•••Una platica•••

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De vez en cuando miraba a Nam y veía como se concentraba en cortar las cosas, se concentraba tanto que ni siquiera se percataba de que lo veía, era como si temiera lastimarse demasiado, cuando termine con la pasta fui con el y prepare el resto mientras el se hiba y a sentar en la barra de la cocina...
-Puedo preguntar algo. - me dijo mientras observaba como preparaba lo que me hacia falta -
-Si
-Tu no eres coreana, así que ¿que haces aquí?
-soy de México mi familia y yo nos mudamos cuando yo entre a preparatoria, siempre había querido venir así que... Fue muy bueno.
-¿Te llevas bien con tu familia? -lo mire atentamente y luego continúe -
-Algo así, los problemas nunca fueron por nosotros, siempre eran terceras personas las que ocacionaban discusiones constantes. Ese día que fui al bosque acababa de discutir con mi madre, le dije que no volvería y mi hermana trato de detenerme, pero siempre me quede por ellas, así que... Ahora que no regresare se que cambiaran muchas cosas entre ellas.
-Lo siento...
-No es tu culpa, aunque no te hubiera conocido, no tendría el valor de regresar.
-Ya veo...
-Si, bueno ya esta la cena, prepararé la mesa.
-No, yo lo ago.
-Esta bien,
El salio de la cocina y yo me quede sirviendo la comida en los platos, el fue por ellos y me dijo que ya fuera a sentarme, durante la comida hablamos de muchas cosas, se daban temas muy normales y me sorprendía todo lo que el había vivido... Me entere que trabajaba en tres empresas reconocidas de las cuales no me esperaba que el fuera el dueño.
-Entonces eres millonario...
-Si, claro eso no importa mucho teniendo en cuenta el tiempo que he vivido.
-Claro, con inmortalidad me imagino que has tenido de todo...
-pues si...
-Es increíble
-Y tu...
-Yo llevo un año de haberme graduado, estaba trabajando en el hospital Yoon.
-y te saliste por...
-Tenia planeado regresar a México
-¿Te irías?
-Si, el mes que entra regresaría, después de el cumpleaños de mi hermana.
-Eso hubiera sido malo.
-Claro... Después de todo que varias tu sin mi. -reí -
-exacto -dijo un poco más serio que yo-
-¿Terminaste? - dije evitando lo que parecía una charla incomoda -
-Si.
-Entonces deja retiro los platos...
-Te ayudo
-No, esta bien
Me dirigí a la cocina y deje los platos, mire el reloj y eran las 6 de la tarde, fui nuevamente a el comedor y me senté.
-¿Y luego?
-No lo se... -un teléfono sonó - espera.
Se puso de pie y fue a el pasillo para contestar, Sonreí ligeramente porque no me terminaba de creer que un demonio tuviera un celular, era curioso, tanto tiempo vivo y estaba actualidazado. Pero ahora que lo veía,¿quien le podía marcar a un demonio?, me faltaba mucho para conocerlo como individuo.
El volvió a entrar a el comedor pero entró nuevamente serio.
-Mmmm tuve un asunto y te tendré que dejar sola...
-No hay problema, ve...
-¿Segura?
-Claro...
-Entonces me iré, si puedo te avisare cuando ya este aquí.
-Si,
El desapareció nuevamente de la nada y me quede en el comedor un rato, después me puse de pie y fui a limpiar la cocina, note que el gato ya se había ido, entonces Nam tenia razón, no se quedaba, termine y me dirigí a la habitación por mi libro, me acosté y empeze a leerlo, eran las 10:00 cuando baje a la cocina a tomar un bazo de agua y note que la luna tenia un color extraño, un rojo demasiado curioso como un atardecer en la misma luna.
Me dirigí a mi habitación y abrí la ventana de manera que también podía observar la luna acostada desde mi cama, me quede dormida rápidamente.
•••
El día que había comido con ella, habíamos hablado de muchas cosas, pero me habían llamado informandome que mi amigo Jimin había tenido un percance, eso le pasaba cada Luna roja y se me había olvidado que ese día seria una, así que me tuve que ir y dejar a T/N sola y cuando llegue ella ya estaba en su habitación, fui a la mía y me puse frente a el espejo, pase mi mano para que nuevamente apareciera ella dormida completamente abrazando una almohada, note que su cabello se movía con una brisa, pase mi mano y me refleje yo en el espejo, me transporte a la habitación de T/N para cerrar la ventana, vi que desde ella se veía la luna roja así que tal vez ella la había abierto para verla, cerré la ventana ya que empezaba a ser una noche algo fría.
Me gire hacia ella y la cobije, la mire unos segundos.
-Lo siento...
Cuando dijo eso pensé que estaba despierta, pero lo había dicho dormida, tal vez estaría soñando, ¿en que?, me transporte nuevamente a mi habitación y me metí a bañar, salí y me puse la toalla al rededor de la cadera y me mire en el espejo varios minutos, ¿Si era ella?, resultaría, mi padre no me hablaba y mi hermano sólo esperaba que yo fallara como el...
Diablos, estaba a poco tiempo, lo más seguro era que el pronto vendría y solo seria para molestar.
•••
Habían pasado dos días desde que había comido con el, no lo había visto desde entonces y yo suponía que el estaba ocupado, mi única compañía había sido Mauret que había regresado en los dos días pero se hiba al atardecer, que era cuando tomaba mi libro y seguía con mi lectura, ya llevaba la mitad puesto que leía horas y horas hasta que el sueño me exigía ir a acostarme, Me desperté y pase al baño, me mire al espejo y como las mañanas anteriores mire la marca en mi pecho, lave mi cara y salí de la recamara, era una mañana algo fría, tome del closet una sudadera y baje a la cocina, prepare mi café y mientras lo tomaba sentada en la barra entro Nam... Se veía algo distraido y serio, llevaba una camisa simple tipo polo de color azul y un pantalón de mezclilla.
-Buenos días -dijo mientras tomaba una taza -
-Buenos días.
-¿Como amaneciste?
-Bien, con algo de frío.
-¿Frio?
-Si, es una mañana fría ¿no?...
-Yo, no lo siento.
-Bueno, sera que soy un poco friolenta...
-Ah
-¿Café?-estire la mano con la cafetera-
-Si, - le serví hasta que la taza se lleno- gracias
-No hay de que...
-¿Te gustaría conocer a alguien?
-¿quien?
Me sorprendió la manera en que lo dijo, algo basilante mientras tomaba un sorbo a su taza como si ya no tuviera café, parecía como si lo quisiera decir con tranquilidad, pero honestamente no era algo normal entre nosotros, nada normal.
-Es un amigo, dijo que quería conocerte, a el... Se le es un poco más fácil socializar y tal vez te agrade.
-¿Vendrá hoy?
-Si, tenemos asuntos que arreglar.
-Esta bien...
-¿Enserio?
-Si, sera interesante... Creo
-Esta bien...
-Oye, estas algo distraido y no creo que sea por eso.
-No es nada... Iré a mi habitación.
Cuando se fue sentí la necesidad de detenerlo, nuevamente había visto un lado de el en el que parecía un joven con preocupaciones, que lo estaría preocupando tanto...
Seguí tomando café hasta que subí a mi habitación, ¿como seria el amigo de Nam?, ¿Tambien seria demonio?, ¿para que me quería conocer?, seria interesante, tal vez así sabría más de el, aproveché para acomodar mi recamara y cambiar las sabanas de la cama, cuando termine me senté en el marco de la ventana, estire y estire mi mano hasta empezar a sentir el dolor característico de mi pecho, aun intentaba irme, pero ¿si lograba salir que?, no regresaría con mi mamá, si lograba salir lo primero que aria seria irme a México otra vez... Tal vez no era tan malo quedarme con Nam, pero amarlo aun no era la opción más razonable, claro era guapo y no tenia una mala personalidad, pero aún desconocía muchos detalles de el... Y a la mala descubrí que yo nunca aprendí a amar, no es que me rompieran el corazón o las típicas relaciones de una adolescente, no,no era eso... Era que yo no sabia estar con las personas, me costaba mucho trabajo aceptar sus errores o defectos y siempre decidía ahorrarmelos, yo enserio no sabia como estar con alguien, así que si Nam me tenia para eso perdía el tiempo, me sentía mal por el, el realmente era una gran persona y me gustaría que liberara su poder, pero yo era la persona equivocada para eso. Mire y era hora de meterme a bañar, cuando termine me puse la tolla y me dirigí al closet, si iría un amigo de Nam tal vez seria adecuado usar un vestido, no muy formal pero lindo. Use una falda de tablones negra de altura poco más a las rodillas y una camisa de maga larga blanca y unos zapatos de piso, deje mi cabellos suelto y baje a la cocina, mire el reloj y eran las 5:56 así que no faltaba mucho para la llegada de el amigo de Nam, una brisca de aire se hizo presente desacomodando mi cabello.
-Hola...
-Agh, apenas y me arregle - dije con tono fastidiado-
-Lo siento -alzo la mirada y me vio por unos segundos -te vez muy linda
-Gracias.
Estaba segura que se me había creado un pequeño robor, y aun más porque el por unos segundos había centrado su mirada en mis mejillas, había sido un lindo detalle de el.
-¿Tu amigo ya llegara?
-Si, tal vez llegue pron... -Se escucho un leve toque a la puerta - llego, ven vamos.
Nam me tomo de la mano, en el momento en el que lo hizo tuve una sensación extraña, como si se hubiera creado una pequeña linea de electricidad, me llevo a la sala y soltó mi mano, me quede aun más tiempo digiriendo el suceso.
-¿Lista?
-Si, estas más nervioso tu...
-Bueno, el es muy diferente a mi... Es más alegre y guapo - dijo acercándose a la puerta -
-Lo dudo -dije de manera risueña -
Abrió la puerta y vi como aquel chico abrazaba a Nam entusiasmado, era más bajo de lo que esperaba, pero tenia que admitir que era un chico muy guapo, tenia unos hermosos ojos azules y una piel de color claro,tenia cabello de color gris, su aspecto era tan angelical que cualquiera diría que era un ángel y su actitud se veía demasiado linda, y eso lo comprobé poco después.
-¡Hola!, tu debes ser T/N estaba entusiasmado por conocerte - el me hizo una reverencia y yo conteste -soy Jimin... Park Jimin el mejor amigo de este chico. -Dijo poniendo un brazo en el hombro de Nam - eres más linda de lo que esperaba
-Gracias -dije algo nerviosa -
-De hecho demasiado para Nam.
-Calla -dijo Nam -
-Bueno entonces, ¿que haremos?
-Si gustas hay que ir a mi habitación
-Esta bien, ¿iras T/N?
-Mmm - mire a Nam y el solo sonrió -si claro.
-Perfecto, vamos.
Jimin camino hacia la habitación y Nam se puso a mi lado.
-Es muy guapo.
-Si...
-No te apures, no me gusta - empeze a caminar - ¿vendrás?.
Caminamos a la habitación de Nam, Jimin estaba sentado en un sillón y Nam se sentó frente a el.
-Sientate T/N...
-gracias.
No había sentado más que nada porque no sabia donde, si a un lado de Nam o a un lado de Jimin. Decidí sentarme a lado de Nam, el me observo hasta que me senté a un lado de el, lo mire y el solo sonrió.
-Entonces T/N... ¿Cuantos años tienes?
-Tengo 20,
-Balla, eres muy joven...
-Bueno, yo no diría joven.
-cierto, perdón tengo tu edad multiplicada al mil.
-¿Eh?...
-Jaja relajate... Sabes, te preguntarás como conozco a Nam...
-Si, pero no suelo hacer preguntas.
-Deberías, si no lo hicieras me aburriría, vengo a hablar con tigo
-Ya veo...
-Yo conozco a Nam porque soy como el...
-¿Eres su hermano?...
-¡Oh no!, no me gustaría ser ese sujeto...
-Jimin... -dijo Nam -
-Tranquilo, no T/N, yo soy el hijo de un demonio, claro no del mismísimo Lucifer, pero si soy el hijo de un demonio...
-Wow... Pues es bueno ¿no?,
-¿Tener a Nam como amigo?, es muy bueno.
-Y tener a Jimin también. -dijo Nam -
-Ah vamos amigo, tanto tiempo ha sido, que ya eres más un hermano.
-Tu igual...
Ellos reían de manera tan relajada que era así otra imagen de dos chicos despreocupados, Me había empezado a gustar cuando el sonreía sus ojos se alumbraban y se creaban unos hermosos hoyuelos, mientras reían el cruzo mirada con migo y me sonrió directamente a mi.
-Perdón por interrumpir, iré a la cocina, ¿Quieren que traiga algo?
-Solo trae agua, por favor.
-Esta bien. -Sonreí -

»» Un Demonio Te Necesita ««  ••• (Nam Y Tu)•••Donde viven las historias. Descúbrelo ahora