[NamJin] ¿Una familia?

• T R I G É S I M O C U A R T O •

~Mundo adulto a lo mini y escapada planeada.~

30 de diciembre.

Luego de haber pasado un gran rato en el restaurante y en los juegos del mismo la familia decidió retirarse dejando una pequeña propina para quien les había atendido. Se colocaron sus respectivos abrigos y los siete salieron fuera del establecimiento siendo guiados por Seok-Jin y Nam-Joon. —¿¡A dónde iremos appá!? ¡Quiero saber! ¡Dilo!

—No está muy lejos, aguanta un poco más y ya sabrás a dónde iremos. —Sonrió Joon viendo que Jimin y Jung-Kook se alejaban del grupo jugando distraídamente con la nieve. —¡ChimChin! ¡Kookie! ¡Vengan más cerca! —El de mejillas asintió tomando la mano de su hermano menor para traerlo más cerca del grupo.

—¡Appá! —Chilló Tae entre pequeños saltos estirando sus brazos para que Seok-Jin lo cargara en sus hombros. El pequeño una vez arriba peinaba los cabellos de su padre con cariño mientras notaba la nieve caer.

Caminaron alrededor de unas cinco manzanas antes de llegar a un gran edificio de pinta aburrida pero cuando veías por dentro este estaba muy colorido. —¿Qué es esto? —Inquirió Yoon-Gi deteniendo su paso en la puerta del edificio al igual que todos los demás.

La pareja sonrió abriendo las puertas del edificio dejando que los pequeños ingresaran, estando dentro Tae pidió bajar y todos observaron lo colorida que era la entrada. Estaban muy entretenidos los juegos de la recepción y no podía esperar a estar adentro ya que de seguro serían más geniales y entretenidos.
Jin y Joon compraron las entradas y con todo listo llamaron a los pequeños para ingresar, observaron a su alrededores los pasillos. —¿Se supone que estamos en un metro? —Inquirió Ho-Seok viendo que sus hermanos corrían por los pasillos bajo los ruidos de un metro falso. Seok-Jin asintió y Hobi sonrió corriendo con sus hermanos.

Una vez fuera del metro falso llegaron a una gran sala donde se observaban muchos juegos, los cinco pequeños frenaron su paso viendo a sus alrededores. No sabían para dónde disparar a jugar. —¡Mira! ¡Un supermercado pequeño! —Chilló Tae entre saltos corriendo directamente a lo nombrado, el escuadrón le siguió directamente metiéndose en el juego.

—Fue una buena idea, te lo dije. —Sonrió el de cabello platinado chocando los cinco con su pareja para luego correr al supermercado donde se llevaron la sorpresa de que todos estaban ya jugando y correteando por el lugar.

Yoon-Gi había tomado a Jung-Kook y lo había puesto dentro de un carrito, este indicaba en que pasillo se encontraban y le iba guiando directo al pasillo de las galletas.
Tae Hyung y Jimin hacían una carrera cada uno con su carrito mientras que Ho-Seok inspeccionaba el lugar muy impresionado. —Muy bien, ¡quién me traiga todos los ingredientes que yo diga gana! ¿Okey? —Los niños asistieron con grandes sonrisas listos para competir y conseguir todo lo que su padre les pediría.

[...]

Los siete pasaron una gran tarde entre distintos juegos: autobús en dónde Tae lo manejó a la perfección, televisión, doctor hasta pudieron trabajar en un pequeño McDonald's dónde Jung-Kook pidió mucha comida al igual que sus padres.
Aunque todos quedaron maravillados con el gran retrete gigante que había casi al final de las atracciones que era un tobogán gigante con grandes tubos por donde meterse y correr. También se montaron a coches que se movían de acuerdo al movimiento del volante y la verdad es que Hobi había resultado un buen conductor.

Se podrían contar los mil y un juegos que se montaron los pequeños pero sería una historia sin fin.

Estuvieron allí adentro como unas cuatro-cinco horas resguardados del frio y de la nieve. Luego salieron al patio de comidas donde tomaron la merienda bastante adormilados. —¿La pasaron bien? —Inquirió Seok-Jin viendo a sus pequeños sentados y muy tranquilos debido al cansancio, sonrió nuevamente y apoyó su mejilla sobre la palma de su mano. Encariñado con sus pequeños.