A la mañana siguiente me desperté temprano para ir a despedir a Poche al aeropuerto, era una sorpresa. Anoche le escribí una carta, en cuanto se fue ayer de mi casa la pasé todo el día llorando. Tenía los ojos hinchados y me dolía la cabeza, sólo esperaba que no estuviera demasiado enojada conmigo como para verme siquiera. Llegué al aeropuerto y comencé a buscarla. No quería llamarla porque era sorpresa.
Entonces a la distancia vi a su madre, me acerque y la salude. "Señora ¿Cómo está?" Pregunté algo apurada, pues aun no veía a Poche . "Calle, bien gracias y tu? ¿Buscas a Poche?" Me dio un gran abrazo. "En realidad si" E hice un gesto mostrándole una cajita que tenía en las manos. "Oh, ya veo... Ya no debe tardar, fue a comprar unos dulces con Isabella. ¿Quieres esperarla?" Al escuchar que estaba con Isabella, se me revolvió el estómago. "Ehhh no, ya debo irme. No quisiera interrumpirla si está con Isabella. ¿Podría darle esto por mí? Dígale que le deseo un buen viaje" Le di la cajita. "Claro, ahorita que regrese se la entrego. Qué lástima que no puedas quedarte a despedirla, sé que mi Poche te extrañará mucho." Me dio un gran abrazo y me fui rápidamente. "Hasta luego señora"
Poche:
No entendía la reacción de calle.Creí que teníamos oportunidad de volver, pero supongo que ahora está feliz con Ximena. Cuando llegamos al aeropuerto, detrás de mi escuché una voz: "Poche" Al girar vi a Isa "¡Isa" Se acercó a mi y nos dimos un gran abrazo. Conversamos un rato con mi madre y luego me acompañó a comprar unos chicles para el vuelo. "¿Estás lista Poche?" Me pregunto mientras caminábamos. "Pues... Creo que sí. Necesito estar fuera por un rato" le respondí. "¿Cómo van las cosas con Calle?" me preguntó muy curiosa. "Ni me hables de ella ahorita por favor" le contesté algo seria. Llegamos a la tienda, tomé los chicles y dulces, entonces nos formamos para pagar. De pronto sentí que por detrás rodeó con sus manos mi cintura y me susurró al oído "Te voy a extrañar ¿Sabias?" Me quedé en silencio unos segundos y giré para mirarla. "Yo también te extrañare Isa". Y nos abrazamos.
Cuando volvimos con mi madre tenía una cajita en las manos. "¿Y eso?" le pregunté. "Lo trajo Cale, me pidió que te lo diera y que te desea un buen viaje" La tomé mirándola un momento "¿Por qué no se quedó para despedirse?" pregunté mirando al suelo. "Dijo que no quería interrumpir si estabas con Isabella aquí y que debía irse" respondió mi madre. Sé que no le gustó que Isa se viniera a despedir, pero eso no justificaba que no se quedara para despedirse de mí. Era una pequeña cajita como de joyería y pensar que podría estar ahí el corazón que le di me partía el corazón. Me sentí molesta, simplemente la metí en mi mochila y no quería saber nada de ella. ¿Tan poco le importaba entonces... como para ni si quiera despedirse?
Me despedí de mi madre y de Isa partiendo rumbo al avión. El vuelo no fue largo y estuvo muy tranquilo. Me puse los audífonos y escuché música todo el camino. Cuando por fin aterrizamos, después de recoger la maleta y hacer los papeleos, mis tíos me esperaban. Me dio mucho gusto verlos, pues tenía ya algunos años de no visitarlos. Me llevaron a cenar y después llegamos a casa cerca de las 8:00pm. Estaba muy cansada, desempaqué un poco y me puse la pijama. Cuando saqué el celular de mi bolsa vi la cajita que me había mandado Calle y decidí abrirla...
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Solo ella...
RomanceUn día la vi y supe que debía conocer a esa chica tan hermosa. Jamás creí que pudiera enamorarme así de alguien, menos lo pensé de una chica. El tiempo dirá que será de nuestra historia