Capítulo 22

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Pienso en quien pudo haber puesto la bomba ahí.

Se me vienen dos nombres a mi cabeza. Uno. D'Pietro. Y el otro, Carlo. ¿Por qué Carlo? Simple, segundos después de que se levantó para ir al baño la gente comenzó a gritar y el no regresó, así que el pudo haber puesto la bomba y salir de ahí a tiempo, o también podría estar muerto, quien sabe.

I'm a barbie girl suena sacándome de mis pensamientos así que lo cojo y atiendo sabiendo que es Josh por el tono de llamada.

-¿Qué averiguaste? - le pregunto

-No mucho la verdad, hace unas horas encontraron el cuerpo de Carlo con dos perforaciones de bala, una en la cabeza y la otra en el pecho, al parecer lo emboscaron en el baño y las cosas terminaron mal- me dice, pobre Carlo me caía bien, a pesar de haber pensado que el puso la bomba

Mala mía.

-¿Y sobre la bomba?- pregunto

-Aun nada, estoy trabajando en eso- me dice

-Me avisas cualquier cosa- digo y cuelgo la llamada

-Brujita ¿dónde quieres que ponga esto?- pregunta señalando las cajas de pizza que vamos a almorzar

-En la encimera por favor- le respondo pero me distraigo un poco al sentir al tatuado acercarse

-Deja de darle vueltas al asunto, el punto es que estamos bien- frota sus manos de arriba a abajo por mis hombros y me giro a verlo

-Quiero saber quien fue para poder matarlo- me explico y sin poder evitarlo paseo mi vista de sus ojos a su boca rápidamente

-Podemos averiguar quien fue- me dice haciendo lo mismo que yo y acercándose un poco

-Estoy en eso- le digo relamiendo mis labios y acercándome un poco más quedando a tan solo unos centímetros

-Yo podría ayudarte- toma mis antebrazos y desliza suavemente las yemas de sus dedos contra mi piel, por encima de las cicatrices haciendo que me ponga tensa y me salga de su agarre al instante- ¿Qué pasa? - pregunta confundido pero mis pensamientos se nublan por completo y empiezo a respirar agitadamente

Maldita sea, otro ataque no...



CADEN

-No vuelvas a hacer eso- me dice con la mano en su brazo izquierdo - No me vuelvas a tocar el brazo- empieza a caminar hacia la cocina entrando como en una especie de crisis nerviosa- No me toques el brazo, nadie puede verlas, nadie puede verlas, no puedo dejar que nadie las vea- empieza a murmurar las mismas palabras una y otra vez

-¿Brujita estas bien? - le pregunto y me preocupo al no recibir respuesta así que me acerco con cuidado y la abrazo por la espalda pero ella intenta apartarse

-¡No, déjame! ¡No me toques! ¡Déjame!- grita intentando salir de mi agarre pero no la dejo y hago que se siente en el suelo conmigo mientras le murmuro que todo esta bien y luego de un rato, sus gritos se van apagando hasta que todo es silencio

-Tranquila, todo esta bien, todo esta bien- sigo diciéndole y la giro en mis brazos para ver su rostro

-Y-yo... lo siento- me dice soltando un gran suspiro a lo que llevo mi mano a su mejilla y la acaricio suavemente

-No importa- contesto y paso la mirada de sus ojos a su brazo que aún tiene su mano sobre el - Puedo... - me entiende y despacio saca su mano de su brazo, dejándome ver lo que hacía un tiempo vi, cicatrices - ¿Quieres hablar de ello? - le pregunto y niega varias veces y la entiendo- Esta bien, no pasa nada- le digo y sigo acariciando su mejilla suavemente

LA JEFA DE LA MAFIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora