque detrás de los maullidos del gato se oía una voz preocupada buscando a Cigarette.

—¡Cig, por Dios! ¿Donde demonios estás?— decía la voz de un adolescente, luego de esto una cabeza se asomó por la ventana e inmediatamente yo miré hacia otro lado. No quería que después fueran a hablar sobre nosotros dos.

Cigarette bajó por la ventana y entró al cuarto, yo me quedé donde estaba y me senté lejos del borde, para evitar accidentes ya que estaba un poco mareado.

Estaba a punto de quedarme dormido cuando escuché su voz.

—¿Quieres irte de aquí?— me preguntó Cigarette, quien ahora estaba sentado a mi lado, analizando cada centímetro de mi cuerpo alcoholizado.

—Contigo a donde sea— le dije, e inmediatamente me sentí estúpido. Pero el comentario hizo reír a cigarette y ver su sonrisa una vez más curó todos mis males.

—Anda, vamos a bajar—dijo, poniendo mi brazo derecho sobre sus hombros y me ayudó a bajar por la ventana.

Caí sentado en el piso del cuarto y esperé a que el bajara, apenas lo hizo lo abracé y le dije:

—¿A dónde me llevas?

—A un lugar donde por esta noche podemos hacer lo que queramos.

Resultaba que la casa de Cigarette tenía más de una salida, y nos escabullimos por la parte trasera, donde no había tanta gente, y la mayoría ya estaban borrachos.

Corrimos a la calle y el tomó mi mano.

—Te llevaría en mi moto pero yo también he tomado alcohol— me dijo riendo. Le sonreí.

Nos fuimos caminando hasta encontrar una propiedad completamente vacía. Solo habían algunos árboles y mucho césped.

Cigarette entró y yo lo vi sorprendido.

—¿Vamos a entrar a una propiedad ajena?— le dije.

—Si— me respondió sin vacilar. Su voz sonaba algo dominante así que me limité a seguirlo.

Encontramos un árbol lo suficientemente grande para treparlo y tras de varios intentos en los que ninguno de los dos lograba subir, decidimos acostarnos en el césped y relajarnos ahí.

—Si sabes que no puedo permitir que la gente sepa de esto, ¿cierto?— me dijo él.

—¿Por qué? Eres el rey del colegio, todos te harían caso aún si fueras un psicopata.

—Tal vez lo sea y no lo sepas— me dijo riendo, le pegué en el brazo y el fingió sentir dolor, a lo cual respondí tomándole la mano. —Es por que aun no estoy listo— terminó diciendo.

—Entonces yo no diré nada, hasta que tu puedas hacerlo— le dije.

—Si es que algún día puedo... No me conozco realmente, no se qué me gusta o que no, no se si debo hacer algunas cosas o no, no me siento cómodo experimentando y tampoco quiero quedarme solo el resto de mi vida, pero contigo es diferente, apenas te conocí sentí una atracción que no sentí por nadie, y eso me asusta.

—No sé por qué siento que no eres el tipo de persona que usualmente habla de estas cosas, ¿cierto?

El asintió.

—Tranquilo, yo no te voy a exigir nada, toma todo con tranquilidad, conócete a ti mismo primero. Por ahora, solo disfrutemos de la noche, ¿si?

Y dicho esto tomó mi cara en sus manos y me besó.

El sabor a cigarillo mezclado con... Strawberry lightning entró en mi boca, y supe que no le exigiría nada a el. Al fin y al cabo mañana podía despertarse y odiarme por lo que pasó hoy. Pero estaba seguro que yo ahora iba a estar profundamente enamorado de él.

Y eso nunca termina bien.

———
disculpen la demora <3
No sé que tal va quedando la historia y dudo mucho a la hora de escribir, aún así espero les guste el capítulo.

Mr. CigaretteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora