Solo ella...

Sus padres

Poche me invitó a comer a su casa al día siguiente. A decir verdad me sentía muy nerviosa, pues conocería a mis futuros suegros. Salí de mi clase y quedé de verme con ella en la cafetería.

"¿Nos vamos amor?" Me preguntó mientras me saludaba y me dio un abrazo; yo estaba temblando. "Hey tranquila bonita, le agradarás a mis padres. Eres un amor de persona Calle." Entonces besó mi frente y puso su brazo alrededor de mi cuello; rodé su cintura y caminamos hasta su coche.

Pasamos el camino cantando y riendo; manejando también se ve hermosa. Llegamos a su casa y nos estacionamos. Antes de bajar del coche, Poche me tomó la mano y me dedicó un beso rápido. Sentía que la calma invadía mi alma, estando con ella todo estaría bien. Me abrió la puerta y me abrazó "Todo estará bien amor" me dijo mientras caminabamos a la puerta de su casa.

En realidad sus padres eran más de lo que esperaba, la plática fue muy amena toda la tarde y la verdad la pasé muy bien. "El pollo esta delicioso señora" le dije a la madre de Poche dedicándole una gran sonrisa. "Gracias Calle, es un sazonado especial" y me dedicó una sonrisa agradeciendo.

Platicamos un poco de mí, pues querían saber más de la chica con la que salía su hija. También del fin de semana en Valle de Bravo, la madre de Poche se ofreció a hablar con la mía para explicarle los detalles. Su padre era un hombre muy culto y tuvimos una gran conversación acerca de problemas globales, vaya que Poche había sacado la inteligencia de él. También se intereso por lo que estaba estudiando "La carrera que estudías es muy interesante Calle ¿que te gustaría hacer en el futuro?" Me preguntó. "En realidad me gustaría hacer una maestría en el extrangero señor." Le respondí. Y ví un su rostro un gesto de aprovación. Poche tenía una hermana menor pero no se encontraba en casa, asi que no pude conocerla.

En verdad eran una bella familia, me sorprendía la forma en la que sus padres la apoyaban. Hubo momentos en los que Pocheme abrazaba o me daba pequeños besos y en cuestión de segundos me ruborizaba "Poche, estamos con tus padres" le decía en voz baja. "No nos están viendo amor, además no les importa" me susurraba al oído. E incluso sus padres nos decían que nos veíamos bien juntas, que les daba gusto que su hija estuviera feliz.

Piche me llevaría a casa, así que me despedí de sus padres y les agradecí sus atenciones. "Un placer conocerlos, gracias por recibirme en su casa y por la invitación del siguiente fin de semana" Me sentía un poco nerviosa aun. "El placer es nuestro Calle, Poche nos habló muy bien de ti y en realidad no se equivocaba. Aquí está tu casa y puedes venir cuando quieras." Me dijo su madre sonriente.

"Mamá ya debemos irnos porque se hace tarde y quedé en llevar a Calle temprano" Dijo Poche un poco apresurada. "Hasta luego y otra vez muchas gracias" Les dije cruzando el umbral de la puerta.

Salimos y subimos al coche. "Amor, mis padres te amaron. Ya no te dejarán ir jaja" Me dedicó una mirada muy tierna y deposite un beso en sus labios. "Para nada quiero irme bonita" le dije y nos fundimos en un beso. Vaya que me había hecho adicta a esos labios.