Te extraño

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Al día siguiente, Poche me escribió. "Perdón amor, regresé tarde de la escuela y me quedé dormida ayer. Buenos días princesa, éxito en tu examen" La sangre me hervía, me estaba mintiendo descaradamente. "No te preocupes, ¿quieres que te ayude hoy con tu proyecto? Mañana no tengo examen. Así podemos vernos, te extraño." Quería estar con ella y olvidar lo de Isabella .

Me contestó: "No te preocupes Amor, no me falta mucho, mejor descansa. Mañana nos vemos". No podía creer lo que mis ojos veían, seguro estaría con Isabella.

Poché:

Calle me ofreció ayuda para terminar mi entrega. Pero estaba con Isabella y no quería que hubiera problemas. Yo ya había terminado mi entrega, pero le estaba ayudando porque esa materia se le dificultaba mucho. Este tiempo que pasé con ella, me recordaron porque fue mi novia. La pasamos bastante bien y había menos dramas que con Calle. Debo aceptar que me gustó pasar este tiempo con Isabella . La extrañaba por lo menos como amiga, aunque confieso me dieron unas ganas de tener una última noche de pasión con ella. "¿Nos falta mucho para terminar Poche?" me pregunto Isabella mientras se acostaba en mi cama. Recordé la primera vez que se quedó a dormir en mi casa y me surgieron unas ganas de lanzarme sobre ella para besarla, pero me controlé. "Pues en realidad si, a la maqueta le faltan todavía muchas piezas." Le respondí. "Vamos por algo de cenar, yo invito. Necesitamos salir de aquí un poco." Me dijo y se puso de pie en un segundo. "Vamos, muero de hambre" le dije.

Tomamos mi auto y pasamos por hamburguesas, mientras manejaba tomó mi mano y dijo: "Perdón Poche, fui una tonta y no me di cuenta de lo que perdí. Te extraño mucho." Y no me soltaba la mano. "Ehh, te perdono Isabella . Yo también te extraño, pero ahora estoy con Day y lo sabes" Logré que soltara mi mano.

Le marqué a Calle para que no se preocupara, le dije que salí a cenar y que aun no terminaba mi entrega. Se hizo muy tarde y terminamos la maqueta cerca de las 4am. Me quedé dormida en el sillón y cuando desperté Isabella estaba junto a mí. Tenía su pierna sobre la mía y un brazo sobre mi hombro. Casi olvidaba que se veía linda dormida, la cargué y la llevé a mi cama. Cuando la acosté me dijo en el oído. "No sabes las ganas que tengo de hacerte el amor princesa" Con esa frase encendió una llama en mí. Aún sosteniéndome el cuello, me jaló hacia ella y me beso. Le correspondí el beso y se intensificó. Comenzó a abrir mi camisa y pasaba sus manos por mi cuerpo. La despojé de su playera y manoseaba sus pechos, vaya que extrañaba eso. Giró y quedó encima de mí y comenzó a besar mi cuello, mi pecho y mi abdomen. Al querer desabotonar mis pantalones la detuve. "No, no, no, no Isabella " me levanté rápidamente "No puedo hacerle esto a Calle, la amo demasiado". Isa me miró con algo de ternura y dolor. "¿En serio la amas verdad?" Y pude ver como soltó una lágrima. "¿En qué estaba pensando?" Empecé a llorar, si Calle se enteraba de esto me terminaría. En mi desesperación golpeé la pared y Isabella saltó en mi dirección. "Hey, tranquila poche. No se enterará, ya me equivoqué una vez. No lo volveré a hacer. Quiero que seas feliz aunque no sea conmigo. Ya entendí que perdí mi oportunidad. Ven..." Se acercó y me abrazó. Nos sentamos en mi cama y lloré hasta quedarme dormida.

Solo ella...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora