¡AQUÍ ESTOY! [All Might x OC] [One-shot]

¡Aquí Estoy!

Había sido un día exhausto, aunque aquella palabra no se comparaba con lo que Toshinori sentía en cada fibra de su cuerpo esquelético tras llegar de haber dado clases en Yuuei. Pequeña consecuencia tras llegar a su límite poco después de terminar con el entrenamiento de sus muchachos de la clase 1-A.

Una sensación de rabia cruzó por su cuerpo al no poder durar en su forma de héroe más de tres horas, a veces ni una sola clase, siempre buscando una excusa con los alumnos para poder alcanzar a llegar a su oficina o la sala de maestros, o la habitación de descanso y estar a salvo de que alguien viera su verdadera forma y, en el peor de lo casos, revelara tal información, haciendo que la sociedad perderá la fe en el héroe número uno, ¡que el gran pilar era solo una especie de farsa!

No podía sentir más que lastima hacia sí mismo al ver en lo que había terminado después de la pelea con All for One. Por culpa de su propia estupidez.

Patético, aquella horrible palabra inundo su cabeza deliberadamente. Sacudió la misma de inmediato, tratando de borrar cualquier rastro de pesimismo e introdujo la llave en la cerradura.

Lo único que quería era desparramarse en la cama y relajarse con ella entre sus brazos. Aquel faro de luz que había vuelto a su vida de manera inesperada, al mismo tiempo que alegó gran parte de su vida. Su dulce Sakata Hanako. Incluso pensar en ella en aquel momento, aliviaba su corazón.

De haber sabido que aquella heroína que había golpeado por accidente se trataba de una de sus grandes amigos que hizo en secundaria, hubiera dejado todo por hablar con ella el resto del día y saber que había sido de su vida durante.

Cuando habían quedado de inscribirse juntos en Yuuei, ella jamás llegó y poco después se enteró que se había inscrito en Shiketsu. No comprendió porque había hecho eso, jamás le dio una explicación y de plano corto todo tipo de comunicación, era como si se hubiera hecho otra persona; y con el paso de los años, su determinación a ser el pilar de la sociedad y heredar el OFA (One for All) fue olvidándola. Aun así el destino tuvo otros planes. Después de tantos años sin saber el uno del otro, Hanako fue aceptada como maestra en Yuuei y ahí volvieron a encontrarse, aunque seguía sin saber que se trataba de ella, nunca la había visto con su traje de héroe como también había cambiado de apariencia. La relación que empezaban a tener no era muy diferente a cuando eran más jóvenes: se sentía relajado y cómodo, que podía decir cualquier cosa y Hanako continuaría; podían hablar de todo y de nada hasta el anochecer. Sin embargo y por un descuido suyo, terminó por descubrir su verdadera forma, más su compañera optó por proteger su secreto sin siquiera pedírselo. Y tras el ataque de la Liga de los Villanos durante el entrenamiento de la clase A y que lo defendiera del casi golpe final de Shigaraki, arriesgando su vida tras agotarse su quirk, les dio oportunidad a ambos de sentarse a hablar con la verdad.

Después de eso, las cosas dieron un giro de más de trescientos sesenta grados. Al menos para bien.

"Estoy en casa", anunció con una voz serena, intentando ocultar su cansancio para no preocuparla. Miró el interior del apartamento con aire curioso mientras se quitaba los zapatos: la casa estaba en completo silencio. "¿Cariño? ¿Hanako?".

"¡AQUÍ...!", la estruendosa voz de una mujer de cabello negro como el carbón se extendió por toda la casa tras saltar desde las escaleras y aparecer en el pasillo. Había sonado más gruesa de lo normal, a lo que rubio enarcó una ceja. "¡...ESTOY!".

Una punzada cruzó el pecho de Toshinori con intensidad, que no pudo evitar llevar la mano al pecho.

Hanako estaba usando un pijama completo del diseño que había tenido su traje en la época de plata, mientras posaba los puños sobre sus caderas y mostraba las mejores de sus sonrisas. Imitándolo. Sin duda alguna, además del joven Midoriya y Nigtheye, ella era un fan admirable y comprometida de All Might. Parte de la habitación que compartían era prueba fehaciente de ello.