Hoy el océano es gris

Capítulo 7

Nos quedamos dormidos en mi cama.

Me despierto. Hoy no hace muy buen día. Me levanto y veo a Aslan mirando por la ventana.

- Buenos días, ¿qué hora es?

- Buenos días, las siete.

- ¿Las siete? - exclamo - es muy temprano, estamos en verano.

- Yo creo que deberíamos irnos antes de que haya gente paseando por la playa.

Me levanto y me acerco a él.

- Hoy el océano es gris - me informa.

- Igual que tus ojos. Una pregunta, ¿cómo visten las chicas en tu ciudad?

- ¿En Bimble? Igual que aquí, más o menos, la diferencia es que siempre visten como si fuera verano, ya que para nadar es más cómodo y a nosotros prácticamente no nos afectan los cambios de temperatura, y claro, no llevan zapatos.

- Entendido.

Aslan baja a preparar el desayuno y yo me visto con unos shorts rosa, una camiseta básica blanca y unos converse también blancos y un bikini rosa con topitos por debajo.

Cuando bajo a la cocina, Aslan está intentando hacer tortitas, yo le ayudo.

- No es bueno bañarse después de comer, hay que hacer la digestión primero.

Él se rie.

- No tienes por qué estar nerviosa.

Caminamos hasta la playa y nos acercamos a unas rocas altas que hay al final por si acaso alguien está paseando no nos vean.

Primero se introduce él en el agua. Se ha convertido en awor.

Me tiende la mano para entrar juntos en el agua.

- ¿Te doy asco?

- No, es que me da repelús tocar tus escamas.

- ¿No dijiste que la tranformación no era para tanto?

- Eso era de noche.

- Venga, ¿no me digas que a mi sirena le dan miedo los peces?

Saco el valor para agarrar su escurridiza mano. Nuestros dedos se entrelazan y nos sumergimos en el agua.

- Respira - me ordena.

Y respiro, esto parece lo más normal de lo que creía, Aslan nada despacio.

- Puedo hablar debajo del agua.

- Claro, ¿qué tal vas? ¿Aumentamos la velocidad?

- Bien, sí.

Aslan empieza a mover más rápidamente sus pies y pronto aceleramos.

Yo no nado, tengo los zapatos puestos, él me guía y yo siento el agua mover mi pelo.

- Primero te llevaré a un sitio - me dice.

Y nadamos hasta el sitio más bonito y exótico que he visto en mi vida. Una arrecife de coral. Millones de colores hacen que la superficie del océano que antes se veía gris, ahora llame la atención con la luminosidad de este lugar. Estrellas de mar lucen decorativas, las algas parece que estén bailando movidas por las corrientes, peces payaso surcan el agua por entre las anémonas.

- ¡Mira! ¡Es Nemo! - exclamo como una niña pequeña.

- ¿Quién? - pregunta extrañado Aslan.

- Nada - me sonrojo - Nemo es un personaje de una peli que me encantaba, era un pez payaso.

Él sonríe.