-Vi a Avril el otro día. -Gerard escucha a Mikey hablar, pero el sonido de su voz es vago y Gerard simplemente suspira, sin procesar bien lo que su hermano acaba de decir.
Mikey está de pie, con una taza de café entre sus manos delgadas, soplando el vapor hasta que sus gafas se empañan y suelta una maldición, limpiándolos contra su camiseta. Mira a Gerard, replanteándose seriamente si su hermano lo escuchó o acaba de quedarse dormido con la cabeza sobre la mesa o simplemente tomó más medicinas de las que debía tomar y está muerto. Mikey lo llama nuevamente, solo para estar seguro.
Gerard responde con un extraño sonido.
-¿Avril? Avril... -Repite su nombre varias veces, pestañeando lentamente hasta salir de su estado zombie y ver la figura de Michael, de brazos cruzados, mirándolo con el ceño fruncido.
-¡Gerard! -Pierde la paciencia, inclinándose para sacudir su hombro con insistencia. Gerard siente sus oídos retumbar y se encoge. Mikey intenta levantarlo, puesto que está tendido sobre la mesa como si fuese un suave colchón, sujetando una botella de vodka.- Dios, Gerard.
-Estoy bien. -Gerard contesta, con su voz de "he estado bebiendo todo el día", que es jodidamente molesta.
-No, no lo estás. -Mikey le quita la botella de las manos, ignorando sus reclamos y guardándola en el estante.- Y le diré a mamá que te has tomado todo su alcohol.
Gerard resopla, dándose por vencido, golpeando su frente contra la madera mientras reprime sus ganas de vomitar.
-Creí que te habían prohibido el alcohol.
-¿Quién lo dice? -gruñe arrugando la nariz en un gesto infantil, que resulta casi ridículo teniendo en cuenta su incipiente barba y su apestoso olor a sudor y alcohol.
-Tu doctor. -Mikey niega con la cabeza, llenando un vaso de agua y dejándolo junto con una aspirina a un costado de la cabeza de Gerard.
-Él puede irse a chupar pollas. -dice con sinceridad, sintiendo lo reconfortante de un vaso de agua entrando en sus sistema, tragando la pastilla y volviendo a dejarse caer como un peso muerto sobre la mesa.
Están en casa de sus padres, dado que dieron un show en Jersey, y en unos días se irían de gira con The Used durante marzo, por el Reino Unido. Lo que está bien, porque es lo mas lejos que han llegado y Gerard está emocionado, todos lo están. Pero también está demasiado nervioso. Porque, siempre existe la posibilidad de que todo sea un desastre, y Gerard no quiere arruinar esto, Dios, no quiere hacerlo. Además, Bert lo pone nervioso. No lo deja en paz.
-¿Cómo está ella? -murmura por lo bajo, pero Mikey lo escucha con claridad.
-Bien, en serio. Lucía muy contenta. -Gerard sonríe y Mikey saca una cajetilla de cigarrillos de su bolsillo.- Me preguntó por ti. Dijo que amaba a My Chem. Al principio no entendí a que se refería y luego dijo algo sobre escucharnos en un bar de aquí.
-Eso... -comienza y se interrumpe antes de poder hablar correctamente.- Eso me pone muy feliz.
-También me dijo que la llamaras. -La tensión inunda la habitación de golpe, latente entre el pequeño espacio que los separa, hasta que Gerard dice: "Lo haré", haciendo un gesto en el aire como si fuese un hecho, pero Mikey sabe que son palabras vacías, al menos en un futuro cercano. Mikey simplemente lo sabe
Marzo llega rápido y Gerard apenas tiene tiempo de darse cuenta (o de estar sobrio un par de veces) cuando ya están en el autobús, camino a su primer show en Wolverhampton. Gerard es tímido al principio, con nuevos técnicos de sonido y en un autobús que no los obliga a apretujarse en pequeños espacios para dormir y que no huele tan mal ni tiene manchas tan sospechosas como su furgoneta. Pasa la mayoría del tiempo con Frank, compartiendo besos furtivos y manoseos cuando ambos están borrachos, cuando Gerard no está triste y cuando Frank no habla por teléfono con Jamia.
Se quedan unos días en Londres, después de tocar en el teatro Astoria. Y telonear a The Used resulta ser más fácil de lo que pensaba, además de hurtar alcohol de otras bandas sin ser descubierto. Gerard se vuelve un experto en hacerlo, hasta que casi se lleva una paliza por eso en el callejón trasero y sale huyendo de allí porque es completamente incompetente en peleas físicas. Pasan la mayoría del tiempo en el autobús, simplemente vagando por ahí hasta que es hora de tocar.
🥀
Frank estornudó.
Ray volvió la cabeza hacia Frank y abrió los ojos.- Voy a... te veré más tarde, -dice mientras salta del sofá y sale del salón tan rápido como puede.
-¡Oh vamos! Fue solo un estornudo, ¡no estoy enfermo! -Le gritó Frank.
-Probablemente lo estés, -dijo Mikey desde su asiento al lado de Frank, sin apartar los ojos de su teléfono.
Frank lo miró boquiabierto.- No estoy enfermo.
-¿Estás enfermo? -Preguntó Gerard mientras subía al autobús.
-Oh, mierda, Frank -Brian apareció tras Gerard,- Nos quedan semanas aquí. ¿Necesitas que llame a un médico? ¿Te traigo algunos antibióticos?
-¡Estoy no enfermo! -Frank agita sus manos en el aire en señal de frustración. Frank choca su rodilla contra la de Gerard, que se había sentado junto a él, en busca de apoyo. Frank lo mira de reojo, tirando de la manga de su chaqueta.
-¿Estás seguro?- Gerard presionó su palma contra la frente de Frank, sin indicios de querer ayudarlo y Frank piensa que es un traidor y en que no le hará caso, pero luego se da cuenta de que eso solo lo haría parecer culpable.- No estás caliente. Tal vez estés bien.
-Claro que lo estoy. Estoy bien. -Todos lo miraron en silencio, con atención, aparentemente esperando algo.- ¿Qué están... -Frank estornudó.
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Nota:
Es bastante corto, pero necesario. Esto apenas comienza.
No quiero hacer spoilers, pero por favor díganme que no soy la única que no tenía idea de que Gerard tenía novia durante la época de bullets y revenge (hasta el 2006, wtf). Onda, para este fic investigo un montón porque lo quiero hacer lo más apegado a la realidad, y encuentro cosas que me desordenan la cabeza y que estoy ansiosa por escribir.
Anyways, por qué aún vivo en el 2004? :(
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Blood Infections {Frerard}
Fanfiction"Every night's our night, baby So stay with me, be with me Until the end of this world". Tal vez debería volarme la cabeza en pedazos, o pasar el resto de mi vida escribiendole poemas de amor a un vampiro.